Vertiginoso estreno de 'Gran Hermano 14'

El año pasado los responsables de 'Gran Hermano' dejaron el listón muy alto, la edición 12+1 nos trajo sorpresas semana tras semana, alguna más currada que otra, pero los guionistas del programa tuvieron la necesidad de dar la vuelta al formato, la casa o a los propios concursantes cada siete días. Lo hicieron de una manera sublime reinventándose a sí mismos una vez más, y con esta premisa va a ser complicado que la decimocuarta edición supere en calidad y tensión a la anterior.

Por mi parte, hasta el momento, no he perdido la fe en el formato, el original (rechace imitaciones). 'Gran Hermano 14' no ha entrado pisando fuerte, pero realmente ninguna Gala 0 lo hace, siempre me parecen lentas y con pretensiones que no cubren expectativas: una vaquilla en el jardín, entradas boca abajo, quedándose en ropa interior, o lo último, caídas al vacío. La idea del vértigo creo que nos perseguirá durante toda la temporada, pero en la primera gala ha quedado muy soso el concepto, con saltos cutres y sin emoción alguna (no le vendría mal al equipo darse una vuelta por Port Aventura para saber lo que es la adrenalina).

Saltos y vértigos aparte, lo que de verdad importa en el primer contacto es la presentación de los concursantes, la cantera de este año promete, y el perfil parece que será similar al del año pasado: gente joven con ganas de divertirse y vivir una experiencia inigualable. Puede ser que se hayan pasado con los guapos y guapas, deberían haber metido más gente normalita, aunque no llegan a los extremos de 'Gran Hermano 12', en el que Guadalix se llenó de descartes de 'Mujeres y Hombres y Viceversa'.

De todas las entradas me quedo con dos, una es la de Lorena, esa broma que gastaron a la inocente valenciana fue una manera amena de llevar a cabo una gala complicada. El caso de Álvaro es la segunda entrada con la que me quedo, él si que sintió el vértigo, el pobre madrileño tuvo que pasar por la consulta del médico sin ni siquiera conocer el nombre de sus compañeros, sería una pena que no pudiera seguir en el reality-show, se le vio tan dispuesto a todo.

Ellos pusieron el toque de humor a la velada, junto a la dicharachera Argi o el imitador (pesado, muy pesado) Iván. Otro acierto basado en la última edición del programa, teñir los vídeos y las galas de humor, algo que hacía mucho que no pasaba en 'Gran Hermano', se centraban más en peleas o líos amorosos que en los momentos cómicos, que haberlos haylos.

La anfitriona es otra que no decepciona, Mercedes Milá se pone al frente de la gala y da igual lo que le echen, la final del talent revelación de la competencia, un partido de fútbol o la serie estrella de La 1 (cuando competían contra 'Cuéntame Cómo Pasó'), siempre aguanta el tipo. Este año están tanteando el terreno antes de asentarse en un día de la semana, desconociendo cuál será el día definitivo elegido por Telecinco para emitir las galas de 'Gran Hermano 14'. Confío en que no hagan dos galas semanales como en al recta final del año pasado, podrían quemar el concurso a toda pastilla, y tras los datos del estreno podemos afirmar que está algo debilitado (a la espera de próximos resultados).

La casa es una preciosidad, espacios amplios para los trece concursantes (hasta ahora) que irán relevándose gala tras gala, ya que el casting sigue abierto y cualquiera puede ocupar una de las plazas que se completará cada semana. Seguramente 'Gran Hermano 14' se guarde un as bajo la manga, la fórmula de las nominaciones o las expulsiones puede variar, ni siquiera sabemos cómo dividirán los puntos los concursantes este miércoles, pero en eso consiste 'Gran Hermano', el secretismo es uno de sus fuertes.

Antes de hacer valoraciones precipitadas debemos dar una oportunidad a esta nueva senda que parte desde Guadalix con personajes que seguro harán reír, llorar, odiar o amar; ¿hasta qué límite nos harán sentir el vértigo?

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