'Sky Rojo': Frenética, disparatada y, a veces, demasiado evidente

Netflix ha vuelto a apostar sobre seguro, Álex Pina y Esther Martínez Lobato ya trabajaron juntos en 'La Casa de Papel' y han vuelto a aunar su ingenio para dar luz a algo tan estruendoso como 'Sky Rojo'. La nueva serie de acción bebe indudablemente del Tarantino más obvio y descarado, es algo que algunos espectadores hemos agradecido, porque no es habitual ver tanta mezcla de color, movimiento y decadencia en televisión. Y para mí, todo lo que aporte novedad es bienvenido.

Tanto la fotografía como la escenografía general de 'Sky Rojo' son hipnotizantes. En el marco técnico no creo que haya carencias notables, eso está casi garantizado con la mano del equipo de la serie y el ojo de Netflix. Por si esto fuera poco, las interpretaciones de las protagonistas son creíbles y han conseguido dar forma a unos personajes muy jugosos desde el primer contacto, sin necesidad de densas presentaciones, al grano, como todo en esta serie.

No se andan con rodeos, porque cada capítulo dura menos de media hora y en él transcurre de todo, dando giros a la trama tropecientas veces para que al final haya un cliffhanger que te obligue a maratonear. También juega a su favor la corta extensión de la temporada, con ocho capítulos que se han alargarán por otros ocho para una segunda etapa que veremos a partir de julio en la plataforma streaming.

'Sky Rojo' no ha estado exenta de polémica, tratándose de una serie que se centra en las peripecias acontecidas en un burdel de carretera no cabía esperar otra cosa. Las tres protagonistas huyen de sus proxenetas, han abierto la cabeza al propietario del negocio, por lo que si quieren seguir con vida deberán alejarse de ese peligroso terreno. Lo tienen complicado, teniendo en cuenta que toda la historia transcurre en una isla, ni más ni menos que la fotogénica y bella Tenerife.

Rescatando la trama de 'Sky Rojo', muchos espectadores han puesto el grito en el cielo por aquello de "romantizar la prostitución". Si nos ponemos las gafas de sacar puntilla a todo, obviamente podemos hacer una crítica detallada y sesuda de este asunto. Sin embargo, he decidido asistir al visionado de la serie como lo que es, puro entretenimiento. De hecho, lo más desconcertante de la serie me han parecido los comentarios con la voz en off de la protagonista, intentando justificar cada burrada que ocurre en estas delirantes escenas, con una especie de moralina forzada que no le va bien a la ficción.

Nadar entre dos aguas no creo que sea un acierto, no hace falta subrayar ciertos comportamientos para saber que no están bien. No se trata de un proyecto creado con el fin de educar al espectador, no tiene por qué ser divulgativo ni repartir moral entre los que nos sentamos frente al televisor. Esto no quiere decir que no esté de acuerdo en que se banaliza en muchos aspectos la situación de las prostitutas, que no creo que estén para aventuras en su día a día, como tampoco otros gremios o familias que se representan en diferentes series, es ficción.

Me ha gustado 'Sky Rojo' y quiero ver cómo continúa la historia de las tres chicas y sus tres acosadores. Todos ellos en la cuerda floja tras el desenlace de la primera tanda de capítulos. Aunque realmente se han pasado toda la serie pendidos de un hilo, con sus vidas en juego, tal vez ahora más que nunca. Si necesitas desconectar y pasar el rato, da una oportunidad a las chicas de "El Club Las Novias".

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