'Once Upon a Time in Wonderland', un mal déjà vu

Cuando 'Once Upon a Time' pasa por uno de sus momentos más críticos, a la ABC se le ocurre estrenar un spin-off de la serie de cuentos. En este caso, 'Once Upon a Time in Wonderland' se centra en una sola historia, o esa era la intención de la serie, basada en el conocido caso de 'Alicia en el País de las Maravillas', uno de los cuentos más versionados de la historia. Lejos de centrarse en un solo relato, en 'Wonderland' ya han mezclado personajes de otros cuentos en su piloto, algo que desde mi punto de vista le resta puntos al producto.

'Once Upon a Time' funciona bien pese a su bajada de audiencia, respecto a la primera etapa del serial. Pero la historia de Alicia juega con desventaja, ya que llega dos años después del estreno de la original, y en este periodo no son pocas las adaptaciones de cuentos que hemos visto tanto en la pequeña como en la gran pantalla. Además, los efectos especiales de 'Once Upon a Time in Wonderland' dejan mucho que desear, superando en chapuza y vergüenza ajena a su predecesora, y no lo tenían fácil.

De los personajes de la nueva serie poco se puede decir, todos conocemos a la malvada reina roja, a la inocente Alice o al conejo parlanchín. Quizás se nos escapen algunas novedades insertadas en la ABC, como el amor platónico de la protagonista, un desaparecido Cyrus; o el compañero que arriesga todo por su amiga, Sota, que seguro que terminará teniendo tema con la jovencita.

En 'Once Upon a Time in Wonderland' también juegan con el paralelismo de los dos mundos, el real y el ficticio en el que Alice ha estado durante años. Todos toman por loca a la chica en el espacio real, y ella termina cediendo y reconociendo que se inventó todo para llamar la atención, algo que descubrimos que no es cierto gracias a los flashbacks que juegan siempre a favor de este tipo de narraciones.

A juzgar por el único episodio emitido, he de decir que no presentan nada nuevo, Alice podría haber sido un personaje más en la serie madre y así se ahorrarían un batacazo en la ABC, ya que el piloto no ha pasado del 1,7 en demos, un dato muy por debajo de la media, aunque está a tiempo de levantar cabeza, algo que parece poco probable que ocurra.

Como apunte, me llama la atención que John Lithgow (el Trinity de la inolvidable cuarta temporada de 'Dexter') preste su voz a White Rabbit, un conejo muy poco logrado artísticamente hablando, quizás pretendían dar grima con semejante esperpento, si es así lo han conseguido. Sophie Lowe da vida a la protagonista, quizás no sea la más adecuada para el papel, puede que otras actrices mejores se hayan quedado por el camino, pero al menos salva los muebles en una ficción que cae por su propio peso, donde la interpretación de sus protagonistas es lo de menos, porque bastante tenemos con los chromas cegadores o los irrisorios efectos que se sacan de la manga.

Me acerqué escéptico a este nuevo producto, pero una vez vistos los primeros 43 minutos de la serie puedo decir que si muchos estamos notando los síntomas de agotamiento de 'Once Upon a Time', no estamos dispuestos a abrir nuestras puertas a una ficción que se presenta mucho más cutre y austera. Le pido al Conejo Blanco que me haga un agujero y me abro.

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