'Vis a Vis' termina como una parodia de lo que fue

Hace menos de un año empezaba en FOX España una nueva etapa para 'Vis a Vis', la tercera temporada prometía distanciarse de lo que Antena 3 había hecho en sus dos primeras entregas. Las cosas a favor que nos mostró el canal de pago ganaban por goleada a los puntos negativos de la serie, pero con el paso del tiempo, esos puntos positivos me han parecido cada vez más cuestionables.

Hizo bien en reducir la duración de cada episodio, en girar a un tono más crudo sus tramas, con escenas que han rozado el gore en algunos casos. Sin embargo, en la cuarta temporada, ese surrealismo ha tocado techo, y no hablo de las cándidas tramas surrealistas que nos vendieron en las primeras temporadas, que nadie se las creía, pero formaban parte de esta gran ficción, sino de las incoherencias que se han dado sobre todo en el tramo final.

La tercera temporada acabó con Maca en coma, y Saray y Zulema en un coche peleando por sobrevivir la una de la otra. Un par de episodios después todas son tan amigas, y no hay quién se lo crea. Además, a mí me pasó en varias ocasiones, que ya no sabía si en un momento dado algunas de ellas eran amigas o enemigas. Tantos giros sin sentido terminaban mareando al espectador, dando la sensación de que estaban haciendo por hacer.

Las dos últimas temporadas se han centrado en Zulema, haciendo de menos a otros grandes personajes que tenían en plantilla. Rizos ha sido ninguneada, tal vez por petición de la actriz, pero tengamos en cuenta la historia de amor que tuvo en la tercera temporada, totalmente innecesaria y muy forzada, con una policía a la que no nos dio tiempo a coger cariño. Lo mismo ha ocurrido con otros personajes que prometían y han acabado saliendo de 'Vis a Vis' demasiado rápido, sin darlo todo. Es el caso de Altagracia, pero podríamos mencionar también a la hija de Zulema, a la política corrupta o a las sobrevaloradas chinas, que más que miedo daban risa.

Fui un gran seguidor de 'Vis a Vis', pero la decepción ha sido tan grande en su última etapa que solo se me viene a la cabeza lo más negativo del drama carcelario. Sin embargo, para ser justos, he de resaltar lo mejor que nos ha dejado una de las series más arriesgadas de la televisión española. Traer esas tramas de acción a nuestra televisión, con mujeres como protagonistas absolutas y lejos del estándar que muestran otras series convencionales, es de aplaudir, con un guión enrevesado pero fiel a su público, con guiños por doquier.

La vuelta de Maca ha sido el mejor guiño que podían hacer para cerrar la serie, pero la muerte de Sole también ha tocado el corazón de los más fieles. Las últimas palabras de la presa que estaba sufriendo principio de Alzheimer no están solo dirigidas a sus compañeras de prisión, también nos podemos dar por aludidos los espectadores. De hecho, Sole hace mención a la "marea amarilla", la misma que desde fuera hizo posible que 'Vis a Vis' sobreviviera más allá de la segunda temporada en Antena 3.

Respecto a los nuevos personajes, Goya ha sido un gran descubrimiento, Itziar Castro lo ha bordado, y sus apariciones siempre daban el toque de humor que la serie necesitaba. Altagracia empezó poco creíble, pero fue un acierto hacer que se aliara con Zulema, para después convertirse en una presa fugada muy peligrosa. Lástima de su final, sin exprimir al máximo lo que podría haber dado de sí ese personaje en la cárcel. Otros rostros que se han mantenido en segundo plano también han contribuido al buen hacer de la serie, como Luna, la reclusa transexual, o la siempre fiel Tere, por la que sufríamos cada vez que recaía.

Y es que Tere ha protagonizado el final de 'Vis a Vis', con una escena bastante innecesaria y poco original, donde nos muestran el futuro de cada una de las protagonistas. En su línea poco creíble vemos que a todas les va fenomenal, incluso a Maca y Zulema, que se han unido para delinquir juntas, sin que sean atrapadas en ninguna de sus fechorías. La peor parte se la lleva Rizos, que prefiere estar encerrada antes que en libertad, por no hablar del desenlace de Sandoval, merecido, siendo abatido por las presas a las que tan mal ha tratado, aunque ellas tampoco fueran angelitos.

Tardaremos en ver una serie que levante pasiones como 'Vis a Vis', pero personalmente pienso que la ficción debía acabar más pronto que tarde. El final no ha sido del todo abrupto, estaba lleno de guiños de despedida, y es lo mejor para una serie que ha ido de más a menos, con momentos de gran lucidez por el medio del camino. 'Vis a Vis' acaba, pero la Marea Amarilla no muere.

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