No nos confundas, JP

¿Qué ha pasado con la mayoría de series de prime time que ha gestionado? Enviadas al late night, emitidas con doble capítulo, canceladas sin tener la más mínima oportunidad de remontar.

Algo similar a lo que le pasó a 'La plaza de La 1', un muy cuestionable magacín de producción propia que no pasó de la semana y media con datos similares e incluso mejores que lo de esto.

¿Por qué de repente tanto convencimiento? ¿Únicamente merecen la paciencia sus amigos?

José Pablo López habla de ataques permanentes utilizando esa excusa para justificar la emisión de ese programa. Los hay, muchos de ellos desde el sector de la ultraderecha, algo que hay que ignorar y otros tantos vienen de gente que deseamos una televisión pública mejor que divulgue conocimiento, cultura y saber estar, no un modelo basado en lo chabacano, lo hortera y lo vulgar.

No, no todo el mundo es válido para formar parte de la televisión pública, el universo 'Sálvame' se nutre de polémicas, hacer daño a otros y de exprimir el morbo de forma tóxica. A la gente le gustan las peleas y los malos rollos, pero la televisión pública debe fomentar el debate civilizado y el análisis profesional y con criterios de servicio público, incluso en programas con un tono más desenfadado.

No tiene sentido darle espacio en un medio público al hablar de la vida privada de los famosos, tanto de los que son profesionales de verdad como los que sólo buscan exponer sus miserias personales para ganar dinero.

Y no, no es clasismo, clasismo podría ser criticar a otros personajes mientras se mira hacia otro lado con fichajes como Tamara Falcó o Carmen Lomana, pero es absurdo esperar el mismo respeto hacia uno que informa de política, guerras o cultura con profesionalidad que al que te vende como exclusiva que Isabel Pantoja está peleada con su hija. Pues que lo solucionen ellas solas y, si no lo quieren solucionar, pues problema de ellas. ¿Y al resto qué nos importa? ¿Y por qué le tiene que importar a TVE?

Pero no es únicamente un programa del corazón, ojalá lo fuera visto lo visto, es peor meter a gente criada en el lenguaje del morbo a tratar temas más serios. Eso hace que, en cierta manera, José Pablo nos haya metido en La 1 algo incluso peor que 'Sálvame' porque su intento de blanqueamiento pone en entredicho la credibilidad de TVE.

El problema no está en los errores, todos nos equivocamos y un gestor de RTVE, aunque tenga una mayor responsabilidad, también tiene derecho a cometer errores. Pero esto no es un error, esto no es una buena intención fallida, es un chanchullo y está jugando al despiste con falsos discursos para justificar el mantenerlo.

Equivocarte es dar luz verde a algún programa como 'Todos contra 1' y que no salga bien y se la pegue. Ahí se pueden apreciar las intenciones de hacer un buen concurso familiar aunque la audiencia le dé la espalda. En este caso, el error era previsible antes de su estreno y nada tiene que ver la audiencia con ello si no porque no hay forma que esta gente encaje en una televisión pública.

Y aunque hable de una campaña política, la realidad es que no hay ningún apoyo real de la izquierda hacia este proyecto. ¿Pretende vender 'La familia de la tele' y al equipo de La OSA como algo de izquierdas? ¿De izquierdas la misma productora que tuvo en nómina a Rafa Mora mientras estaba en asociaciones ultra como España 2000? ¿La que tenía a Antonio David de colaborador mientras grababan un documental sobre Rocío Carrasco donde decía ser maltratada por él? ¿Hay algo más clasista y elitista que la prensa del corazón que se nutre en darle importancia a alguien por el simple hecho de tener dinero?

Por mucho que dijera Jorge Javier Vázquez que era "un programa de rojos y maricones" porque a él la homofobia le ha hecho daño durante muchos años, 'Sálvame' y derivados siempre serán un programa que fomentará los valores de la derecha y escudarse en venderlo como un referente progresista, por mucha Inés Hernand que haya, es únicamente una tapadera cobarde.

Tampoco es muy de izquierdas permitir que esa productora imputada forme parte de un programa informativo de la casa como 'Malas lenguas' por los intereses que hay detrás de ella, puramente económicos, que limitarán la independencia informativa del producto.

Así que no nos confundas, José Pablo, 'La familia de la tele' es un chanchullo que te ha salido mal, así que mátalo y devuelve la dignidad que le estás arrebatando a la televisión pública con tu dimisión. Por una buena televisión pública, que cree una sociedad mejor.