Cris, la gran sorpresa en la segunda temporada de ‘Skam España’

La segunda temporada de ‘Skam España’ en Movistar+ ha ido un paso más allá que la serie original. La adaptación española se ha centrado en Cris a lo largo de la última tanda de capítulos. Este personaje desenfadado pasó desapercibido en la serie noruega, y hemos podido conocerlo a fondo de la mano de una de las mejores actrices jóvenes del elenco, Irene Ferreiro.

Hasta el momento sabíamos que Cris es una tía enrollada, siempre con ganas de fiesta, sin ningún tipo de atadura y totalmente abierta de mente. Ha tenido varios rollos con chicos, pero nada serio, hasta que sin preverlo aparece en su vida Joana, una chica de raíces argentinas que enamora a la rubia de trenzas. Su relación va de menos a más en todos los sentidos, se vuelve muy intensa, y pasa por muchos baches poco comunes en chicas de instituto. Hasta llegar al final feliz de momento tienen que pasar por distintas pruebas de fuego.

‘Skam España’ vuelve a tocar temas delicados con naturalidad y con mucho tacto. Lo que más me gusta de la serie es la verdad que se esconde detrás de cada conversación, con expresiones que no están maquilladas, y con cierta libertad en los actores que se capta enseguida por parte del espectador. Puede que no sean los mejores actores y actrices de la televisión, pero son muy jóvenes y les queda mucho recorrido, por no hablar de la mejora palpable de una temporada a otra.

Esta vez nos hemos metido en el entorno familiar de Cris, con una madre sobreprotectora con su hija pequeña, y un hermano mayor que ha ido ganando puntos a medida que avanzan los diez capítulos centrados en la rubia. La conversación entre Cris y su hermano en el episodio final de la segunda temporada es de aplaudir, un ejemplo, y a la vez un reflejo de algo que cada vez ocurre más. Debería ser así siempre, anteponiendo la felicidad de nuestros seres queridos a creencias o tradiciones escrupulosas.

A pesar de que la segunda tanda se haya centrado en Cris, otros personajes también han avanzado, aunque en segundo plano. Eva ha dejado el drama a un lado tras su ruptura y sus ataques de celos con Jorge, ahora es una chica más despreocupada, y hasta se lleva bien con su ex, aunque en el capítulo final hay una puerta abierta para la vuelta de la pareja, algo que puede afectar negativamente a ambos. Me ha gustado mucho más verla liberada que atada a una relación tóxica.

A eso va encaminada Nora con Alejandro. Viri ya ha pasado página con este chico por el que estuvo obsesionada, y a Nora le atrae, no lo puede evitar, aunque hay una parte de él que le repele, tal vez lo chulesco de sus formas, pero posiblemente también sea eso lo que le guste del chico que ha anunciado que es su último año en Madrid. ¿Dará pie esto a una tercera temporada con Nora a la cabeza? Nicole Wallace sabe cómo seducir a la cámara, solo su mirada y su sonrisa merecen un puesto de honor en ‘Skam España’.

Amira es la más reservada de las chicas, y entrar en su entorno familiar daría para muchas tramas interesantes, tal y como ocurrió en la versión original de ‘Skam’. Esta temporada se ha comportado como una amiga de diez con Cris, siempre a su lado, anteponiendo su amistad a cualquier otra cosa, y apoyándola en los momentos más duros en los que parecía que Cris pasaba de todo, y de todas sus amigas.

En cambio, no tendría sentido hacer una temporada protagonizada por Lucas, o al menos no tan seguido. Prácticamente, Cris ha pasado por lo que pasó el personaje de Lucas en la ficción noruega, recordad que Even era bipolar, algo similar a lo que ocurría con Joana. Además, la segunda etapa ha servido para que nuestro Lucas se muestre tal y como es, sin esconderse, y así Cris tomar como ejemplo los consejos y tutoriales de su amigo en Youtube. Y es que ‘Skam España’ no se despega de la actualidad, las redes sociales y las nuevas tecnologías están muy ligadas a la serie de Movistar+, se echará de menos cada clip o instantánea hasta el regreso de los nuevos episodios.

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