'The Good Place' empieza el camino adecuado para convertirse en una de las grandes

La primera impresión que me dio 'The Good Place' fue la de una comedia muy original y diferente a cualquier otra al estar ambientada en un idílico "más allá" y la serie jugó de manera divertida con esa idea.

Pero al final de la primera temporada toda la historia se torció y de repente resulta que nuestros protagonistas se encuentran en el Mal Lugar y lo que hemos visto ha sido todo un teatrillo orquestado por Michael (Ted Danson).

Pues a partir de esta idea ha arrancado una segunda temporada que se mantiene intrigante y emocionante, algo extraño para una comedia con el formato sitcom pero no por ello menos interesante de ver.

El camino adecuado

Cuando empezó 'The Good Place' pensé que era una buena serie con un concepto muy original que estaba simplemente bien, quizás mi nota sería alrededor de un 7 sobre 10 por aquel entonces, lo cual no es para nada malo.

Pero la comedia de la NBC está empezando el camino adecuado para convertirse en una de las grandes, quizás suene a apuntar demasiado alto, pero está arriesgando, innovando y potenciando sus cosas buenas además de introducir nuevos elementos que le dan un tono distinto y eficaz.

El principal motivo para ver la serie son las grandes interpretaciones de Ted Danson y, sobretodo, la siempre maravillosa Kristen Bell, que están fantásticos en sus papeles y hacen que valga la pena.

'The Good Place' va por el buen camino, está madurando como serie y proponiendo grandes conceptos e ideas y de seguir así, estaremos hablando de una serie excelente.