La RTVE que ellos quieren: el secuestro del PP y VOX a una institución que nos pertenece a todos

Un gran perfil moderado y uno de los padres de la televisión educativa como creador de 'La aventura del saber' con un consejo designado por dos partidos de izquierdas y dos de derechas que al final acabaría siendo un gol en propia puerta para el actual Gobierno de coalición.

Hoy nos hemos encontrado con la noticia de que el presidente ha intentado intimidar a una periodista de la casa por un tweet donde criticaba un aspecto de la gestión de la empresa dos meses después de defender "la libertad de expresión" de algunos consejeros que atacan a trabajadores de la casa.

La verdad es que sorprendió el protagonismo que tenía la derecha y extrema derecha en los informativos de Televisión Española durante el mandato de Rosa María Mateo pero con José Manuel Pérez Tornero parece que hayamos vuelto a los oscuros tiempos del PP, si bien con una serie de buenos profesionales que intentan mantener la dignidad.

Hace unas semanas Esteve Crespo, Director de Informativos de toda RTVE, presentó su dimisión agotado de tantas presiones que favorecían a la oposición donde informaciones que ponían en entredicho al Partido Popular e incluso a VOX quedaban en un segundo plano o directamente ni se emitían.

Y es que en una anormalidad democrática dentro de nuestra anormal democracia, el que ha sido casi siempre aparato de propaganda del Gobierno de turno se ha convertido en un aparato de propaganda de la oposición contra el Gobierno, desde el uso de descalificativos a gestiones del PSOE hasta el intento de ningunear a la formación morada.

A rasgos generales TVE tiene unos buenos servicios informativos: nadie debería poner en duda que la información de la guerra de Ucrania, con sus cosas, ha sido de lejos la mejor de las televisiones generalistas, y en las radios ha sido más o menos igual, con un buen trabajo por parte de Víctor García Guerrero, Óscar Mijallo, Fran Sevilla, Almudena Ariza, Carlos Franganillo o la propia Anna Bosch, una de las protagonistas de este artículo, entre otros nombres. También el tratamiento de la información de caracter social o cultural tiende ser sobresaliente, así como aquellos Telediarios temáticos centrados en temas concretos que añaden mucho más contexto a la información son una modernización de la narrativa que los distingue de los noticieros de las privadas, más centrados en el espectáculo que en ofrecer verdadera información.

El problema está principalmente en la información sobre política nacional y, en ocasiones, la internacional, con una agenda marcada por los intereses del PP y VOX, siguiendo el juego a los intereses de la derecha y extrema derecha.

Y es que no puede ser que una institución pública sufragada con el dinero de todos contribuya a desinformar y a intoxicar a la sociedad reproduciendo los bulos con una falsa equidistancia que favorece al opresor, como si obedeciera a los mismos intereses económicos que las empresas privadas de la competencia.

En Internet estoy leyendo muchas quejas de que el PSOE le ha regalado al PP la radiotelevisión pública pero lo cierto es que Unidas Podemos también dio su visto bueno a este paripé de renovación en contra de los trabajadores que se quejaron desde que se anunció el acuerdo, así que es ten responsable como la formación liderada por Pedro Sánchez.

No creo que haga falta explicar pero me siento con la necesidad de hacerlo de que tampoco quiero que Radiotelevisión Española sirva a los intereses de la izquierda, si bien creo que no se puede mantener neutral en determinados temas que corresponden al avance en cuanto a derechos humanos, se puede y se debe aspirar a un perfil apartidista como se consiguiera en los tiempos de Fran Llorente.

La aparición de dos nombres como Anna Bosch y Xabier Fortes en listas negras evidencia que la derecha corrupta sigue teniendo un gran poder en una institución que nos pertenece a todos y, por supuesto, hay que enviar todo nuestro apoyo a esos dos periodistas cuyo único "delito" es incomodar a aquellos que tienen mucho que esconder.

La RTVE que ellos quieren

A mitades del año pasado nació con una gran ilusión por parte de algunos usuarios de aquí (incluido yo) RTVE Play, una actualización de RTVE a la carta, que es una estupenda plataforma de streaming gratuita con grandes series nacionales e internacionales, películas españolas y latinoamericanas y documentales multipremiados al alcance de todo el público pero que, sin embargo, no parece alcanzar a todo ese público.

El otro día un artículo de Bluper hizo público que se desvió el dinero de promoción de contenidos de esa plataforma a La gran consulta, una campaña sin repercusión que sólo supone unos viajes en bus por toda España para María Eizaguirre, la Directora de Comunicación de la empresa, que busca tener mucho más protagonismo del que debería.

Y por eso la plataforma de streaming de la radiotelevisión pública sigue siendo una gran desconocida al estrenar contenidos de una calidad sobresaliente con una casi inexistente promoción.

Ante esa noticia, Anna Bosch expresó una pequeña queja en su cuenta personal de Twitter diciendo que RTVE Play es el futuro y debe ser cuidado como tal, eso ha provocado que Tornero la haya citado a ella sola en su despacho con un abogado para darle un toque de atención.

El catedrático, el que hasta hace poco me parecía un profesional bastante respetable, defendió la libertad de expresión de Carmen Sastre (consejera del PP) al soltar bulos que acosaban a los trabajadores de RTVE, pero es incapaz de aceptar una pequeña queja de una buena profesional que únicamente quiere mejorar su empresa.

Mientras tanto, TVE sigue perdiendo audiencia a pasos agigantados y, ojo, no es del todo una mala televisión, La 2 es un gran canal y La 1 no tiene ni de lejos una programación peor que la de sus competidores: hay unos "buenos" (imperfectos) informativos, buenas series, concursos entretenidos y en cuanto a ofrecer contenidos culturales no tiene rival, pero es incapaz de conectar con la audiencia ante una gestión que es incapaz de relanzarla al público como debe y eso beneficia a cadenas con unos informativos mucho más sensacionalistas o reaccionarios.

Y el horizonte que se nos presenta no parece demasiado brillante con la compra del Mundial de Catar para maquillar los pobres resultados de audiencia durante un mes o dos a finales de año, sin importar que se celebran en un país donde la violación de derechos humanos está a la orden del día.

La compra de dicho evento obliga a la cadena a meterse en una serie de recortes que provocan que esté bloqueando todo proyecto nuevo que se les presenta: no está claro que 'Cuéntame...' vaya a renovar por una nueva temporada y sólo quedan confirmadas 'La Caza' y 'HIT' como terceras temporadas y 'Los pacientes del doctor García' como nueva ficción.

Lo positivo está en el fichaje de José Pablo López como nuevo Director de Contenidos de RTVE, el mismo hombre que salvó Telemadrid hace unos años hasta ser cesado por Ayuso, pero que tiene una tarea difícil ante una directiva que parece que poco le dejará hacer.

Entre lo malo y lo peor yo me quedo con lo malo, pero RTVE debe ser lo bueno y debe empoderar a la sociedad con buen periodismo y contenidos de calidad y de momento está muy lejos de hacerlo. Por supuesto, no todo es blanco y negro y hay también bastantes apuestas valiosas que deben ser destacadas: si la izquierda cae en el vacío discurso de que la actual radiotelevisión pública no sirve para nada, deja de ser izquierda y le hace la cama a la derecha.