Sigo pensando que la edición de 'Supervivientes' de este año no acaba de despegar. A pesar de que los anónimos le ponen todo el empeño, el casting de famosos ha sido nefasto. Dicho esto, paso a comentar los momentos más destacados de la gala de ayer.
El primer concursante en entrar a plató fue Miguel. El canario, que esta semana abandonó voluntariamente la isla, dejó todo bastante claro, y explicó que su abandono se debía a un sinsentido del concurso, gran parte de ello se debió a "un elemento, con una maleta de flores, un abanico rosa y un ventilador" (José Manuel Parada). Yo creo que al ver a semejante personaje, Miguel se dio cuenta de donde se había metido, se le habían roto todas las ilusiones puestas en el concurso. Considero que hizo bien y que tomó la decisión adecuada. A veces el mundo de la televisión es muy cruel.
Posteriormente entró Bea, que más bien no aportó nada a la gala.
Los últimos en entrar fueron Javi -que fue recibido por ocho personas- y Carla -que sólo se abrazó con una mujer (misteriosamente, la chica que estaba defendiéndola echó a correr y abandonó el plató). A los pobres, como eran los últimos, ni siquiera los entrevistaron sentados, más bien los despacharon en cuanto pudieron. Entre las pocas cosas que dijeron, Javier pidió que lo volvieran a mandar a la isla, quería seguir concursando. El problema es que los concursantes no ponen las reglas del concurso -a pesar de que alguno no se haya dado cuenta y trate de imponer su ley-. Es lo que hay, si así lo ha decidido la audiencia, hay que aceptarlo. Que se lo digan a Miriam.
Víctor, que estaba nominado junto a Trapote, fue el expulsado por parte de la audiencia. Es lo que tiene enfrentarse a alguien que cae mal a gran parte del público y que pide a la gente que la eche.
Esta semana hay tres nominados: Mireia y Trapote (nominadas por los compañeros) y Óscar (nominado por Parri, el líder). Creo que la decisión de Parri ha sido muy acertada, pues hay que recordar que 'Supervivientes' es un concurso individual, no una comuna hippie, y ya hay que intentar deshacerse de los rivales más fuertes; si yo hubiese estado en su situación, habría hecho lo mismo. Mireia y Óscar se miden a la audiencia por primera vez, mientras que para Trapote ya será la tercera nominación.
Creo que la semana que viene vamos a ver salir a Mireia de la isla. Trapote, como bien indicó alguien en la gala, sigue ahí como castigo y no por adoración. Por el contrario, creo que Óscar se salvará y que aún le queda bastante carrera dentro del concurso.
Por último, desde aquí pido que se elimine del concurso a Parada, considero que es una persona muy cansina, que no aporta nada y que siempre está con las mismas. Cree que su ¿humor? hace gracia, tiene la osadía de compararse con Jesús y no deja de interpretar el papel de buena persona dolida. No hay nadie que se lo crea y convivir con alguien así tiene que ser una tortura. Lo peor de todo es que se cree la estrella del programa cuando más bien hace todo lo contrario, es un personaje que hace a la gente cambiar de canal: las pruebas que le manda hacer la organización, a pesar de querer ser dantescas, se quedan en soporíferas. Además, no me parece justo que alguien que conoce información del exterior comience a contar cosas, como los datos de audiencia, pues aunque parezcan una chorrada, te hacen cambiar anímicamente.
Por si fuera poco, al final de la gala decidió echar mierda sobre Miguel, contándoles a sus compañeros que los motivos que habían llevado al canario a abandonar el programa habían sido el mismo José Manuel Parada, ¿hace falta ser tan egocéntrico y tergiversar tanto las cosas?
Necesitas ser usuario registrado de FormulaTV.com para comentar en este blog. Conéctate o haz clic aquí para registrarte