(Contiene spoilers de la tercera temporada)
Los vampiros han cerrado el chiringuito por tercera vez, aunque en esta ocasión el final no ha superado a las anteriores entregas, ya que no hemos podido disfrutar de una season finale con acción y con intriga como en los dos primeros años. Esta vez la historia se ha centrado más que nunca en el triángulo 'amoroso' formado por Sookie, Bill y Eric, que todo hay que decirlo, están en un plan más aburrido que nunca.
Muchos de nosotros sabíamos que a lo largo de la tercera temporada iban a aparecer los famosos 'hombres lobo', pero nunca imaginamos que 'True Blood' se iba a llenar de seres extraños, porque una cosa es dar juego con vampiros que quieren pertenecer a la sociedad humana e introducirse en ella como unos ciudadanos más; y otra cosa, es lo que nos exponen en los últimos episodios de la serie, que cuenta con personajes como hadas, brujos o mujer-pantera, entre otras rarezas.
Pese a estas idas de cabeza de los responsables de la serie, 'True Blood' sigue interesando (no hay más que ver los resultados de audiencia que cosechó en su último episodio emitido por la HBO). Los extraños problemas de Sookie Stackhouse y sus vecinos de Bon Temps (Louisiana) tienen un ingrediente secreto que hace que te enganches a ellos, aunque te parezcan las tramas más estúpidas e ilógicas jamás conocidas.
Como he comentado anteriormente, la tercera temporada ha sido mucho más floja que las anteriores, con demasiadas tramas secundarias que no interesaban y con personajes veteranos que ya no dan más de sí (como puede ser el caso de Jason, Tara o incluso Sam). De todos modos, la nueva entrega no pudo empezar mejor, el primer capítulo fue grandioso (como ya comenté aquí hace tres meses), pero la historia se ha ido deshinchando hasta quedarse en algo más bien mediocre. Por ejemplo, ¿dónde quedó aquella escena de tensión entre Sam y Bill? Pese a ser un sueño, muchos esperamos que aquello diera para más, pero de repente tuvimos que conformarnos con la búsqueda del pasado de Sam, lo que nos trajo al deprimente hermano que no sabemos si es bueno o malo, o si está vivo o muerto (personalmente, no veo a Sam como un asesino).
Por otro lado, tanto la historia de Tara como la de Jason han sido extremadamente cansinas, siendo lo más interesante el secreto que ha guardado el hermano de Sookie hasta casi el episodio final, confesando a Tara el asesinato de Eggs. El resto ha sobrado: la relación entre Andy y Jason, la mujer-pantera, la depresión de Tara y hasta el corte de pelo de la misma. Quizás lo más intrigante fue el mestizo vampiro y hombre lobo, Franklin, que todavía espero que aparezca en la cuarta temporada.
En cambio, Lafayette es una de mis debilidades, es un personaje entrañable y con grandes matices, aún así, he de decir que ha sido su peor temporada; eso sí, deseo que Jesús no le falle y puedan ser felices también en la cuarta temporada. Eso de que el nuevo ligue de Lafayette sea un brujo y haya mostrado su cara monstruosa en una de las alucinaciones del cocinero no me convence, habrá que esperar a junio del año que viene para saber como avanza la trama.
Y Jessica, la gran Jessica... ¿que ha sido de ella en estos 12 capítulos? A penas ha aparecido, fue el descubrimiento del año pasado y en esta temporada no hemos podido disfrutar del todo de su presencia. Espero que los responsables de la serie le den el protagonismo que merece en la próxima entrega, ya que ella junto a Hoyt hacen una muy buena pareja.
He dejado para el final la historia con más peso, la de los protagonistas. En este caso, los problemas con los recién aparecidos hombres lobo y con las jerarquías de reyes y reinas nos han regalado un nuevo personaje, más interesante que muchos de los veteranos, me refiero a Russell, el vampiro ambiguo que ha sido enterrado en cemento. El trágico desenlace no creo que sea un punto y final, ya que es posible que Russell pueda salir de su peculiar nicho y siga dando juego el año que viene.
Otra duda que queda en el aire para la cuarta etapa de la serie es el rol que interpretará Bill Compton, ¿será malo? ¿será bueno y volverá a hacer lo que sea por su amada? ¿ganará la batalla contra la Reina? Esta última duda creo que tiene una respuesta obvia, ya que la serie no sería lo mismo sin el eterno amor-odio entre los dos protagonistas, pese a que Eric cada vez esté más presente en el corazón y en la mente de Sookie.
¿Lo mejor? El primer capítulo
¿Lo peor? Los nuevos seres extraños
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