¡Que no toquen a mi personaje secundario favorito!

Meses atrás, en este mismo blog, se publicó una entrada con los mejores personajes secundarios femeninos de la pequeña pantalla, y esta vez el objetivo es el mismo, pero centrándonos en el género masculino. Tanto en drama como en comedia los personajes secundarios tienen un importante cometido en cualquier ficción que se precie, a veces nos gustan más y otras veces menos, aquí esta mi peculiar selección, ¿cuál es la tuya?

Probablemente sea el personaje más políticamente incorrecto de la actualidad, sus comentarios xenófobos, machistas, racistas y homófobos no dejan indiferente a nadie. Aun así, Mauricio es uno de los imprescindibles en 'Aída', sus burradas no pasan desapercibidas y la dosis de humor que aporta es importante, aunque a veces ralle lo absurdo o lo chabacano, pero no se puede pedir más de una persona de tal mentalidad.

Son muchos los que no han sabido reírse de todo y de todos, y es esa la razón por la que 'Aída' ha recibido varias quejas, muhas de ellas provenientes de comentarios hechos por este personaje. A mi siempre me ha parecido una versión sarcástica y divertida que, desgraciadamente, refleja la realidad de algún que otro individuo. No han tardado en emular (o exagerar) este rol, y el popular Antonio Recio sigue la misma estela.

El hermano perturbado de Brenda Chenowith entró sigilosamente en la que es una serie de culto en toda regla. Con el paso del tiempo Billy adquirió un protagonismo que contó con el respaldo del público. Nunca sabes por donde puede salir este personaje, enamorado de su hermana y criado por una familia muy poco ejemplar, por lo que no es de extrañar que el hijo saliera desquiciado total.

Hay escenas en las que el pequeño de los Chenowith aporta intriga a las tramas en las que aparece con su hermana o con cualquier otro miembro de los Fisher, se le ve tan dispuesto a cualquier cosa que no es de extrañar. Además, Jeremy Sisto le debe gran parte de su carrera profesional a este jugoso personaje, y no es para menos, lo bordó.

Si preguntan por un cuñado plasta a la vez que entrañable y protector a muchos nos viene a la cabeza Andy Botwin, el compañero de fatigas de Nancy en 'Weeds'. El joven se ha ganado al público con su paciencia y su sentido del humor, encima es sobrecogedor ver cómo ha servido de padre (y a veces también de madre) de Silas y Shane. Nunca abandona a los suyos, y ha dejado perder oportunidades por seguir al lado del grupo de Nancy.

Seguramente todo lo que hace sea por amor, cada vez están más claros cuales son sus sentimientos hacia la protagonista del serial, pero Andy sigue aguantando el tipo, metiéndose en líos y sacrificándose por ella y por sus hijos. 'Weeds' es inimaginable sin él.

Es complicado destacar un solo personaje secundario de 'Perdidos', no solo porque el elenco esté formado en su mayoría por hombres, sino porque el reparto fue tan bueno y los personajes enganchaban tanto que no sabes si decantarte por la fragilidad de Charlie, el sarcasmo de Sawyer o el lado místico de John Locke. Finalmente he decidido destacar el potencial de Desmond Hume, el único personaje que nunca nos ha decepcionado.

Las historias de Hume y los capítulos centrados en él siempre venían acompañados de respuestas que requerían más preguntas, pero lo hacían de una forma tan original que no nos importaba. Eso sí, su historia con Penny fue la más bonita de la serie, y ocupa los primeros puestos en la historia de la televisión.

El alumno aventajado. Es uno de los ejemplos en los que el aprendiz supera al maestro, y es que la necesidad ha hecho que Pinkman aprenda rápido la lección, y hasta la fórmula para ser líder en el tráfico de metanfetamina. Personalmente le prefería a la sombra de Walter White, pero es inevitable que varios hechos hayan propiciado la situación actual que atraviesa la pareja.

La historia de Jesse es completamente dramática, pero su vis cómica permanece intacta de principio a fin, a pesar de superar obstáculos en los que ha tocado fondo. De todas formas, en lo bueno y en lo malo, en el subidón y en el bajón, Aaron Paul merece un reconocimiento que a día de hoy no creo que esté siendo el suficiente.

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