'Vis a Vis: El Oasis', la marea amarilla se seca

El regreso de 'Vis a Vis' ha sido duramente criticado, no solo por varios usuarios en redes sociales, también por los propios seguidores de la serie original que se hacían llamar “marea amarilla”. 'Vis a Vis: El Oasis' es muy diferente a lo que hemos visto hasta ahora en la serie de Fox España, de hecho, cuando la ficción dio el salto de Antena 3 al canal de pago ya se vieron unos cuantos cambios importantes que han vuelto a aflorar en la última etapa de la serie.

'Vis a Vis: El Oasis' no me parece tan mala como la pintan algunos, o al menos no creo que sea mucho peor que los capítulos que emitió Fox el año pasado. La historia en la que se centrarán durante estos ocho capítulos es dinámica y entretenida, si no buscamos los tres pies al gato y nos relajamos puede ser potable. Sin embargo, entiendo las discrepancias, en primer lugar, porque el nuevo grupo de delincuentes se ha creado de manera demasiado forzada. En segundo lugar, la relación de Maca y Zulema es todavía menos creíble fuera de prisión.

La trama de la boda y esa especie de motín que están maquinando las chicas lo encuentro interesante. Las cinco protagonistas se alojan en un motel desértico, que parece que es donde van a acontecer los hechos más importantes de la temporada. Están allí porque se infiltrarán en una boda como camareras, para robar el tesoro escondido en una caja fuerte, como si de una aventura de Indiana Jones se tratara. El Desierto de Tabernas y el clima árido de esta zona de Almería van a acompañar a Maca y Zulema en su nuevo recorrido.

El entorno envuelve al espectador, rodeado de una música que te evoca a las películas del Oeste y con un paisaje que explota demasiado su lado despoblado. Los exteriores se agradecen, pero para mi gusto pecan de exceso con los planos cortos, como si tuvieran miedo de mostrar más allá del decorado y el atrezzo que tienen montado para la historia. Esto, acompañado de unos diálogos planos y encorsetados, convierten ‘Vis a Vis: El Oasis’ en una producción más cutre de lo habitual.

Lo que más nos gustaba de Zulema no ha salido a flote aún en ‘Vis a Vis: El Oasis’, o al menos no lo ha hecho en todo su esplendor. Seguro que la mala leche de la morena no tarda en salir a relucir, y todo indica que el padre de familia que comparte motel con las chicas va a terminar probando de la medicina de esta peligrosa mujer.

La relación entre Maca y Zulema no hay quien la entienda, es difícil empatizar con esta pareja que tanto me gustaba cuando eran enemigas. Su alianza mola, hasta cierto punto, es otra trama que deben explotar, no me creo que acaben de amigas, y mucho menos por parte de Zulema. Aun así, parece que esta tiene escondido un as bajo la manga, y podría traicionar a su “nueva amiga” antes de lo previsto.

Los secretos que esconden los dueños del alojamiento en el que se hospedan pueden traer consecuencias, igual que las subtramas de la familia que forma parte de la boda. No obstante, los que nos hemos acercado a este “oasis” ha sido con un reclamo, el de las chicas de ‘Vis a Vis’ en general, o el de Maca y Zulema en particular. Se agradece ver una cara conocida, la de Itziar Castro como Goya, que está también más suave fuera de Cruz del Norte.

Se echa de menos el mono amarillo, como si ‘Vis a Vis: El Oasis’ no fuera suficiente para saciar nuestra sed. De todos modos, seguiré disfrutando de las pinceladas retorcidas de este equipo, que nos ha regalado un extra de ocho capítulos que a pesar de no ser lo mismo de antes ni de lejos se puede ver.

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