'Revenge', la venganza se sirve en los Hamptons

El final de 'Revenge' ha dejado varias puertas abiertas, pero muchas de ellas las vamos a poder ir cerrando a partir de otoño, cuando ABC tiene previsto estrenar la segunda temporada del drama que relata la venganza de Amanda Clarke, más conocida como 'Emanda'.

Desde que Amanda volviera a vivir en los Hamptons cambiando de identidad, en la familia Grayson las desgracias no han cesado, y sus secretos han salido a la luz sin ningún tipo de freno. La falsa Emily Thorne se ha inmiscuido en la aparentemente idílica vida de Victoria Grayson, y la matriarca lo ha lamentado desde el primer momento. En el final de la primera temporada hemos alcanzado el clímax, a partir de ahora cualquier cosa puede ocurrir y cualquiera de nuestras dos protagonistas preferidas puede ganar o ser derrotada.

Tanto Emanda como Victoria han despedido este curso con su característica vis dramática, y no podía ser de otra forma, porque ambas se han portado bastante mal, y quien siembra vientos recoge tempestades, como reza el mítico refrán. Por un lado está la verdadera Amanda, que ya ha dejado a Daniel y su único objetivo es reconciliar aquel amor de la infancia, el de Jack Porter. Todo se tuerce cuando la rubia está decidida a dar el paso definitivo y contarle toda la verdad al camarero, entonces reaparece la falsa Amanda (Emily Thorne) para anunciar su embarazo y su regreso al corazón de Jack. Todo un puñetazo en el estómago para la protagonista.

El caso de Grayson es diferente, su destino está marcado por un accidente de avión (o más bien avioneta), en el que viaja con una de sus rivales, Lydia, para testificar en contra de su marido Conrad. Las pruebas no llegarán muy lejos, ya que Conrad (junto al hombre del pelo blanco, clave en los últimos episodios) ha hecho que el avión explote por los aires. De todos modos, no creo que debamos temer por el futuro de Victoria, Madeleine Stowe nos ha regalado uno de los mejores personajes de la temporada, sería absurdo perderlo de esta manera.

Emily/Amanda no se ha dado un descanso en todo el año, descubrir la verdad sobre su padre y vengar su muerte es lo único que le ha importado, hasta el último momento, cuando lo da todo por perdido y se preocupa más de su corazón que de la fatigosa revancha. Emily Vancamp ha permanecido a la sombra de Stowe continuamente, y no es para menos, las escenas en las que emulaba a Lara Croft en sus mejores momentos como Tomb Raider no ayudaban en absoluto, esas peleas karatekas penosamente organizadas dejaban mucho que desear.

Tampoco han sabido estar a la altura algunos de los secundarios, concretamente la pareja formada por Charlotte y Declan, protagonizando una historia más propia de 'Gossip Girl' que de cualquier serie de intriga. El final de la hija de Victoria está en el aire, como el de su propia madre. A Charlotte se le ha venido el mundo encima, es la más afectada de la familia tras descubrir muchas de sus mentiras: su verdadero padre es David Clarke, su madre no la aprecia tanto como a su hermano y su relación con Declan se ha destruido peligrosamente.

Aun así podemos decir que 'Revenge' ha sido uno de los estrenos más potentes de la temporada 2011-2012. Este último curso la ficción estadounidense no ha pasado por uno de sus mejores momentos, y gracias a ello el serial de ABC se cuela en muchas de las quinielas. Pese a ser un drama con tintes culebronescos, 'Revenge' da al espectador todo lo que pide, entretenimiento, acción, misterio y un elenco atractivo.

Es cierto que los responsables de la serie pueden pecar de agotamiento, la trama de Emanda no se puede estirar mucho más, y para cerrar la ficción con un broche digno sus guionistas deberían ir dando un final a este culebrón suculento y bien parido.

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