Ir a FORMULATV

No me interesa 'Gran Hermano 17'

Miércoles 21 de Septiembre de 2016 13:47
 

No me interesa 'Gran Hermano 17'

Interés, pasión, ganas y voluntad de saber más (Representación gráfica)

Nunca creí que diría esto, de verdad. Nunca pensé que estas palabras podrían salir de mi boca, pero hoy, 21 de septiembre de 2016, me he dado cuenta de que, como dirían Las Bistecs, tengo un problema: no me interesa lo más mínimo Gran Hermano 17. Mira que lo he intentado, que me he visto horas de directo, galas, límites y debates, que me he leído con fruición páginas, artículos, noticias y comentarios varios pero mira, chico, no.

Ante este panorama y consciente de lo mucho que valoro mi tiempo libre como para perderlo intentando que me guste algo que me provoca el mismo interés que un disco de Pablo Alborán, he tomado una decisión: por primera vez en 16 años no seguiré de manera voluntaria Gran Hermano. Digo de manera voluntaria porque ya me perdí GH6 por estar de Erasmus en Italia, con lo que esta será la primera edición de Gran Hermano que obviaré de la parrilla.

Por un lado, se me ha agotado la paciencia. En la era de los contenidos efímeros, de los vídeos breves y del consumo televisivo multipantalla no puedes pretender que me tire cuatro horas un jueves por noche para ver qué ha pasado, no ya en la última semana, sino en las últimas 48 horas. Doce horas de prime-time semanal son altamente innecesarias, un tostón irremediable que no hay humano que soporte. O igual sí que los hay y soy yo que me estoy haciendo mayor, oye, todo puede ser.

Tampoco ayuda el cambio de presentador. Lo sé, me repito más que un gazpacho de marca blanca, pero es que no es lo mismo. No podemos pasar de Mercedes Milá a Jorge Javier Vázquez, a esa falta de pasión y de emoción por el formato. Seguramente con la Milá esta edición tampoco hubiese destacado en audiencias, pero al menos ella te levanta una gala tediosa. Jorge Javier es un gran presentador, pero de lo suyo. Para Gran Hermano es un 'no' como una catedral.

Debo admitir que el hecho de que este Gran Hermano me haya cogido con el pie cambiado es también un gran factor por el que me dé una pereza máxima verlo. La primera gala y el primer debate me pillaron en Lisboa, el primer Límite 48 horas me pilló en una cena y no vi nada de nada hasta la gala del jueves de la semana pasada. Y coger Gran Hermano así es arriesgado, porque tiene que ser muy enorme como para que te genere interés.

Partiendo de la base de que no me iba a quedar hasta las quinientas de la madrugada para ver toda la gala, lo que vi me pareció más de lo mismo. Aunque me llamaron la atención los caracteres de Pablo, Candelas y Bárbara y la ponzoña que habita en Miguel, todo lo demás me pareció bastante 'meh'. No podía evitar pensar en lo que tanto temía antes de que empezara la edición: que GH17 se convirtiese en un cásting de futuros tronistas de Mujeres y hombres y viceversa.

Anoche, en un acto de fe extremo por mi parte, me puse el Límite 48 horas. Teniendo en cuenta que mi engagement con los concursantes es nulo, muy novedosas e interesantes tienen que ser las tramas para que me enganchen. ¿Y con qué me encuentro? Con el inicio de una carpeta, concretamente la de Pol y Adara. Los mismos tocamientos bajo el edredón, el mismo ruido de rechupeteo mientras ambos se comen la boca, los mismos comentarios cuando las manos de uno van al pan de la otra... Que sí, que es muy bonito que les pique la entrepierna y que entre ellos se la rasquen, pero si sólo conoces su nombre mucho interés no te genera. Total, que anoche desistí y fui a lo seguro: me puse un capítulo de RuPaul's Drag Race.

Y, por favor, ¿qué es eso del Contra Club? ¿De verdad le ven tan poca capacidad al casting de este año que tienen que recurrir a María José Galera o Maite Galdeano para levantar la audiencia? Soy consciente de que el espíritu original de Gran Hermano hace años que se perdió y, ojo, no es algo que me parezca mal: gracias a eso el concurso ha perdurado hasta hoy. Pero lo que tenemos ahora ya no es Gran Hermano, es otra cosa. Y de momento, para mí es mucho peor.

Me da pena, de verdad os lo digo, que este Gran Hermano no me interese. Es como cuando de repente te das cuenta de que los Reyes son los padres, como cuando ves por primera vez en la tele una escena de sexo junto a tus padres y se te ponen las orejas rojas, como cuando te parece ridículo seguir jugando con Lego: sientes que una etapa ya se ha cerrado y que nunca volverá, y aunque la recuerdes con cariño sabes que hay que seguir adelante, que otros realities vendrán.

¡Recuerda que también puedes seguir a Teuvemix en Facebook y en Twitter!

Información relacionada

Programas

Gran Hermano

 

Comentarios

Necesitas ser usuario registrado de FormulaTV.com para comentar en este blog. Conéctate o haz clic aquí para registrarte