El final digno que esperábamos de 'Glee' ya ha llegado

Casualmente suena de fondo 'I Want to Hold your Hand', canción que Kurt versionó en la segunda temporada. Podría ser una buena manera de despedir el Glee Club y a todos los chicos que han pasado por ahí, porque pese a no ser el final de la serie, para mí 'Glee' termina con el capítulo 5x13, ¿para qué esperar más?

Es inútil esperar a que vuelva aquella esencia perdida tras los primeros trece capítulos de la comedia musical, porque ya ni siquiera es una comedia, dramatizando todo lo que tocan nuestros protagonistas y dejando como algo lejano aquella ironía que caracterizaba al primer contacto que tuvimos con la serie. De las primeras en mostrar un entorno de instituto con tono ácido, detrás vendrían otras como 'Awkward' o 'Suburgatory'.

Es una lástima que 'Glee' se haya terminado convirtiendo en una caricatura de sí misma. El colmo ha sido esta quinta temporada, en la que las últimas adquisiciones del Glee Club han demostrado no tener nada de gancho, repitiendo lo que en etapas anteriores hacían Finn, Rachel o Quinn, otra vez lo mismo pero con menos entusiasmo y con peores actores.

Nos podría quedar el consuelo de la historia paralela que transcurre en Nueva York, pero ni siquiera eso es suficiente para tirar del carro. Las audiciones de Rachel y Kurt ya aburren, y sus historias nos las podrían ahorrar con un spin-off dedicado al ego de estos dos personajes. Al menos contábamos con Santana como contrapunto en el apartamento neoyorquino, pero su presencia no ha estado para nada aprovechada, liándose con una camarera sin carisma (todo por que se luzca Demi Lovato en un par de escenas).

En Ohio todo parece que ha terminado, el instituto no interesa sin el Glee Club, al menos no en una serie que se hace llamar 'Glee'. Además, muchos de los protagonistas se marchan de allí para emprender nuevos caminos, yéndose muchos de ellos a Nueva York para mantener de algún modo su continuidad en la nueva andadura de la serie.

La audiencia ha bajado considerablemente, y no es para menos. La protagonista indiscutible, Rachel Berry, no encuentra su sitio desde la muerte de Finn. Los guionistas están alargando demasiado la transición y el duelo, y parece que va para largo porque dudo que Rachel embarque en una nueva historia de amor en lo que queda de año, porque está confirmado que 'Glee' terminará tras la sexta temporada. Y puede que la última temporada sea reducida, tal y como están las cosas...

¿Realmente es necesario alargar la agonía? Un año es mucho para una serie que está tocada y semi-hundida, tanto en audiencias como en creatividad, ni siquiera las canciones son lo que era, y las versiones cada vez dejan más que desear, siendo simples copias de las originales.

'Glee' fue pionera como serie musical contemporánea en sus inicios, pero ha ido consumiéndose hasta convertirse en rescoldos de lo que fue. Me quedo con los capítulos 100 y 101, buena manera de cerrar un ciclo, por la puerta grande, algo que algunos dábamos erróneamente por perdido. Incluso puede que me esté equivocando de nuevo y algo grande esté por venir, pero son muchas las oportunidades que he dado a esta serie, así que mantendré en mi memoria a Brittany y Santana de vuelta juntas en Nueva York, Quinn y Puck empezando una vida juntos, y el resto persiguiendo su sueño sin desistir.

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