'Hermanos' se pierde en la introducción de los personajes

Una de las primeras ficciones de la temporada se estrenó anoche en Telecinco, las promos y la expectación que se ha levantado en torno a 'Hermanos' han hecho que muchos sintamos curiosidad por la miniserie, compuesta por seis capítulos, y presumiblemente con final cerrado.

El elenco principal es una de las bazas a favor de 'Hermanos', pero los secundarios también dan la talla, en ocasiones por encima de los protagonistas. Carlos Hipólito o Elvira Mínguez destacan en la sección madura, pero el peso recae sobre los más jóvenes, a los que vamos a ir viendo crecer a medida que pasan los años en la ficción, una caracterización que tengo ganas de ver.

Antonio Velázquez, María Valverde y Álvaro Cervantes están bien en sus papeles, el primer episodio lo han salvado con naturalidad y frescura, aunque haya habido alguna escena mejor que otra. No obstante, como actores se les comen dos secundarios de lujo que hasta ahora han pasado desapercibidos, hablo de Daniel Grao y Aura Garrido, a la que espero que le den el protagonismo que merece en las siguientes entregas.

El primer episodio ha sido una larga presentación, en ocasiones se ha hecho aburrida, con tramas flojas y conversaciones carentes de interés. No creo que sea necesario alargar durante una hora la presentación de los tres protagonistas, a los que conocemos desde la primera escena, ya que no tratan de disimular los clichés, ni mostrarlos con matices. El descaro con el que se presentan es un tanto cutre, la chica extrovertida y directa; el machito chulo, y para colmo boxeador; o el ratón de biblioteca tímido y responsable.

Tanto en el piloto como, seguramente, en toda la serie, 'Hermanos' va a centrarse en estos tres perfiles, ahondando en sus sentimientos y mostrando cómo se enfrenta cada uno de ellos a las adversidades y obstáculos que se encontrarán en sus caminos. La historia puede ser interesante si nos presentan tramas frenéticas, o simplemente bien contextualizadas.

La escena final es la que más acción ofrece a lo largo de la primera hora de serie, pero está mal ejecutada, y de eso no hay duda. Este momento que se presenta dramático es de risa, y eso es un fracaso para una producción de esta talla. Los planos y la fotografía están muy cuidados, y se agradece que traten de ofrecernos una ficción de calidad, pero la caída de Hipólito es de vergüenza ajena, ¿no supieron mejorar esa secuencia?

'Hermanos' se presenta como una miniserie novedosa, y realmente a lo que ficción nacional se refiere lo es, estamos acostumbrados a series con tramas corales, pero esta vez el protagonismo absoluto lo tiene el trío protagonista, sus vivencias y sus vaivenes. En el próximo capítulo deberían dar un vuelco, sino seguir 'Hermanos' se convertirá en un suplicio, y sería una pena tratándose de una ficción con potencial, y con una buena campaña publicitaria de fondo.

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