El canal británico BBC One estrenó hace unas semanas 'The Missing', la historia de un padre que busca insistentemente el paradero de su hijo y la razón por la cual desapareció ocho años atrás. La premisa nos puede sonar por otras series y películas que recurren a la misma temática, pero en este caso cada detalle está estudiado minuciosamente, y la narración nos envuelve en una atmósfera fría, haciendo que empaticemos con el protagonista desde el primer momento. Además, es todo un acierto que nos cuenten la historia mediante saltos en el tiempo, intervalos que pasan desde el año 2006 hasta la actualidad.
'The Missing' se ha estrenado ya al otro lado del charco, Starz emite actualmente esta serie compuesta por ocho capítulos en los que nos adentramos en el universo de Oliver, un niño que ronda los cinco años y desaparece repentinamente sin dejar rastro. Lo curioso de la historia no es la investigación que se lleva a cabo los días posteriores a la tragedia, sino ocho años después, cuando las aguas deberían estar calmadas, pero no lo es en el caso de la familia de Oliver, especialmente en el caso de su padre, Tony.
Hay tantas similitudes como diferencias en comparación con otros dramas del mismo género ('
Twin Peaks', '
The Killing'...);
en 'The Missing' el protagonista es el padre del chico, que ocho años después abre el caso de Oliver porque ha encontrado indicios que apuntan puede estar vivo, o al menos conocer su paradero. En otras series de similar corte los protagonistas son los policías o detectives que llevan a cabo el suceso, pero aquí éstos están en segundo plano, a la sombra de Tony y su peculiar forma de investigar la desaparición de Oliver.
La madre es otro pilar en 'The Missing', aunque ella ha intentado rehacer su vida con uno de los policías que intervinieron en 2006 en el asunto de Oliver. No obstante, para Emily es difícil pasar página incluso casi una década después, y ahora que sabe que Tony está tras la pista es más complicado todavía. La interpretación de la madre (Frances O'Connor) está por encima de las expectativas, aunque el resto del reparto no se queda atrás, empezando por James Nesbitt (Tony).
Otro conflicto abierto en 'The Missing' es la localización, el pequeño Oliver desaparece en un municipio francé, donde está pasando las vacaciones junto a la familia; por eso Tony se ve obligado a mudarse allí para seguir de cerca los últimos pasos de su hijo.
Las diferencias lingüísticas o demográficas saltan a la vista en la serie, unos contrastes que recuerdan a '
Bron/Broen' y su forma de exponer dos realidades idénticas en dos territorios diferentes. Aunque en esta ocasión los protagonistas apenas salen de Francia (pese a estar grabado realmente en Bélgica), pero ellos son londinenses.
Puesto a comparar,
'The Missing' viene a ser la sucesora de 'Broadchurch', cambiando el paisaje, los actores y el desarrollo de la trama, pero con un argumento muy parecido. Para los amantes de este tipo de thrillers es un regalo poder disfrutar de este tipo de series sin tener que esperar a que pasen años. En la serie de BBC One no falta la intriga, los diálogos tensos ni la calidad visual, por eso desde aquí os animo a dar una oportunidad a esta miniserie que promete un final cerrado para mediados de diciembre.