(Contiene spoilers)
Me ha encantado la primera temporada de 'Euphoria'. Cuando vi el piloto no esperé que me fuera a enganchar tanto al drama juvenil de HBO. La cadena de cable no suele apostar por ficciones dirigidas al público adolescente, y aunque el rango de 'Euphoria' es más abierto de lo que puede parecer en un principio, los protagonistas y las historias están claramente enfocadas a la adolescencia.
'Euphoria' se debate entre la realidad más explícita y el surrealismo más excéntrico. Cada capítulo es una cápsula que te traslada a un mundo totalmente distinto, de hecho, cada semana hemos ido conociendo a un personaje diferente, con una infancia muchas veces traumática. La historia la narra Rue (Zendaya), que a pesar de fijarse en los compañeros de instituto que le rodean, siempre saca tiempo para exponer sus dramas.
Sinceramente, no conocía a Zendaya de su época Disney, la he descubierto aquí, y me parece un diamante en bruto como actriz. Demuestra que el drama es lo suyo, pero ademas nos regala un precioso videoclip en la recta final de la season finale. Tal vez no viniera a cuento el numerito con la canción de la protagonista, pero me quedé embobado mirando la pantalla durante esos minutos, sin ser de musicales ni nada de eso yo.
Junto a Zendaya hay otra pieza clave en 'Euphoria': Hunter Schafer. La actriz da vida a Jules, un bombón de personaje al que le cuesta encajar en el grupo de amigas, pero termina entrando de forma natural de la mano de Rue. La naturalidad es la marca de la casa, porque la relación entre ellas dos va evolucionando, hasta que sin darnos cuenta, ni ellas ni nosotros los espectadores, se ven rodeadas de sentimientos mutuos que van más allá de la amistad. Los planos que comparten Rue y Jules suelen ser maravillosos, acompañados de la música idónea y de la atmósfera apropiada.
Como en todo drama juvenil que se precie, también contamos con un villano a la altura de este serión, él es Nate Jacobs. El joven proviene de una familia poderosa, con mucha influencia en los negocios y en las personas que viven en la ciudad. El lío en el que se mete Jules, arrastrando a la justiciera Rue, mantiene viva la intriga durante la temporada completa, y podría seguir estirándose durante la siguiente. Además, no solo hay tiranteces entre las dos protagonistas que intentan librarse de prejuicios, Nate y su novia Maddy están metidos de llenos en una relación tóxica que no va a terminar bien para ninguno de los dos.
En segundo plano conocemos a Cassie y McKay, una pareja que pasa por problemas algo mas habituales que los de las parejas mencionadas anteriormente, pero con mucho que rascar. Sin embargo, la historia de Cassie es la más floja, con su hermana Lexie a la sombra, un personaje que me parece perturbador, sin destacar, pero siempre está ahí, ella lo ve, lo oye y lo sabe todo, sería retorcido que lo usara contra sus amigas o hermana, pero 'Euphoria' tiene giros interesantes y este podría ser uno de ellos.
Como secundaria me quedo con Kat, una chica con complejos por su físico que ha decidido darle la vuelta a la tortilla y potenciar todo aquello de lo que siente vergüenza. Kat entrega a 'Euphoria' algunos de los momentos más memorables, todos ellos con tinte sexual, no podría ser de otra manera en esta serie en la que no existe la censura ni el tabú. 'Euphoria' se ha podido hacer famosa porque no tiene reparo a la hora de enseñar penes en pantalla, pero no es rompedora por eso, sino por los temas que trata, y por la manera en la que los trata.
No sabía que me iba a encontrar con historias tan profundas cuando me puse al frente de esta ficción, ha sido una sorpresa, la sorpresa del año. Han sabido dar un giro importante a las series de adolescentes, permitiendo que todos los públicos se interesen por esta serie con rarezas mágicas, que a veces parece sacada de un videoclip pretencioso con afán de modernidad. Espero que en la segunda tanda no pierdan la pureza y las ganas de transgredir que le han hecho volar alto.