Si lo piensas bien, el año 2020 también nos ha dejado algunas cosas buenas, nos ha ofrecido tiempo para poder reducir nuestra lista de series pendientes y también hemos sacado partido a las plataformas streaming. De este modo, hemos descubierto series que de otra manera no nos hubiésemos parado a buscar.
Mi gran sorpresa llegó con 'Superstore', de la mano de Prime Video, una de las mejores sitcom que he conocido en los últimos años.
La plataforma de vídeo de Amazon tan solo dispone de las cuatro primeras temporadas de la serie, a la que no podemos acceder de otra forma en España. No he tardado ni medio año en ventilarme lo que supuso cuatro años para la serie en su emisión original en el canal estadounidense NBC. Todos los episodios son divertidos, con unos personajes a los que vas conociendo y queriendo a medida que avanzan sus disparatadas tramas dentro de unos grandes almacenes.
Una plantilla inmejorable
Los trabajadores de Cloud 9 (Nube 9 en español) son muy variopintos, cada uno de ellos tiene algo que aportar en la tienda ubicada en San Luis (Misuri). En las primeras temporadas, Glenn es el gerente del gran establecimiento en el que venden desde ropa hasta alimentos, joyas o incluso medicinas, algo muy habitual en EE.UU. La actitud del jefe choca bastante con el carácter de la mayoría de sus empleados, él es un tipo bonachón, algo tonto y muy confiado, mientras que sus trabajadores son unos caraduras que se aprovechan del buen hacer de Glenn, que en realidad no es muy válido para el puesto.
Menos mal que el pobre hombre cuenta con la ayuda de Amy (America Ferrera), probablemente la más cabal de la plantilla. Es una chica responsable, con marido e hija, que se acerca peligrosamente al chico nuevo de la tienda, el apuesto e ingenuo Jonah (Ben Feldman). Ferrera y Feldman son los verdaderos protagonistas de 'Superstore', aunque la comedia no sería lo mismo sin los secundarios y figurantes habituales de la tienda de Misuri.
Me quedo con Dina, la asistente del gerente, una mujer dura, borde y sin piedad, lo contrario a Glenn. No siente compasión ni empatía por nada ni por nadie, es como un trozo de hielo, nocivamente directa. Reconozco que es la que más me ha hecho reír, aunque una de las que ha ido creciendo, Sandra, a la que Dina detesta, también ha escalado posiciones, ensombreciendo sin preaviso al resto del elenco en algunas de sus intervenciones. Sandra siempre ha sido ninguneada, es la Meg ('Padre de Familia') de 'Superstore', pero rodeada de una trama que se va volviendo cada vez más oscura.
Oda a lo absurdo
La clave de esta comedia es su forma de sacar de contexto cualquier actividad de la vida cotidiana en unos grandes almacenes. Llevan hasta el extremo las relaciones de estos trabajadores que pasan más tiempo juntos que con sus familiares, por eso consiguen llegar al público, haciéndonos testigos de sus romances, errores laborales y puñaladas por la espalda, de esas hay muchas. Además, no dudan en tratar temas sociales (inmigración, derechos laborales, feminismo, etc.) sin pretender ser moralistas ni populistas, pero dejando una sensación positiva en el espectador.
Seguramente llegue tarde para recomendar esta serie que ya va por su sexta y última temporada en NBC, con un spin-off confirmado. Sin embargo, no he dudado ni un segundo en escribir este post, porque si alguien que haya leído el artículo se anima a dar una oportunidad a 'Superstore' seguro que no se arrepentirá de ello. A veces rebuscamos entre las novedades de Netflix, y otras plataformas y cadenas, sin prestar atención a las joyas que tenemos delante de nuestras narices desde hace años, es un error común que todos cometemos. Únete a mi club para que juntos podamos presionar a Prime Video y estrenen de una vez las últimas aventuras de los trabajadores de Cloud 9.
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