'Los Crímenes de Pembrokeshire': Caso resuelto con 20 años de retraso

El canal británico ITV marcó récord de audiencia el pasado mes de enero con la emisión de su último thriller basado en un caso real. 'Los Crímenes de Pembrokeshire' refleja la investigación policial que se llevó a cabo dos décadas después de varios asesinatos y violaciones que tuvieron lugar en la comarca de Gales que lleva la serie por título. Luke Evans es el protagonista de la ficción, dando vida al Detective Steve Wilkins, un hombre que ocupa el cargo con precisión y ganas de esclarecer un caso que estaba archivado.

¿Por qué ahora le corre prisa a Wilkins? El pueblo se había echado encima de los policías que estuvieron tras las pistas en su día, en las décadas de lo 80 y los 90. Después de casi 20 años, la serie está inspirada en el año 2009, Wilkins desea encontrar nuevos indicios antes de que concedan la libertad condicional a la única persona señalada, que cumple condena por otros delitos. La rapidez y la eficacia con la que actuó el equipo de Wilkins calló muchas bocas, consiguieron encontrar nuevas pruebas que señalaran al asesino en serie John Cooper, utilizando métodos más innovadores que dos décadas atrás.

No estamos ante un villano al uso, es lo que suele ocurrir cuando las series de televisión reflejan con pulcritud un hecho real. Los asesinos en serie no suelen ser monstruos con colmillos y cola, son personas que se esconden entre la multitud, llevando una vida aparentemente normal, como ocurre con Cooper, al que muchos apoyaron hasta el último momento. De hecho, se desconoce el motivo real si es que puede haber uno por el que Cooper abusó de varias mujeres y asesinó a alguna pareja que paseaba por las calles de Pembrokeshire.

'The Pembrokeshire Murders' no busca el escándalo, bastante tienen con el relato original. Con esto quiero decir que no es una serie que se regocije en la sangre, en el sufrimiento familiar o en la intriga vinculada a otros whodunit. El thriller creado por Mark Evans se centra especialmente en la investigación policial, dejando en un segundo plano los hechos puntuales de los crímenes o el entorno de las víctimas.

Personalmente, prefiero series como 'DES' o la última temporada de 'Manhunt', en las que podemos conocer mejor al asesino, entrando en su mente. A mí me ha faltado poder meterme en la historia, aburriéndome a ratos, quizás por falta de acción o porque las ficciones policiacas con ínfulas literarias no son lo mío. Me quedo con el lado técnico de 'Los Crímenes de Pembrokeshire', un Luke Evans brillante, y comedido, rodeado de una ambientación ideal para ver la miniserie (disponible en Movistar+) durante las tardes de invierno bajo la manta.

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