10 años del regreso de 'Doctor Who': 10 razones por las que adorar esta serie

ATENCIÓN: Este artículo está lleno de fanboyleamiento, si eres fan de verdad de 'Doctor Who' desde luego que te gustará, si no, evita acusarme de pedante.

"¡CORRE!", esa fue la primera palabra que le dijo el 9º Doctor a Rose Tyler nada más conocerse y hoy se cumplen 10 años de ese gran momento, el día en que 'Doctor Who' regresó a la pequeña pantalla tras su cancelación en 1989 y su fracaso de volver a recuperarla con una película en 1996.

La BBC decidió estrenar la tarde del 26 de marzo de 2005 esta secuela de la mítica serie británica que arrancó en 1963 y lo hizo contra todo pronóstico ante 10,8 millones de espectadores, un dato espectacular que iría bajando hasta estabilizarse en sus 7 millones de espectadores habituales. Protagonizada por Christopher Eccleston y Billie Piper y dirigida por Russell T. Davies en su momento, la ficción ha ido teniendo cambios tanto en su elenco como en su dirección a lo largo de las ocho temporadas que lleva actualmente.

No recordaremos el piloto de 'Doctor Who' precisamente por su gran calidad, ¡unos maniquíes cutres la lían en medio del Londres del por aquel entonces presente!. La mala iluminación, los efectos especiales de cartón piedra y este arranque visiblemente tan ridículo pudo espantar a cualquiera, yo entre ellos, pero los que hemos aguantado más allá del piloto y de los primeros episodios estamos aquí celebrando su 10º aniversario porque tenemos 10 razones (y más) para adorar esta serie:

10. "Si una serie que empieza con unos maniquíes asesinos acaba siendo una gran maravilla, es que algo no comprendimos del piloto": El usuario galeo soltó esta frase durante el Premio A Contrarreloj de los 'Doctor Who 10Years AWARDS' y razón no le falta. El piloto de 'Doctor Who' no será lo mejor que te encontrarás en la historia de la televisión, pero merece la pena verlo, comenzar una serie que parece cutre y mala para darte cuenta con el paso del tiempo que estás viendo una genialidad que no deja de mejorar en ningún momento. 'Doctor Who' es siempre una serie que se supera a sí misma y no sólo por no comenzar bien, si no porque la calidad cuando parece que no puede ser mejor para una serie de este estilo, acaban sorprendiendo.

9. Sus monstruos cutres pero con encanto:

¿Quién podría decir que unas latas gigantes unidas a un desatascador podrían dar para tanto? Los Daleks, los mayores enemigos del Doctor en toda su historia desde su primera aparición en 1963 son unos villanos cargados de una exploración psicológica de lo más interesante: el odio, el uso de la violencia dan el placer, los sentimientos los hacen sentirse inferiores y hay que exterminar a esas razas que de verdad lo son. Eso son los Daleks, creador por Terry Nation hace 51 años inspirándose en la ideología del nazismo. Otros villanos son los Cybermen, una especie de Iron Man plateado con un aspecto bastante ridículo pero capaz de matarte en poco tiempo, son humanos sin humanidad, gente a la que les han rebatado los sentimientos.

8. Sus monstruos terroríficos:

Pero no todos los monstruos son cutres, algunos logran imponer con un aspecto de lo más terrorífico. En este aspecto podemos destacar a los Weeping Angels, creados por Steven Moffat para su episodio 'Blink'. No se mueven cuando los ves, pero se desplazan a gran velocidad tan sólo con un parpadeo y en el momento que te tocan te envían al pasado, a otro tiempo, sin la posibilidad de volver, probablemente estarás muerto antes de haber nacido con tan sólo el toque de un ángel. 'Doctor Who' capítulos realmente inquietantes y desde luego los de los ángeles llorosos suelen ser los más destacables.

7. Sus momentos cómicos: Pocas series de ciencia ficción son más divertidas que 'Doctor Who' y eso se puede asegurar. La ficción británica mantiene momentos realmente absurdos y surrealistas, alejados de ese fino humor inglés que quizás estemos buscando, está cargada de momentos desternillantes.

