Para introducirnos en esta historia nos trasladamos al Nueva York de 1900, adentrándonos concretamente en un prestigioso hospital en el que
la vida del paciente es tan importante como encontrar nuevos métodos y/o medicinas que puedan salvar la vida de los siguientes que pasen por este sangriento quirófano. '
The Knick' se emite cada viernes en Cinemax, y está protagonizada por Clive Owen, que se estrena así como protagonista en la pequeña pantalla.
El carácter del Doctor John Thackery (Owen) es uno de los símbolos de esta serie, le cuesta conectar con sus compañeros, pero su profesionalidad le permite continuar trabajando allí, pese a sus roces con el personal, incluso con la dirección, que cambia de mandatario tras la repentina muerte del máximo benefactor del Knickerbocker Hospital.
Para Thackery no es fácil lidiar a diario con su trabajo, cada día presencia muertes que suponen un fracaso en su curriculum, y contra lo que él quiere luchar. Sobre todo se centra en los partos con cesárea, que es la primera operación a la que asistimos como espectadores, y en este caso no queda sin mostrar ni un solo movimiento de bisturí. La sangre, los cortes y las vísceras se adueñan de primeros planos sorprendentes que dejan a un lado los tabúes que encontramos en las series de médicos convencionales.
Por lo tanto, el Doctor Thackery intenta hacer frente a sus miedos mediante la cocaína. No es mucho más agradable ver al protagonista inyectándose sustancias entre los dedos del pie que presenciar una operación sin medias tintas. Además, Thackery hace cómplice de su adicción a una enfermera mojigata, que le ayuda a inyectarse cuando el médico está en pleno mono.
La miniserie consta de 10 episodios, previsiblemente tendrá un final cerrado, aunque he de decir que la historia que cuentan en '
The Knick' no es tan original como el apartado visual de la serie.
El ritmo de la narración es denso, se pierden en conversaciones y personajes que interesan más bien poco, haciendo que el espectador se convierta en un morboso patológico que solo espera el momento de la siguiente operación, ya que realmente es el verdadero valor añadido en '
The Knick'.
La ambientación del drama de Cinemax también es digna de mención, no solo la música o el vestuario acompañan perfectamente a la serie, también
los decorados y la atmósfera en general seducen desde el primer momento. No obstante, apartados técnicos aparte, no considero que '
The Knick' me haya atrapado en sus primeros episodios, aplaudo que sea transgresora y que la calidad de su factura sea óptima, pero sin una historia novedosa o interesante considero que todo lo demás no es suficiente para seguir viendo al camaleónico Clive Owen en acción.