El capítulo final de la tercera temporada de 'Damages' (aquí sería 'Daños y Perjuicios') ha sido toda una obra maestra, algo que no habíamos visto en la serie desde el primer año, cuando nos mantuvieron expectantes de principio a fin con el caso Frobisher o la muerte de David (prometido de Ellen Parsons). Casualmente el episodio final de la última temporada también trató estos temas, pero no por ello ha sido brillante, sino por el estilo de narración, las escenas intrigantes, las interpretaciones de sus protagonistas femeninas o por la calidad del maravilloso argumento.
Si alguien me dice semanas atrás que voy a poner por las nubes a 'Damages' una vez más no me lo creería, puesto que desde el inicio de la segunda temporada dejé de ver la serie con gusto. Desde mi punto de vista, las historias de Patty y Ellen perdieron el 90% de la energía al terminar la primera temporada, y sólo ha sido recuperada al 100% en este magnífico capítulo, que ha mezclado la (imprescindible) lentitud que caracteriza a la serie, con unos tintes acelerados a la hora de resolver tramas como la muerte de Tom Shayes, el enigma del bolso de Ellen o el accidente de coche de Patty.
Mientras que la tercera temporada no ha destacado en ningún aspecto, su final lo ha hecho, dejando ir a la serie por la puerta grande. Aunque esa marcha no es definitiva, ya que a partir del año que viene (en julio, precisamente) Patty Hewes volverá con nuevos casos y misterios, y por partida doble, ya que Glenn Close tiene aseguradas dos años con 'Damages' en el canal DirectTV.
Quizás lo más impactante del capítulo haya sido ver el pasado de Hewes, su trauma con el aborto sufrido (y en parte intencionado) 38 años atrás. En el flashback nos muestran que es ahí donde Patty comenzó a ser fría, donde tomó la dura decisión de dejar de lado todo lo que tuviera que ver con lo personal, para dedicarse de lleno al Derecho. Lo que no ha quedado tan claro es quién era el hombre al que visitaba, y por qué decidió dar largos paseos hasta el rancho de aquel señor y no a cualquier otro lugar.
En la actualidad, como es de suponer, Patty no goza de una vida personal feliz, tras el divorcio con su marido (y la infidelidad que éste mismo cometió), la relación con su hijo no ha mejorado en absoluto. El joven se ha enamorado de una mujer a la que Hewes detesta, por lo que la abogada ha manejado sus hilos para encarcelarla, incluso estando embarazada. Por lo visto su hijo se tomó la justicia por su mano, provocando una colisión entre el coche de Ellen (robado por él mismo) y el de su madre. A pesar de salir ilesa del golpe, no queda claro si la intención del hijo era acabar con la vida de Patty Hewes.
En el caso de Ellen Parsons, las cosas no van mucho mejor, la joven y despierta abogada no encuentra estabilidad desde que entró en el bufete de Hewes. Además, ahora, una vez muerto su futuro socio Tom, Parsons no sabe que hará con su vida, ¿volverá a trabajar con Patty? ¿dejará de lado su carrera como abogada? Lo que está claro es que en la cuarta temporada los caminos de ambas protagonistas se cruzarán de nuevo, como amigas o enemigas, pero no hay duda de que se volverán a reencontrar.
Rápidamente un par de apuntes. En primer lugar, me parece una pena que Tom deje de aparecer, y que lo haga de esa manera, creo que nadie se lo esperaba. Por otro lado, decir que el caso de los Tobin simplemente ha servido de telón de fondo en la season finale, pero el desenlace de la trama ha sido interesante, al menos ha resultado ser mucho mejor que el desarrollo de la trama.
Para los guionistas o responsables de la cuarta temporada de 'Damages' sólo pido una cosa: que se basen en capítulos como el 3x13 o cualquiera de la primera temporada para desarrollar la próxima historia, porque como nos intenten vender un bodrio como el del segundo año, yo me doy de baja definitivamente.