(Contiene spoilers del capítulo 3x10)
La segunda mitad de la tercera temporada de ‘
How to Get Away With Murder’ ya está en emisión en ABC, y ha regresado con más interrogantes y sin desvelar la última incógnita con la que cerró el año:
¿quién mató a Wes?
Era de esperar que no descubrieran al asesino, o el modo en el que murió el protagonista de la serie, pero todo apunta a que lo sabremos antes de que termine la actual tanda de episodios. En los cinco capítulos que restan nos contarán las últimas horas de Wes, y las consecuencias de su muerte, principalmente las de Annalise, que está entre rejas, acusada de haber matado a su ojito derecho.
Bonnie está haciendo lo que puede para sacar a Annalise de la cárcel, pero no es tan buena en lo suyo como su jefa, así que le primer round lo ha perdido, y la profesora Keating debe seguir haciendo amigas en su lúgubre celda. Bonnie siempre ha sido muy intrigante, y bastante traicionera, no descartemos que haya matado a Wes, como ya hizo con Rebecca. Su misión ahora mismo es exculpar a Annalise, y converse a sí misma de que Frank no mató al joven.
En cambio, Laurel lo tiene bastante claro, Frank es el culpable de todo lo malo que está ocurriendo a su alrededor. La latina ha confesado que el hijo que espera es de Wes, al menos de momento, aquí todos mienten, y finalmente podría ser de Frank, y solo por la rabia que le tiene lo estaría negando. Laurel ha hecho sentirse culpable a su ex, que francamente no creo que haya matado a Wes, y nos queda una conversación pendiente entre los dos chicos de Laurel.
El resto de personajes siguen apenados, Connor lo lleva todo por dentro, como de costumbre, y sigue enamorado de Oliver, ya no sabe ni cómo llamar su atención, pero lo está haciendo fatal si quiere reconquistar al informático. Además, Oliver tuvo en sus manos información importante que Annalise le hizo borrar tras la explosión, ¿y si borró algo que incrimina a la profesora? Todos sabemos que Annalise no será la culpable, pero igual está tapando a alguien, o algo muy oscuro, ¿un nuevo misterio para la cuarta temporada? ¿Tendrá algo que ver su hermana Hannah?
Michaela y Asher siguen su sorprendente idilio, se han convertido en una pareja cómica que nos sirve para llevar un poco mejor tanta intriga, con las salidas de tono de Asher, a las que algunos ya nos hemos acostumbrado. De momento están en segundo plano, pero eso les hace más sospechosos aún, no olvidemos cómo se puso Asher con Connor en el hospital. Esa paliza, ¿a santo de qué? Ni que fuera íntimo del difunto Wes.
‘How to Get Away With Murder’ es tan enrevesado que no tengo tan claro que Wes esté muerto, me cuesta creer que se hayan cargado al protagonista, después de Annalise. Puede que todo sea una maniobra del chico con Frank para conseguir otro objetivo, además hay mucho secretismo acerca de la autopsia, ¿estaba muerto antes del incendio o no? El agente, y amante de Annalise, está tras la pista con la mosca detrás de la oreja, siempre metido en todos los fregaos de la profesora.
Hipótesis puede haber mil, pero al final la respuesta será solo una, así que lo único que podemos hacer es dejarnos llevar. En ‘How to Get Away With Murder’ siempre nos sorprenden, y la manera en la que consiguen que nos estrujemos los sesos es formidable. Los personajes cada vez los sentimos más nuestros y, sinceramente, Wes me llevaba aburriendo unos cuantos capítulos, así que ojalá pasen pronto el duelo y se dejen de flashbacks prescindibles con el fallecido como centro de atención.