Especial Eurovisión 2015: Final

Aunque sigo de mal humor por la no clasificación de Islandia, una de mis favoritas, para la final de Eurovisión, voy a hacer de tripas corazón para rematar este repaso a las 40 canciones de este año. Tras las dos semifinales en las que ya hemos visto posibles ganadores llega el turno del Big Five, del país anfitrión y del país invitado. Además, ya sabemos cuál será el orden de actuación para mañana: Edurne interpretará su Amanecer en el puesto 21, después de Rumanía y justo antes de Hungría. ¿Será un buen presagio?

Francia

Hay que tenerlos de rosca para ir a Eurovisión con una canción que recuerda los dramas de la Primera Guerra Mundial. Este N'oubliez pas es un grower en toda la regla, una canción que empieza discretita en plan balada random pero que en la segunda mitad se viene arriba y adquiere el cariz épico que requiere una letra tan sufrida. La potente voz de Lisa Angell (que de lejos se parece a Loles León) le pone el broche final a la canción francesa, una de las mejores que el país de Marlene Morreau ha mandado en los últimos años. Si hay que ponerse quisquilloso y buscarle los defectos, el más destacable sería que tarda demasiado en arrancar, algo que en Eurovisión se puede pagar muy caro.

Nota: 6,75

Posición final: Parte media de la tabla

Reino Unido

Inexplicablemente situados en la mitad de la tabla por parte de las apuestas de pago, la propuesta de este año del Reino Unido para Eurovisión más bien parece una actuación de la orquesta que va a tu pueblo a cantar durante las fiestas patronales. Cuesta creer que el país responsable de los mayores éxitos musicales de la historia del pop nos torture con cosas como este Still In Love With You. Interpretado por el énesimo dúo mixto de esta edición de Eurovisión, en su videoclip intentan transportarnos a El Gran Gatsby cuando lo que hacen en realidad es que parezca que estamos en un show para jubilados de un hotel de Benidorm. Un cuadro.

Nota: 2

Posición final: Ojalá sean bottom ten.

Australia

A estas alturas no creo que quede nadie por sorprenderse ante el hecho de que Australia participe este año como país invitado en Eurovisión pero, por si acaso, una breve explicación: se trata de una participación puntual, que sólo en caso de ganar repetiría. Guy Sebastian es el encargado de enarbolar la bandera de la tierra de los canguros en Viena con esta magnífica canción que yo llevo escuchando en bucle desde hace un mes. Tonight Again, que perfectamente podría haber sido uno de los singles más exitosos de Bruno Mars, tiene todas las papeletas para colarse en top 5 de Eurovisión. Sin embargo, siempre nos quedará la duda de saber qué le habría pasado a Australia de haber seleccionado una canción regulera. ¿Le votaría Europa en masa sólo por quedar bien?

Nota: 7,5

Posición final: Top 5

Austria

El país anfitrión vuelve a apostar por las barbas (chiste fácil, lo sé, no me lo tengáis en cuenta) con The Makemakes, este grupo de jóvenes desgarbados como recién salidos de un anuncio de Estrella Damm. La canción con la que intentarán revalidar el triunfo de Conchita es este I Am Yours, que parece haber sido compuesto única y exclusivamente para poner de fondo durante la típica secuencia de comedia romántica en la que el chico le propone matrimonio a la chica cuando ésta pensaba que la relación ya no tenía remedio demostrándole así que la ama de verdad y que podrán superar juntos cualquier mal momento que se les ponga enfrente. Aún así, la canción es muy cuqui, y se ha convertido en uno de mis guilty pleasures de este año en Eurovisión.

Nota: 6,5

Posición final: Parte media de la tabla

Alemania

Como si de Isabel Pantoja se tratase, el país del chucrut y el Jägermeister llega a Eurovisión precedido por el gafe. Black Smoke es el tema que presentan y Ann Sophie es su cantante accidental. ¿Por qué accidental? Pues porque llega a Eurovisión como segundo plato después de que el ganador de la preselección alemana renunciase a representar a su país porque ese día tenía cita con el endocrino (o algo así). A este mal presagio se le suma el hecho de que Black Smoke tampoco es para tirar cohetes: una canción pop con toques soul que no destaca entre el resto de propuestas similares (Estonia o Letonia, sin ir más lejos) y que tampoco es que Ann Sophie interprete de manera demasiado brillante. De lo más olvidable del Big Five.

Nota: 4

Posición final: Bottom ten

España

Por fin llega la hora de la verdad. Después de que hayamos puesto a parir el videoclip, criticado la nula promoción internacional, denostado a Edurne por lo pobre de las actuaciones en La Alfombra Roja Palace y Alaska y Segura... después de todos estos meses de eurodrama, parece que este año volveremos a estar en el top 10. Amanecer destaca por encima de la media de canciones que se presentan este año y, además, mañana seremos testigos de la puesta en escena más elaborada que España haya mandado nunca a Eurovisión. Una vez confirmado que Edurne interpreta el tema con solvencia, sólo nos queda confiar en que mañana por la noche salga todo a pedir de boca y podamos estallar en vítores y standing ovations desde nuestras casas cuando acabe el último ieieoo.

Nota: 8

Posición final: Top 10

Italia

Yo, que tengo debilidad por las canciones italianas en Eurovisión (el L'essenziale de Marco Mengoni sigue pareciéndome uno de los mejores temas mandados jamás al festival), sigo sin entender cómo narices es posible que esta canción vaya segunda en las apuestas de pago. Más antigua que llamarle 'parte' al Telediario y más hortera los estilismos de Laura Campos de GH12, este baladón operístico no me entra ni con calzador. Quizá sea por mi aversión a incorporar el cante lírico al pop o porque Il Divo me produce urticaria, este es el primer año desde el regreso de Italia a Eurovisión que su canción no entra en mi top 15 de favoritas. Otro año será.

Nota: 4

Posición final: Top 3, al parecer.

Si seguís ávidos de contenidos eurovisivos, podéis escuchar esta playlist en Spotify con mis quince canciones favoritas de este año.

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