'Please Like Me' termina antes de que sea demasiado tarde

'Please Like Me' emitió la cuarta temporada a finales del año pasado, y ha sido hace apenas una semana cuando ha dado a conocer que esa sería la última temporada de la comedia. La serie australiana, después de traspasar fronteras, se despide para siempre sin previo aviso, sin dejar que los espectadores vean ese último episodio sabiendo que están frente al final de la serie. Se va como vino, sin hacer ruido.

Un total de 32 capítulos componen las cuatro temporadas de 'Please Like Me', con capítulos que no pasan de la media hora, y con historias cotidianas llenas de conversaciones sinceras. Josh Thomas es el actor principal que da vida a Josh, valga la redundancia. Un chico que empezó descubriendo su homosexalidad en los primeros capítulos, y termina siendo todo un "experto en la materia" en el final de la serie.

Los últimos episodios de 'Please Like Me' han sido los más dramáticos de la ficción. La muerte ha tenido una presencia demoledora en la vida de Josh, y los guionistas han introducido este capítulo de su vida con total naturalidad, y sin perder el toque de humor que caracteriza a la serie. Ni tampoco el apetito, porque no olvidaremos jamás la obsesión de Josh por la comida, reflejada en la maravillosa cabecera de cada episodio. Y ese homenaje que se dio Josh junto a sus padres en uno de los últimos episodios, con un menú delicatessen.

'Please Like Me' está escrita, dirigida, creada y protagonizada por el propio Josh Thomas, un genio al que no nos sorprendería ver en cualquier set hollywoodiense. De hecho, en varios artículos se le compara con Lena Dunham ('Girls'), y tienen mucho en común, no solo el rollo indie que le dan a todo lo que tocan. Incluso los dos terminan siendo igual de pesados y egocéntricos, razón por la que agradezco que termine la serie, tanto una como la otra.

En la ficción australiana juegan de maravilla con la presencia de los secundarios, aunque el protagonista absoluto sea Josh, yo me quedo con el resto de personajes. Desde la madre al borde de la locura, hasta su leal amigo Tom o cualquiera de los ligues con los que se ha topado, cada cual más raro. Por no hablar de su padre y la mujer de éste; Alan y Mae dan para un spin-off, sobre todo por ella, una tailandesa extrovertida, con un acento que engancha.

De todos modos, el que se mantiene fiel a Josh de principio a fin es su inseparable amigo Tom. Otro perfil de loser con el que siente identificado el protagonista, incluso en el ultimo episodio Tom recibe un varapalo, el pobre tiene tanta suerte como su amigo en esto del amor. La gran ausente ha sido Claire, que ha hecho un par de apariciones estelares metidas con calzador y sin mucho sentido, algo parecido ha ocurrido con Geoffrey, que ni siquiera hacía falta que regresara. Por no hablar del ninguneo al pobre Arnold.

La season finale ha estado mal planteada, como la temporada final en general. Es como si hubiesen decidido acabar con la serie después de emitirla, sin darle un desenlace digno. Con esto no quiero decir que la muerte que protagoniza los dos últimos episodios no sea un buen broche final, pero teniendo en cuenta que los secundarios siempre han sido un pilar para 'Please Like Me', da la sensación de que se han olvidado de ellos. Josh Thomas empezaba a reflejar su ego en esta obra, por eso creo que 'Please Like Me' se va a tiempo, antes de que esto se convierta en un lucimiento absoluto de las idas de olla del actor/productor/director/escritor.

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