(Contiene spoilers)
Netflix España ha acertado de pleno con este drama juvenil repleto de intriga. Durante ocho capítulos consiguen que el espectador se enganche a las diferentes historias de estos jóvenes ricos, y sobre todo logran que permanezcamos atentos a la trama coral que une al reparto, la muerte de una de las protagonistas, desvelada desde el primer episodio.
'Élite' recuerda indudablemente a 'How to Get Away With Murder', y no sólo porque en el elenco destaquen jovencitos con una vida desahogada; sino también por los flashforward que acontecen sin cesar en cada capítulo. Ponen sobre la mesa un homicidio, apuntando a diferentes direcciones, dando a entender que el asesino está entre los protagonistas. En la serie de Netflix consiguen un equilibrio, sin llegar a saturar con las imágenes del día de la muerte de la protagonista, intercalándolas con las interesantes tramas centradas en el resto de jóvenes.
El ritmo es el adecuado, los episodios pasan rapidísimo, y es que además no duran más de 50 minutos, algo en lo que cada vez está acertando más la ficción española. Hacen que te quedes con ganas de más, incluso en el final de la temporada, que dejan varias puertas abiertas, y una de ellas es la razón de la posible muerte de Marina Nunier.
Tengo una hipótesis
Desde el principio me pareció extraño que se cargaran a la protagonista, más todavía si tenemos en cuenta la popularidad de la que goza en la actualidad la actriz María Pedraza. Dudo que prescindan de ella en la segunda temporada, por eso sospecho que no está muerta, todo puede ser un pacto entre Nano y la policía, para que salgan a la luz esos relojes que tanto han dado que hablar, y que guardan información valiosa.
Dejan claro un par de veces en el capítulo final que Polo no acabó con la vida de Marina, alguien más vino detrás, y solo vemos aparecer a Nano, y más tarde a Samuel como testigo, con la policía ya en el lugar de los hechos. Además, la madre de la víctima está desolada en el funeral, entre otras cosas porque no le han dejado ver el cuerpo de su hija. Esto me huele a giro en el inicio de la segunda etapa.
El peligroso trío protagonizado por Carla, Polo y Christian se cierra de alguna manera con la captura del reloj. El halo de oscuridad que envuelve a Polo se termina de confirmar con este hecho, demostrando que es capaz de lo que sea por conseguir lo que quiere, aunque sea a Carla, que no parece que la tenga mucho respeto en otras ocasiones. Polo es de los personajes más siniestros de 'Élite', y su relación con Carla y Christian debería seguir evolucionando en la segunda temporada. Los guionistas se han atrevido con una historia arriesgada y original, en la que Christian tiene todas las de perder.
Minorías sociales con tirón
Ya es un clásico que en cualquier serie de adolescentes aparezca un personaje homosexual que oculta su condición a familiares y amigos. En 'Élite' es Ander el estudiante que no ha contado a ninguno de sus allegados lo que siente por un chico al que acaba de conocer, Omar. Se trata del hermano de Nadia, la nueva chica del instituto, y es toda una joya, porque además de homosexual es musulmán, y en su familia ni se imaginan que a Omar le puedan gustar los hombres, es más, el chaval trafica con drogas para sacarse un dinerillo y huir de casa, para así conseguir la ansiada libertad.
Ander y Omar hacen muy buena pareja, y se va haciendo sólida a medida que avanza la primera temporada. Es una lástima que la calidad interpretativa de Omar Ayuso (Omar) no deje disfrutar de esta historia. No es el único que para mi gusto resbala en la interpretación, otros actores como Jaime Lorente me parece que tienen mucho que mejorar, algo chocante si tenemos en cuenta que es uno de los más adultos en el reparto.
Por contra, Danna Paola (Lu) está estupenda en su papel de villana, es el personaje principal que menos aparece en la ficción, pero a sorbitos pequeños es más agradable, sino podría saturar, ya que se trata de una malvada muy obvia, de telenovela. Miguel Bernardeau es el otro actor de moda, interpreta a Guzmán, el hermano adoptivo de Marina, un ejemplo para los padres, mientras que la niña les ha salido rebelde, Guzmán es mucho más correcto y da menos problemas en casa, al menos de cara a la galería, porque apenas tiene escrúpulos. Todo esto puede ir haciéndole cambiar, no sólo por la muerte de su hermana, sino porque se enamora de Nadia, algo que Lu no puede pasar por alto.
Puede que no sea una serie sesuda, con un guion lleno de escándalos que podría convertir a 'Élite' en un guilty pleasure. No me gusta esa definición, dejémoslo en que es un placer, y no nos sintamos culpables por consumir una serie teen bien construida, con personajes que llegan al corazón del espectador desde el primer episodio y con un crimen por resolver que nos dejará mordiéndonos las uñas. No todo van a ser horas de conversaciones intensas entre cuerpos de policía, también queremos ver a jóvenes desenfrenados y desenfadados.