¿Recuerdas... 'Herederos'?

Allá en el 2007 La 1 estrenó una serie centrada en la venganza y el hambre de poder, 'Herederos', una ficción arriesgada que tenía el entorno taurino como telón de fondo. Su arma más valiosa fue la presencia de Concha Velasco en el papel protagonista, poniendo toda la carne en el asador a la hora de interpretar a Carmen Orozco, propietaria de varias empresas y principalmente una finca en la que se desarrolla buena parte de esta historia que engancha de principio a fin.

Debido a la austeridad que abandera la televisión pública española en los últimos meses, La 1 decidió reponer este drama culebronesco en las sobremesas, y así dar la oportunidad de visionar las tretas de esta familia sin escrúpulos y poder conocer los trapos sucios de la misma.

Junto a Concha Velasco participan otros rostros habituales de la pequeña pantalla, como el infalible Ginés García Millán, Félix Gómez, Mar Regueras o Cristina Castaño. Entre el reparto destaca la labor de García Millán, en el papel de Bernardo, un cara dura que es capaz de cualquier cosa por dinero, su relación con Carmen se basa en intereses comunes, pero dentro de ese rencor se esconde (muy en el fondo) un cariño mutuo que se deja ver a medida que se acerca el final.

Respecto al desenlace, todo es muy atropellado, los guionistas decidieron dejar una puerta abierta tras tres temporadas (la última de ellas reducida a 9 intensos capítulos). A mi parecer la serie patina en ese final desdibujado, dejando al espectador ante la duda del futuro incierto de sus protagonistas y secundarios, que también tuvieron un peso relevante en la historia.

Uno de los personajes a la sombra que más tensión argumental soportaron fue Mónica (Irene Montalà), empezó dando pequeños pasos y pasando desapercibida, poco a poco se convirtió en la mano derecha de Carmen, pero en el tramo final de la serie su personaje se descubre, y entonces ya es tarde para recular, la ira de los Orozco se extiende hasta esta ayudante que parecía tan eficaz.

Al menos su destino no es el de otros muchos, la muerte. Una larga lista de nombres desaparece de 'Herederos' mediante un accidente o un asesinato, esa es otra baza con la que juega el drama, tiñendo de tensión cada una de las tramas que probablemente acaben con la muerte de algún que otro personaje fijo, al que el espectador ha podido coger cariño.

Las frases de Carmen son rotundas e imprescindibles en 'Herederos', su fuerza y la hostilidad que desprende aleja a familiares y amigos de la matriarca, sembrando terror entre los conocidos, y sobre todo entre los que menos la conocen. Por eso su hija Julia (al principio presentada como hermana) decide dar la espalda a su madre, la misma que le ha mentido toda su vida. Vero o Jacobo tampoco se quedan atrás y protagonizan varios enfrentamientos contra Carmen, aunque mientras que su hija cada vez se acerca más a ella, Jacobo presenta una evolución contraria.

Concretamente él es uno de los pilares más sólidos de 'Herederos', sus escarceos amorosos y sexuales (con hombres y mujeres) no dejan indiferente al círculo de la familia Orozco, pero el torero demuestra que ante todo está enamorado de Cecilia, una choni a la que le viene el apellido muy grande. La carrera profesional y personal del diestro no hubiera sido igual sin el apoyo de su noble amigo Nino, personaje buenazo y empalagoso donde los haya; es que al lado de Carmen Orozco cualquiera puede parecer un dulce.

La serie tiene sus lagunas, pero sabe mantener la intriga a lo largo de 36 episodios y casi dos años. No estaría mal que alguna cadena nacional apostara por otro producto similar, siguiendo la estela de series de la talla de 'Motivos Personales', 'Acusados' o esta misma, 'Herederos'.

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