6. Sus momentos terroríficos:

Una de las mejores cosas de 'Doctor Who' es que pese a ser una serie familiar el terror no queda de lado. La serie apuesta por grandes momentos de tensión capaces de atrapar al espectador utilizando el propio guión para generar unos ambientes malrolleros sin la necesidad de abusar de efectos especiales para ello.

5. Sus momentos emotivos:

Entre las muchas cosas buenas que tiene 'Doctor Who' está el simple hecho de que nunca te va a dejar indiferente. La ficción casi siempre apuesta por la emotividad en menor o mayor grado, pero en los capítulos en que ésta es notable, muchos espectadores no necesariamente sensibles acaban llorando con un episodio dramático de la serie. Los momentos emotivos suelen estar bien elaborados y extraña vez tiran por el drama fácil, probablemente hablemos de una de las mejores series en este aspecto.

4. Steven Moffat:

Amado y querido a partes iguales -la mayoría de casos por la misma persona-, nadie debería negar que Steven Moffat es lo mejor que le ha podido pasar a 'Doctor Who' en sus más de 50 años de historia. Este hombre es capaz de crear historias cargadas de tensión, con rompecabezas difíciles de resolver a la primera y de demostrar su amor incondicional hacia la serie dejando al espectador cargado de emoción tras un capítulo de los suyos. Cada vez que aparece el nombre de Steven Moffat en los créditos del capítulo el espectador sabe que lo mejor está por llegar.

3. Las compañeras:

Quizás el término compañera suene a personaje secundario pero para nada es así, las compañeras son tan importantes -e incluso a veces más- como el propio Doctor. Billie Piper, Freema Agyeman, Catherine Tate, Karen Gillan y Jenna Coleman han interpretado respectivamente a Rose Tyler, Martha Jones, Donna Noble, Amy Pond y Clara Oswald, cinco personajes cada uno lleno de gran potencia que han mostrado ser una gran ayuda para el propio Doctor y se han involucrado sentimentalmente -no quiere decir románticamente- con él. Tan sólo Rose y Clara han acompañado a dos Doctores diferentes dando con ello una aún más variedad entre las diferentes relaciones. Las compañeras representan al espectador delante de la situación son quienes preguntan y quienes sufren las consecuencias de los viajes por el tiempo.

2. El Doctor:

La historia del Doctor es la de un triste hombre solitario que ha padecido las consecuencias de una guerra, no le queda nadie, hasta que conoce a alguna compañera con quien disfruta todo el tiempo y con ella introduce sus grandes momentos de humor, el Doctor es alguien divertido, pero cada regeneración es única. A lo largo de 51 años, 12 actores han interpretado a este carismático personaje, todo esto se debe a que el protagonista es un ser casi inmortal que puede cambiar su físico y regenerarse para sobrevivir cada vez que está apunto de morir. En la serie moderna, han habido 4 actores que han interpretado al Doctor: Christopher Eccleston, David Tennant, Matt Smith y Peter Capaldi. Cada regeneración es una personalidad distinta que aporta diferentes matices al personaje y con esto se reinventa y más de medio siglo después sigue siendo uno de los mejores de la televisión actual.

1. Una serie única al más puro estilo británico:

'Doctor Who' plasma diferentes elementos de la cultura británica, para empezar, la TARDIS, la máquina del tiempo que se utiliza en la serie es una cabina azul de policía tan frecuente en Londres en la década de los 60. La vestimenta de los protagonistas también tienen un estilo muy británico.

Pero lo importante es que 'Doctor Who' es una serie única, pocas series tienen tanta libertad como esta. La ficción logra apostar por diferentes géneros y cada capítulo es una historia distinta de amor, terror, aventuras, comedia, drama, terror, siempre bajo la marca de la ciencia ficción clásica. El producto ha logrado adaptarse al modelo televisivo actual y de ahí a que mantenga semanalmente 7 millones durante estos últimos 10 años. Esperemos que sigan siendo muchos más.