Experimentos, espías, contraespías, una extraña organización detrás de todo y situaciones que en ocasiones rozan lo sobrenatural, no me refiero a 'Perdidos' ni mucho menos a 'El Internado', aunque todas estas ficciones tengan estos puntos en común, también sirven como base a 'The Cult'. Pero ésta no es la única coincidencia, esta ficción también cuenta con protagonistas a priori sin ninguna relación ni vínculo, que parecen ser los elegidos por azar, pero de los que a medida que va avanzando más la historia vamos conociendo más sobre ellos y por qué son ellos los elegidos. Y ahí no acaba la cosa, cada episodio de los 13 que componen la serie cuenta con flashbacks centrados en un personaje que nos ayuda a entender cómo han acabado todos donde han acabado. Y todavía hay más, ¿qué sería de una serie de estas características sin una figura a lo Desmond Hume, capaz de viajar en el tiempo? Por no hablar de los simbolismos, elementos comunes sin ningún interés en particular, como puede ser una flor, una escotilla, unos números o un ojo, pero que sirven para crear toda una mitología a sus espaldas, principal éxito de la serie de ABC que 'The Cult' pareció intentar emular con distinta fortuna.
Producida por Fox21 y emitida en Showtime, 'Homeland' se ha convertido en la gran serie revelación de esta temporada, tras ganar el Globo de Oro a mejor drama y a mejor actriz de drama para una magnífica Claire Danes en el papel de Carrie Mathison, además de varias nominaciones para los próximos Emmy. Pero hoy no estoy aquí para hablar sobre 'Homeland', sino sobre la original 'Hatufim', cuya traducción literal vendría a ser "raptados", pero que el mundo anglosajón se ha encargado de bautizar como 'Prisoners of War' (Prisioneros de Guerra). A pesar de que esta serie no sea tan negra como las anteriores que os he presentado, sí que cuenta con bastante misterio y me parecía interesante incluirla en el ciclo de series negras y de misterio no estadounidenses que estoy llevando a cabo estas semanas.
Todo comienza cuando tras realizar un trabajo para su jefe Eddie (Peter Wight), Mia recibe una postal de Wendy, la mujer con la que tuvo una relación cuando todavía era hombre que le cuenta que se está muriendo de cáncer, pero hay más, le revela que es el padre de su hijo Ryan (Jorden Bennie), de once años. Aunque a priori dudará sobre si quiere o no modificar su vida, una visita a la casa rural de Wendy, donde descubre que su ex-novia ya ha fallecido y halla a cuatro menores de edad desamparados obligados a crecer sin estar todavía preparados para ello, despertará el instinto maternal de Mia.
El puente de Öresund fue construido en 1999 con la finalidad de conectar por carretera y ferrocarril Dinamarca con Suecia, países hasta entonces desconectados por vía terrestre. Gracias a sus ocho kilómetros, Copenhague quedaba unida a través de esta construcción con Malmö y tanto Suecia como Finlandia dejaban de estar aisladas respecto al resto de la Unión Europea. Tras un corte de luz a medianoche, la aparición de un cadáver en este puente sirve como inicio para esta serie suecodanesa de diez episodios.
Su original planteamiento
Lo más remarcable de esta serie es su magnífico primer capítulo, quizá porque se aleja de todas las historias de atracos que hemos en televisión. Todo arranca con el robo más grande en la historia del Reino Unido, el suceso tiene lugar en un almacén de dinero, un grupo de atracadores enmascarados irrumpen en él y consiguen hacerse con el botín. ¿Pero cómo han podido saquear esta inexpugnable fortaleza? Pues porque tres de los trabajadores forman parte del brutal entramado. Tampoco voy a ponerla por las nubes, estamos ante una historia con mucha potencia que falla un poco en su final, en mi opinión, no han conseguido darle un cierre a la altura.
Si por algo ha sido criticada 'The Killing' ha sido por su lentitud a la hora de resolver un caso, veintiséis episodios para descubrir quién acabó con la vida de un adolescente puede que sean excesivos, quizá la narración de un capítulo por día haya frenado el ritmo, pero hay que reconocer que la serie destaca por su coherencia temporal, a pesar de habernos mareado en círculos varias veces. El episodio que ha servido como cierre de esta segunda temporada, en el que finalmente hemos descubierto la identidad de quién asesinó a Rosie (Katie Findlay), ha sido maravilloso, el mejor episodio de la temporada y, me atrevería a decir, de la serie, aunque para entender muchas de las situaciones que suceden en él es necesario haber visto el resto de la serie.
Advertencia: Esta entrada contiene spoilers de la segunda temporada de 'Juego de Tronos'
Aunque el argumento suene un poco a comedia romántica, no es una serie que trate sobre el amor verdadero ni nada por el estilo, es más, a los pocos episodios la rotura de la pareja quedará en un segundo plano, solamente recordada por el título que da nombre a la serie, pues en seguida se convierte en una serie fresca y desenfadada en la que un grupo de amigos sufre cómicas situaciones en su día a día.
Longmire
Walt Longmire es un eficaz sheriff del condado de Absaroka, en Wyoming, que perdió a su mujer hace un año. Este duro golpe en su vida le produce un gran dolor, pero gracias a su hija Cady, llega un ponto en el que Longmire consigue salir adelante, aunque también cuenta la llegada de Vic, una chica nueva en su departamento, que le anima a presentarse a la reelección como sheriff. Precisamente en esa elección del sheriff deberá enfrentarse a Branch, un ambicioso rival más joven que no le pondrá las cosas nada fáciles. La serie está basada en las novelas de Craig Johnson.
Reparto: Robert Taylor ('Hercules') como Walt Longmire, Katee Sackhoff ('Battlestar Galactica', '24') como Victoria "Vic" Moretti, Lou Diamond Phillips ('Cougar Town', 'Numb3rs') como Henry Standing Bear, Bailey Chase ('Daños y perjuicios', 'Salvando a Grace') como Branch Connally, Cassidy Freeman ('Smallville') como Cady Longmire y Adam Bartley como The Ferg.
Día de estreno: 3 de junio
Cadena: A&E