Dale al Stop

Puede que llegue tarde, pero recientemente descubrí gracias a Netflix ‘Derry Girls’, una comedia protagonizada por adolescentes de Irlanda del Norte, ambientada en los años 90, época en la que el terrorismo del IRA estaba en su punto más álgido. La serie no deja de ser una sátira de la sociedad de aquella época, desde el prisma de un grupo de amigas que narran sus peripecias en el instituto.

La maquinaria de Netflix no para, y algunas de sus últimas series se han hecho populares por su duración, entre otras cosas. Es el caso de ‘Bonding’ y ‘Special’, y es esta última en la que me quiero detener, una comedia que pasa rápido con un protagonista que engancha desde el primer momento, y con muchas cosas que contar.

Un episodio de ‘La que se avecina’ dura más que muchas películas, últimamente es habitual que la serie de los hermanos Caballero sobrepase la hora y media de duración, una aberración. Si a eso le sumamos que los capítulos de estreno cada vez empiezan más tarde, se juntan unas cuantas razones para dejar de ver la serie en directo desde Telecinco, y muchos nos pasamos a la opción de verlo en Mitele, u otras plataformas.

Aun así, ‘La que se avecina’ sigue arrasando en cada emisión, es líder todas las semanas en su franja, lejos de sus rivales. No es muy común que una serie que va por la undécima temporada, con una duración objetivamente larga y emitida a unas horas intempestivas coseche tan buenos datos de audiencia, a pesar de que en el episodio de esta semana se haya resentido el share, por debajo de la barrera del 20%, pero a su favor diré que se trataba de un día festivo, a las puertas de un puente en la capital.

Estuve a punto de abandonar la tercera temporada de ‘The Good Place’, pero por razones del destino he dado una nueva oportunidad a esta comedia que se me hizo repetitiva a mitad de su última etapa. Da la sensación de que andan en círculos, sin avanzar en sus tramas y reiniciando a sus personajes cada dos por tres, sin un objetivo claro, sin saber hacia donde están dirigiendo al espectador.

Este es el último de los cuatro especiales que he dedicado a los protagonistas de una de las comedias más longevas del momento, ‘The Big Bang Theory’. El mes que viene la serie se despide para siempre, y me apetece cerrar esta colección con el personaje más querido de la sitcom, Sheldon Cooper. No me cabe duda de que sin él no podrían haber sido posibles las doce temporadas de la serie de CBS, el trabajo de Jim Parsons ha sido imprescindible.

Cuando empecé a ver ‘Día a Día’ en Netflix pensé que sería la típica comedia de la que no pasas de la primera temporada, empalagosa y con nada nuevo que decir. Me equivoqué, sus personajes han ido evolucionando durante tres temporadas, y no solo ha habido tramas típicas de sitcom, algunas de ellas también se han alargado durante la corta historia de esta maravillosa comedia, dando momentos maravillosos.

La segunda temporada de 'Killing Eve' ha empezado a lo grande, continuando desde el mismo punto en el que dejamos a las dos protagonistas. Eve y Villanelle se hicieron toda una declaración de admiración, y después se acuchillaron mutuamente, como si se tratara de unas modernas Romeo y Julieta, pero con más violencia y odio. La villana salió peor parada, pero tiene más vidas que un gato, y se escabulló de la escena del crimen, dejando a la detective con la duda sobre si seguirá viva o habrá muerto en el intento de escape.

La primera etapa de la serie fue fantástica, cuenta una historia típica de una agente que está detrás de una asesina en serie, pero lo hace de una forma original y divertida. 'Killing Eve' no es un drama, sus puntos cómicos destacan sobre la acción, la tragedia o la intriga. Parece ser que en la segunda temporada van a seguir el mismo camino, y eso me alegra porque en los dos primeros episodios no han perdido la esencia de los inicios, algo por lo que temía.

