Padre hay más que uno, en las series

El Día del Padre está cerca, y aunque muchos no den importancia a una fecha señalada como esta, lo que no podemos pasar por alto es la influencia que un padre tiene en su hijo. Por suerte o por desgracia el padre es el que nos toca, no lo elegimos, y sino que se lo digan a los personajes de cualquier serie, porque en gran parte de ellas la figura paterna es decisiva. Pasotas, héroes, adictos, graciosos, bonachones... un sinfín de adjetivos para un sinfín de personajes que son padres:

Empezamos por uno de esos padres históricos que todos recordamos, la ficción nacional nos trajo en la década de los 90 a Nacho Martín, protagonista de la serie familiar 'Médico de Familia', valga la redundancia. Él siempre estaba atento a los suyos, tanto en los temas de salud como en cualquier otro obstáculo por el que pudieran estar pasando sus hijos. Nacho es un hombro en el que llorar, un padre comprensivo, pero con mano dura cuando es necesario. Esa misma línea sigue Imanol Arias en 'Cuéntame Cómo Pasó', el pilar de los Alcántara es una persona humilde y trabajadora, siempre dispuesto a luchar por la familia.

El que también luchó fue Jack Bauer en '24', la serie que lanzó al estrellato al actor Kiefer Sutherland. Bauer superó miles de adversidades, y muchas de ellas con el único objetivo de proteger a su hija, que entre secuestros y amenazas no ganaba para disgustos. El que se quiso ahorrar disgustos fue George Altman (Jeremy Sisto), el joven padre de 'Suburgatory', y por eso alejó a su hija Tessa de la Gran Manzana y la llevó a un barrio residencial, para que la adolescente no madurara tan rápido. Ahora Altman es un padre ligón, pero no se descuida ni un solo momento de la niña de sus ojos, la sobreprotección sigue siendo su bandera, esté donde esté.

Tener un padre que desprende buen rollo por los cuatro costados no tiene por qué ser siempre algo positivo, y sino que se lo pregunten a las hijas de Phil Dunphy ('Modern Family'), ambas se avergüenzan de él, pero su hijo pequeño no, para Luke su padre es como un amigo. Mientras que la mentalidad de Dunphy es como la de un niño, la del protagonista de 'Shameless', Frank Gallagher, no se distingue porque está intoxicada de alcohol. La familia Gallagher tiene un grave problema, y este obstáculo tiene nombre propio: Frank. El protagonista de la serie británica (ahora también en Showtime) pasa más tiempo de su vida borracho que sobrio, y su primera casa es el bar en el que gasta el subsidio que recibe del gobierno para cuidar de sus seis hijos.

William Walker también tenía una gran familia, con cinco hijos a su cargo, aunque temporada tras temporada de 'Cinco Hermanos' esa cifra bailaba. Walker no destacará como buen marido ni como buen amante, pero con sus hijos no lo hizo del todo mal, consiguió sacar adelante a todos ellos, y gracias a la atención (y a la economía boyante) del patriarca han tenido carreras prometedoras. En cambio, no es tan prometedor el futuro del pobre hijo de Antonio Recio ('La que se Avecina'), su padre le mandó a un internado de Irlanda para estudiar, pensando que así podría educarse 'como Dios manda'. La desilusión no ha hecho esperar, el vástago de Recio es homosexual, una elección que este padre conservador no deja pasar por alto.

Para terminar esta lista, que podría ser interminable, destacamos a las que son las joyas de la corona, unos padres que están en el extremos y que rozan el surrealismo. Primero destacamos a los protagonistas de 'Californication' y 'Hung', un adicto al sexo y otro que practica sexo a cambio de dinero, respectivamente. La hija de Hank Moody, Becka, ya está curada de espanto, pero su padre no deja de sorprender con nuevos escarceos y escándalos. Algo más discreto es el caso de Ray Drecker, aunque sigue siendo desconcertante tener un padre gigoló.

Puestos a elegir, es peor todavía que Walter White sea tu padre, un hombre con cada vez menos escrúpulos, fabricador de meta y regente de un negocio relacionado con la droga en Albuquerque y parte del extranjero. La chispa de 'Breaking Bad' es él, indudablemente, pero ¿a quién le apetece tener un padre así? Todo lo empezó haciendo por la familia y ahora ésta ha quedado reducida a un segundo plano. Lo contrario ha pasado con 'Dexter' Morgan, un asesino en serie sin corazón, sin intención de estrechar lazos con nadie, hasta que conoce a Rita y crea una familia con ella. El pequeño Harrison es todavía un niño, pero a medida que crezca deberá afrontar varios traumas surgidos por la sed de venganza y de dudosa justicia de su progenitor.

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