(Contiene spoilers de la 4ª temporada)
Menos mal que Showtime avisó con tiempo sobre la renovación de '
Shameless', sino ahora mismo seríamos huérfanos de
una de las mejores ficciones de la actualidad, por no confirmar rotundamente que es la mejor. El reparto de la serie se sale en todos los sentidos, cada fichaje encaja correctamente, y las
pequeñas-grandes idas y venidas que se han dado en estos cuatro años han estado bien justificadas argumentalmente hablando.
A rasgos generales, es un acierto dejar en segundo plano a
Frank, en esta ocasión enfermo y moribundo, pero a los Gallagher lo que no les mata les hace más fuertes, y con el cabeza de familia no podía ser de otra manera, así lo demuestra Frank en una de las escenas finales, acompañado de su avanzado aprendiz, Carl. El adolescente ha explorado nuevos caminos este año, junto a Bonnie ha conocido el amor, y el desamor, todo envuelto en un contexto entrañable, todo lo entrañable que puede ser '
Shameless'.
El caso de Debbie ha sido parecido, ambos hermanos están recibiendo las flechas de cupido al mismo tiempo, pero la pequeña Gallagher ha tenido todavía más complicaciones. Sus ganas de crecer han jugado en su contra, dándose contra la pared una y otra vez, soportando las burlas en clase y las calabazas en el corazón, tras enamorarse de un chico bastante más mayor que ella. Pero Debbie es única, ella no pierde la esperanza, y para mí sigue siendo la mejor de la familia.
Ian ha estado más ausente este año, sobre todo en la primera mitad de la temporada. No obstante, Mickey ha ganado protagonismo en ausencia del pelirrojo, su matrimonio con la prostituta rumana y su reciente paternidad han dado mucho juego, pero todo se magnifica cuando Ian vuelve a entrar en su vida y Mickey se da cuenta de que realmente quiere pasar el resto de su vida con él, sin importar lo que el resto opine. Esto le lleva a pelearse con su padre y a soportar constantes amenazas de su mujer, pero lo peor está por venir, Ian podría haber heredado la bipolaridad de Monica, su madre.
Noel Fisher, Mickey, es el actor revelación de la temporada, sin duda. El año que viene seguro que sigue dando de qué hablar, lidiando con la enfermedad de su amante y con la presencia de esa odiosa esposa que no parece que vaya a poner las cosas fáciles a la pareja, por eso es imprescindible que continúe en la quinta temporada. En cambio, no es tan necesaria la presencia de Amanda, el nuevo ligue de Lip, la historia de este personaje vuelve a ser la más aburrida, su etapa en la Universidad está siendo poco relevante, todo para que en el capítulo final intuyamos que sigue sintiendo mariposas en el estómago cuando ve a Mandy, desaprovechada este año.
Terminamos con los Gallagher hablando de Fiona,
Emmy Rossum sigue bordándolo, es una pena que en los premios la sigan ignorando (tanto a ella como a la serie en general). A la guapa joven le ha venido muy bien la marcha de Steve/Jimmy, aunque no han acertado emparejándola tan pronto con otro chico aburrido, Mike. Menos mal que el hermano de éste aparece para complicar un poco las cosas, aunque todo esto haya terminado con un
deja vu de '
Orange is the New Black', habría sido perfecto explotar más la estancia de Fiona en la cárcel. Ahora queda una puerta abierta para que vuelva Steve, espero que esa escena final no signifique lo que todos estamos pensando.
Respecto al resto del reparto, Sheila empezó estando en segundo plano, pero en los últimos episodios ha vuelto a ser la de los inicios, fantástica. Con Kev y Veronica ha pasado todo lo contrario, en la primera mitad su presencia fue más alta que en la etapa final, pero aquellos momentos de embarazos, abortos y madre de por medio compensan con creces su posterior escueta aparición.
Para la siguiente temporada
sería un acierto recuperar a Monica, ahora que Ian va a necesitar un referente, aunque la madre de los Gallagher no sea precisamente un ejemplo a seguir. También he echado de menos a Karen en algunos momentos, tal vez por lo aburrido que se ha vuelto Lip. Tenemos ocho meses para darle vueltas a lo que puede ocurrir a la vuelta de '
Shameless', pero como siempre nos terminan sorprendiendo lo mejor es que nos quedemos con todo lo que nos ha dado la cuarta temporada, y desearles mucha suerte en los Emmy, esta vez en la categoría de comedia.