'El Reencuentro': lo peor de cada casa

'El Reencuentro: 10 años después' es el nuevo reality-show que Telecinco se ha sacado de la manga para esperar a que los preparativos de la nueva edición de 'Supervivientes' estén finalizados. La audiencia de este curioso experimento no está siendo para tirar cohetes, pero tratándose de un programa de estas características y de tan bajo presupuesto, no creo que a la cadena amiga le moleste superar el 14% las noches de los jueves.

El supuesto objetivo de 'El Reencuentro' es limar las asperezas o saldar las cuentas pendientes de parejas que hayan pertenecido a la historia de los realitys de Telecinco, ese formato tan criticado por muchos, pero que grandes éxitos le ha supuesto a la cadena en estos diez últimos años.

El año pasado, tras la final de la undécima edición de 'Gran Hermano', Telecinco hizo algo parecido, pero en ese caso los que se reencontraban eran exclusivamente concursantes del padre de los realitys por excelencia, 'Gran Hermano'. En cambio, este curso han optado por meter dentro de la casa a los más variopinto (o no) de cada programa. Con algunos ha funcionado el invento y han pasado de llevarse mal a poder mantener una conversación sin sangre de por medio, el ejemplo más claro es el de las parejas de 'La Casa de Tu Vida': David y Natalia o Vanessa y Verónica.

En el lado opuesto hay que destacar lo mucho que han empeorado otras relaciones, como la de Chari y Rubén (llegando incluso a las manos) o Saray y Gerardo, pareja que nunca me ha aportado nada en absoluto y a quienes no me creo. Como en todo reality, también hay parejas que han pasado sin pena ni gloria, es el caso de los primeros expulsados, Mónica 'La Virgen' y Juanma, entre otros.

En 'El Reencuentro' han entrado concursantes que estaban en el olvido, y que seguramente no deberían haber salido de allí, hablo de personajes como Juan Miguel (que hace que incluso la freak Yola Berrocal parezca un mueble), Coyote Dax o Chiqui Martí y Sofía Cristo. Además, teniendo para elegir cientos de candidatos han optado por meter en la casa a parejas que ni siquiera se llevaban mal, inventando como 'cuenta pendiente' una relación de amistad. Todos sabemos que los seguidores de este tipo de programas no buscamos eso cuando pulsamos el 5 en nuestro mando a distancia.

Jordi González es el anfitrión del programa, con la ironía y la mala leche que le caracteriza, pero mojándose algo más que de costumbre en los temas de la casa, y dejando que su nivel de simpatía con cada concursante afecte a las efímeras entrevistas que realiza. No hay más que ver el caso de Gerardo, que aunque sea un tío insoportable dijo unas cuantas verdades que pusieron al público, a Jordi y a unas cuantas tertulianas en su contra. Eso sí, ahí estaba la falsa Saray buscando el aplauso fácil y metiéndose a un público en el bolsillo que en unas semanas ni siquiera se acordarán de su existencia.

Hasta el momento hay programas sin representación, y el más sonado y esperado es 'Operación Triunfo'. Es difícil que algún concursante del reality musical quiera participar en un experimento como este, aunque hay varios que dan el perfil, Iván o Esther Aranda de 'OT 2008' sin ir más lejos. De todas formas, para rellenar el hueco de las parejas expulsadas han recurrido a otro programa de la cadena, que poco tiene que ver con la telerrealidad. Oliver y la omnipresente Tamara Gorro (de 'Mujeres y Hombres y Viceversa') han sido los últimos en subirse al carro, mientras que ella actualmente se recorre todos y cada uno de los programas rosas de Telecinco, Oliver es más bien un completo desconocido, y por lo poco que se ha visto me atrevería a decir que va a dar poco juego (a no ser que recurra al famoso edredoning).

Es complicado adivinar la duración de 'El Reencuentro', es más, ni siquiera sus responsables creo que lo sepan. Aun así, no me molesta ver como cada semana una nueva pareja se suma a esta díscola convivencia. Es un formato que entretiene y se deja ver, además cabe destacar la presencia de Lara Estevan, la polémica concursante de 'Las Joyas de la Corona', ya que sus vídeos son los más destacados de cada gala, ya sea como verdugo (por sus constantes berridos) o como víctima del odioso Iván Madrazo.

¿Entrarán nuevas parejas? ¿Quiénes serán? ¿Habrá más abandonos o expulsiones disciplinarias? ¿Quién merece el premio final? El debate queda abierto.