La segunda temporada de 'Fleabag' se estrenará en España el 17 de mayo a través de la plataforma Prime Video, aunque los seis nuevos, y últimos, capítulos de la comedia de Phoebe Waller-Bridge ya han llegado a su final en Reino Unido. La espera ha sido larga, la primera etapa de la serie se emitió en el verano de 2016, hace ya casi tres años, y la historia continúa más o menos donde la dejamos.

Fleabag sigue con su pequeño negocio, en el que todavía ronda el fantasma de su difunta mejor amiga. En la primera temporada descubrimos cómo fue la relación con su socia, y la causa de su muerte. Ahora Fleabag se encarga sola de esta cafetería en la que organiza "miércoles de charlas" u otras ideas acordes con la personalidad de la protagonista. Ella sigue chocando con su hermana, Claire, con la que tampoco terminó bien la semana pasada, en gran parte por culpa del marido de la exigente Claire.

En la segunda temporada de 'This is Us' fuimos testigos, por fin, del percance que llevó a Jack a la muerte. Para muchos ese era el único aliciente que quedaba para seguir viendo la serie, pero NBC siguió alargando su drama. La ficción está llena de altibajos, cuando parece que ya han tocado techo y todo va cuesta abajo, los guionistas sorprenden con un nuevo giro que nos hace temer otra vez por la estabilidad de la familia protagonista.

La tercera temporada ha sido la más floja para mi gusto, ya venía de una segunda que me estaba empezando a cansar, y mi hartazgo se ha terminado de confirmar con el viaje de Kevin a Vietnam, y el consiguiente reencuentro con su tío Nicky, al que todos desconocíamos hasta la tercera etapa de la serie. Lo de sacarse personajes y dramas gratuitos de la manga se les da de maravilla en 'This Is Us', pero ese del hermano de Jack se me antojó prescindible y aburrido.

Movistar Series ha estrenado recientemente 'Justo antes de Cristo', una comedia diferente a lo habitual en España, con Julián López como protagonista. La serie sigue la línea de otras ficciones de humor de la plataforma, recuerda por momentos al bochorno de 'Vergüenza' o al gamberrismo de 'Mira lo que has hecho'. Pero comparaciones aparte, 'Justo antes de Cristo' deja claro que sigue su propio camino, con una historia que destaca sobre el resto de ficciones.

Julián López está espléndido como protagonista de la comedia, metido en el personaje de Manio Sempronio, un acomodado Patricio condenado a muerte que no es capaz de quitarse la vida con cicuta, ni de cualquier otra manera. Es un tipo cobarde y vago, acompañado siempre por su fiel amigo, y esclavo, Agorastocles, un hombre con ambiciones, pero que debe seguir los pasos de su amo.

Una década pasa volando, pero la televisión está en constante transformación, por lo que algunos espacios que hoy en día se emiten en la pequeña pantalla, en aquella época eran impensables, o viceversa. Actualmente, Telecinco no duda en ocupar tres prime-times con late-night incluido cada semana con el reality de turno, algo que antes no ocurría; o la duración de las series de televisión españolas se ha reducido en muchos casos, sobre todo en Antena 3 y en La 1 que se han comprometido a que no duren más de 60 minutos por capitulo. Cuatro está muy perdida, mientras que en 2009 estaba creciendo, y laSexta ha dado la espalda a casi cualquier formato nuevo que no esté relacionado con la política.

Movistar+ ha estrenado la segunda temporada de 'Skam España', con Cris (Irene Ferreiro) como protagonista de los nuevos episodios. La serie original creada en Noruega también se centraba cada temporada en un protagonista, aunque en sus cuatro temporadas no se llegó a indagar en la vida de Cris, el personaje más desconocido hasta la fecha.

La plataforma de Movistar ha acertado al innovar con la serie juvenil, alejándose de la original. En la primera etapa ya vimos algunos detalles que la diferenciaba de la noruega, pero en esta nueva fase han dado el golpe definitivo sobre la mesa para destacar del resto de adaptaciones y salirse del camino marcado por la ficción escandinava. La estrategia no le tiene porqué salir mal a 'Skam España', han decidido arriesgar, y solo eso ya es digno de aplaudir.