(Spoilers de la 3ª temporada)
Otra temporada de '
Misfits' que se pasa volando, supongo que eso es buena señal, aunque también tiene mucho que ver el hecho de que cada etapa de la serie la compongan ocho capítulos, como mucho. Esta vez nos adentrábamos en una temporada diferente, con una baja importante, pero
afortunadamente no nos ha dado tiempo de echar de menos al fantástico Nathan Young, su sustituto ha llenado su hueco con suerte.
Rudy ha sido la sorpresa de la temporada, nadie se esperaba que Nathan pudiera tener una réplica tan exacta, siempre con el comentario menos apropiado en el momento menos indicado. El sexo es otro punto en común, aunque Rudy es mucho más extremo, y en general todos sus gestos y su personalidad es como una caricatura del propio Nathan, incluso haciéndose pesado en algunos momentos, pero tronchante a la par.
De todos modos, las comparaciones son odiosas, y si todavía hay alguien que no sabe distinguir a un personaje de otro puede estar tranquilo, porque el año que viene tendrá la oportunidad de seguir pillando el truco al doble personaje de Joe Gilgun, Rudy. La que ya ha confirmado que no seguirá en el serial es la actriz Antonia Thomas, Alisha. Va a ser complicado imaginarse a Simon hacer vida normal sin su amada, aunque por lo que podemos intuir con el final de la tercera temporada, Simon pretende volver al pasado para evitar la muerte de su novia, otra vez. Como dice Rudy, es una locura meterte en un bucle volviendo constantemente al pasado para repetir lo mismo una y otra vez, pero como Kelly afirma, "es bonito hacerlo por amor".
Y exactamente este último año Kelly ha estado más involucrada que nunca con el amor. Ese personaje
choni y descarado que hemos conocido hasta ahora se ha ablandado, eso sí, sin perder su esencia. Su historia de amor se consolidó en
el séptimo episodio de la temporada, uno de los mejores de la historia de 'Misfits', en él Curtis resucita a la exnovia de Seth (actual pareja de Kelly) a cambio de deshacerse de su inútil poder. Esas resurrecciones que acontecen a lo largo del episodio no son tan naturales como aparentan, ya que todo aquel que resucita se convierte en una especie de zombie con hambre de carne humana. La historia recuerda a la novela, y también película, de Stephen King 'Cementerio de Animales', muy recomendada también.
Curtis ha vagado sin alma ni interés en la recién terminada etapa. Empezó teniendo un poder, por así llamarlo, sin ventaja aparente, incluso se quedó embarazado de sí mismo, y como ni siquiera los guionistas de '
Misfits' pudieron seguir rizando el rizo, le cambiaron su confuso poder por otro que tampoco va a poder utilizar, ya que las consecuencias pueden ser devastadoras. En vez de Nathan o Alisha ya podría haber dejado la serie Curtis, personaje con poco que aportar, esperemos que en la cuarta temporada encuentre su sitio, ya va siendo hora.
Por otro parte, sigue siendo anecdótica la matanza que los protagonistas llevan a cabo con cualquier trabajador social que se acerque a su radar. Somos muchos los que hemos perdido la cuenta del número de asesinatos que llevan estos inadaptados a sus espaldas, pero si la lista continúa aumentando tampoco pasa nada, resulta divertido. Además en el episodio final hay una especie de guiño, ya que reaparece alguno de esos trabajadores sociales para cerrar sus historias, de una manera muy curiosa además.
Para todo aquel que ya se haya saturado de '
Misfits', el final de esta tercera etapa puede pasar por un final definitivo y a la altura de la ficción. El desenlace ha estado lleno de dramatismo, algo a lo que no estamos acostumbrados, pero era necesario para seguir con la tónica de la serie. Personalmente, no me he saciado de las desventuras de estos superhéroes,
quiero saber qué camino decide seguir Simon, como termina la historia entre Kelly y Seth, como evolucionan los dos Rudys o qué le depara a Curtis el futuro.
Exceptuando algún tropezón de la temporada, como el capítulo en el que aparece Hitler y Kelly viaja décadas atrás, el resto ha estado a la altura de las anteriores etapas, sin decepcionar. Es de las pocas series que puede reinventarse año tras año sin que su credibilidad se resienta. Los que como yo habéis quedado encantados con la última temporada esperaréis ansiosos este año por ver si en 2012 los inadaptados vuelven a vestir el buzo naranja.