'Modern Family', 11 años para enmarcar

El 8 de abril 'Modern Family' se despidió definitivamente con un doble capítulo emitido por ABC en Estados Unidos. Fox España se reserva el adiós para la noche del 29 de abril, fecha en la que estrenará el último episodio de la longeva comedia. Los Pitchett se irán ofreciendo una ración doble, con la dispersión de la familia en general, y el distanciamiento de Cam y Mitchell en particular.

Es el fin de una etapa, y después de once años contándonos sus anécdotas más divertidas y siendo testigos de sus disparatadas historias, la despedida no ha podido evitar ser triste. Realmente deja un sabor agridulce porque, a decir verdad, ‘Modern Family’ hace años que no ha vuelto a ser la misma serie que en el comienzo, perdió algo de chispa, pero de vez en cuando se les encendía la bombillita y demostraban que todavía guardaban algo de aquellos inicios en los que todos los capítulos eran brillantes.

Hemos visto crecer a los pequeños de la casa, incluso desde su nacimiento en el caso de Joe, y casi también en el de Lily. De todos modos, los niños no son los únicos que han evolucionado, cada uno de los personajes adultos y las relaciones entre ellos también han dado un importante paso hasta llegar a convertirse en personajes icónicos, todos y cada uno de ellos.

El buen rollo entre miembros del reparto traspasó las pantallas, tal vez ese haya sido el truco para mantenerse en pantalla tantos años. Claire y Phil han sido unos genios desde el principio, sus tramas se han desarrollado favorablemente, mostrándolos en diferentes facetas y tesituras. A veces hemos llegado a encontrar una Claire divertida y despreocupada, ha sido más difícil encontrar a Phil en la piel de su mujer, pero también tiene lo suyo cuando se obsesiona por quedar bien en el trabajo, con su hijo o ante cualquier truco de magia.

Cam y Mitchell también han tenido sus momentos de delirios, de hecho, su vida en general es un delirio. Hacen una montaña de cualquier pequeño problema, y la competición por ver quién es mejor en cada disciplina también ha ocupado varias tramas en diferentes capítulos de ‘Modern Family’. Como una buena comedia americana tradicional y familiar, todo les sale bien, amplían la familia como llevaban años soñando, consiguen el trabajo que deseaban y se mudan a una casa de ensueño. Esto hace que se alejen del resto de la familia, pero es un buen aliciente para cerrar la serie, incluso se habla de un spin-off centrado en la pareja, algo que espero que descarten. Fue bonito mientras duró. Y ya.

Por último, Gloria ha sido mi preferida en muchos momentos de la sitcom de ABC, su pronunciación y los recurrentes fallos en el léxico han provocado las mayores risas viendo ‘Modern Family’. Los malentendidos se han dado en repetidas ocasiones en la serie en general, pero entre Gloria y Jay en particular. Hemos vivido situaciones desternillantes por las confusiones de esta pareja, siempre jugando con la casualidad.

Es un buen momento para decir adiós a una de las series más largas que se emitían hasta ahora. El año pasado despedíamos ‘The Big Bang Theory’, también con altibajos, pero a los que sentíamos como un grupo de amigos a los que ya no vemos cada semana. Algo similar ocurrirá con 'Modern Family', a pesar de no ser una de las series más ingeniosas de la historia de la televisión, han formado un gran equipo, y seguro que no soy el único que se siente parte de la familia.

Da mucha pena cerrar todo tipo de contacto con una serie que ha estado más de diez años con nosotros, y siempre con una nota positiva, con el buen humor como bandera. Además, han puesto sobre la mesa diferentes estructuras familiares que hace un par de décadas, como mucho, eran episódicas en alguna comedia. Reconozco los altibajos de la serie, en la que cada vez eran más los capítulos mediocres, pero siempre con afán de remontar. No es una sitcom más, quedará en nuestra memoria como la primera sitcom familiar que quiso ser diferente, y de algún modo lo consiguió.

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