(Contiene spoilers de la 3ª temporada)
Ha vuelto a pasar lo mismo que el año pasado,
la tercera temporada de 'Atypical' ha ido de menos a más, hasta dejar a los espectadores con ganas de seguir viendo qué ocurre con sus personajes. No me cabe duda de que Netflix volverá a apostar por la serie de Robia Rashid, que ofrece un cóctel imposible de rechazar que contiene tanto drama como comedia.
'Atypical' no es una serie de carcajadas, de hecho, les suele gustar más indagar en las "pequeñas tragedias" de los protagonistas, empezando por Sam, que vuelve a estar interpretado, como no puede ser de otra manera, por el infalible Keir Gilchrist. Esta temporada ha tenido avances importantes, ya sabe lo significa ceder y hasta lo ha practicado, sobre todo con Paige, que ha estado más necesitada que nunca.
Desde el principio me ha caído mal la novia de Sam, con hambre de protagonismo y comportándose siempre de forma pedante. Sin embargo, esta ha sido su temporada, por fin he comprendido a este personaje y me ha llegado a emocionar. Paige se ha visto obligada a dejar la universidad por no cumplir sus expectativas, y porque no se encontraba en un ambiente confortable, la hostilidad de sus compañeros ha podido con ella, que se ha derrumbado sin darse una segunda oportunidad.
Puede que esto haya reforzado su relación con Sam, que vuelven a estar unidos, sin necesidad de usar Skype o sucedáneos para tener que verse las caras. La metáfora de la lancha con la que ha cargado la joven hasta el final de temporada dice mucho de su persona, y de Sam, que termina haciendo un favor a su chica sin que ella lo sepa, y sin echárselo en cara. Inédito.
Frágil amistad
Sam y Zhaid han protagonizado otro de los dramas más importantes de este año. Esta vez ha vuelto a ser Sam el que se comporta de forma cabal, mientras que su amigo y compañero de trabajo ha antepuesto una relación amorosa efímera a su amistad. Realmente ha sido de lo más flojo de la temporada, Zahid me interesa más bien poco, y en los nuevos capítulos le veremos más todavía, porque será el compañero de piso del protagonista.
La reconciliación de Sam y Zahid ha sido el eje de la recta final de 'Atypical', mientras que Casey y Evan han podido aclarar también sus sentimientos, y al menos zanjar amistosamente su larga relación. El descubrimiento de la orientación sexual de Casey se veía venir desde la temporada pasada, aunque ha pillado por sorpresa a los allegados de la susodicha.
No obstante, Casey ha tomado una decisión drástica, y no solo ha dejado a Evan, también ha decidido priorizar su carrera deportiva, dejando a un lado sus líos con Izzie, que tampoco es que se lo haya tomado tan mal, más bien parece que se ha quitado un peso de encima. Me encantaba la pareja formada por Casey y Evan, ahora que Sam estaba cogiendo confianza con su cuñado nos vamos a tener que conformar con verle fuera de la casa de los Gardner, si es que sigue el año que viene en liza.
¿Matrimonio feliz?
Los que han tenido un final redondo han sido los padres de los protagonistas. Elsa y Doug se van a dar otra oportunidad, ella ha seguido siendo dócil, algo que no le pega nada, pero ha demostrado que se arrepiente por completo de lo sucedido con aquel camarero. Ahora pondremos a prueba a Doug, porque puede que no haya perdonado el desliz de su mujer, por mucho que quiera que todo sea como antes.
El año que viene deberían estar solos en la casa, con Casey en California y Sam independizado junto a Zahid, puede que recuperen el tiempo perdido y encuentren ese amor que se desvaneció. Tal vez Elsa tropiece con la misma piedra, o por el contrario, quizás Doug se siga viendo tentado a quedar con esa compañera con la que ha habido algo más que un roce.
'Atypical' ha acertado de nuevo este año, puede que se haya hecho lento el inicio de temporada, con pocas cosas nuevas que contar. Sin embargo, no han tardado en alzar el vuelo y volver a ser los de siempre, con la evolución de Sam, sin que deje de ser él mismo, y con los avances (y retrocesos) en las relaciones del resto de personajes de esta adorable serie.