'De Dag' es un thriller emitido en el primer trimestre de este año en el canal belga VIER. Está compuesto por doce capítulos, y tiene un cierre digno, y probablemente definitivo. Cada uno de los episodios del drama europeo pasa rápido, consiguen que te metas en la piel de los protagonistas, que van desde los atracadores de un banco hasta el cuerpo de policía o lo propios rehenes.
Lo positivo de la serie belga es que todo lo que ocurre es verosímil, el espectador se lo cree y puede empatizar de algún modo con las víctimas, y en los últimos episodios hasta con los ladrones, por su situación personal. No es la primera vez que una serie se centra en un atraco, de hecho tenemos reciente el éxito de 'La Casa de Papel', mientras que 'De Dag' ha pasado desapercibida, teniendo muchos más elementos e calidad a su favor, pero no está en Netflix.
Todo comienza con el robo de un banco a primera hora de la mañana, un día cualquiera. Los atracadores quieren algo más, no sólo el dinero, y para conseguir su objetivo y hacer que la policía se aparte de su camino secuestra a un grupo de personas que estaban en el edificio en el momento del robo. La tensión está servida, y ninguno de los bandos va a estar dispuesto a doblegar.
Diferentes puntos de vista
Una de las bazas a favor de 'De Dag' es la originalidad con la que narran los hechos. No solo se centran en los ladrones o en los policías, cada capítulo está contado desde la perspectiva de un gremio o bando diferente. Por ejemplo, los ladrones se van poniendo nerviosos a medida que pasan las horas y no consiguen su objetivo, siguen rodeados por agentes y los rehenes tampoco se lo ponen fácil.
Al otro lado del Walkie Talkie están los negociadores, importantes en esta historia. Son tres personas muy diferentes, y que también chocan entre ellos y tienen sus errores. Uno de ellos es nuevo en estas lides, y le ponen de encargado, mientras que su compañera quiere dejar el trabajo, quemada después de tantos casos. Este agotamiento que sufren los negociadores se ve reflejado en la frustración de la operación que están llevando a cabo, y notan cómo los atracadores les sacan ventaja.
Los rehenes también son una parte importante de 'De Dag', no saben cuánto se va a alargar esta situación, y entre ellos hay dos hermanos menores de edad. Hay personas secuestradas que conocen muy bien el edificio en el que están encerrados, y eso puede jugar a su favor, aunque no todos son de fiar. Por ende, los familiares de los rehenes tienen su dosis de protagonismo en los primeros capítulos, sobre todo los padres de los menores, y más adelante otros familiares que terminan convirtiendo el thriller en un drama personal con mucho peso en la recta final.
Mientras tanto, los agentes de policía lo dan todo por despejar la identidad de los secuestradores y averiguar cómo dar con ellos. En muchas ocasiones dan palos de ciego, y descubren que alguien que conoce muy bien el banco, desde dentro, debe estar implicado en el atraco. Los periodistas son otro obstáculo para la policía, principalmente una ambiciosa reportera que filtra información para colgarse la medalla, y para más inri ha tenido una relación sentimental con uno de los encargados del cuerpo de policía. Otro drama al que por suerte no dan importancia.
En España no hay ningún canal que esté emitiendo el thriller rodado en Bélgica, con un tono nórdico pausado que quizás no tenga mucho que ver con las series que se realizan dentro de nuestras fronteras. Puede que no sea una ficción para maratonear, pero habiendo tantos canales y plataformas me parece curioso que no apuesten por esta gran serie, con los ingredientes idóneos para enganchar al público, principalmente a los amantes del género. Destaco la originalidad en la narración y los cliffhanger de cada capítulo, devolviéndonos a los nostálgicos tiempos del pasado, cuando los giros de las series se daban al final de cada episodio.