Las segundas oportunidades de Sundance Channel

No hay mejor forma para crecer en Estados Unidos que lanzarse a la producción propia, por muy indie que se quiera ser. Sundance Channel, la hermana pequeña de AMC, parece que ha entendido las reglas del juego y ha decidido volcarse en la creación de contenidos originales, estrenando esta primavera las miniseries 'Top of the Lake' y 'Rectify', dos apuestas no dirigidas a todo tipo de públicos -nada recomendable para aquellos espectadores impacientes que son incapaces de estarse cinco minutos sin mirar el reloj-, pero que plantean muy buenas premisas y que, una vez entrados en materia, consiguen mantener el interés generado.

A partir de aquí puedes encontrarte con algún spoiler de 'Top of the Lake' y 'Rectify'.

Aunque en un inicio 'Top of the Lake' podría recordarnos a cualquier serie centrada en un detective que trata de resolver una desaparición, esta miniserie rodada íntegramente en Nueva Zelanda va mucho más allá de ello, el caso de Tui es en realidad una historia de fondo que le sirve a la detective Robin Griffin (interpretada por Elisabeth Moss) como segunda oportunidad para tratar de comprender quién es y de dónde viene, regresando a un país del que aún guarda graves secuelas. Quizá porque Robin ya sabe cómo se las gastan -recordemos que en su juventud fue violada-, no duda en ningún momento en mostrarse arisca con los hombres de Laketop.

Como dicen, a veces la verdad duele: al descubrir la auténtica identidad de su padre, Robin siente que un puñal roza su corazón, aunque hay cosas que nosotros no decidimos ni podemos cambiar, la detective no quiere ser hija de un hombre tan deplorable como Matt Mitcham (Peter Mullan). También dicen que la verdad absoluta no existe, y con eso juega muy bien en su final 'Top of the Lake' al destaparse que el detective Al Parker (David Wenham) se encontraba detrás de todo el caso de Tui. Descubrir esto hace que pongamos en cuarentena cualquier cosa que haya salido de su boca desde el principio de la serie, incluidos los resultados de las pruebas de paternidad que se dedica a leerle a Robin en los últimos minutos de la ficción. ¿Son Robin y Johnno (Thomas M. Wright) hermanos de padre? Eso es algo que jamás sabremos y que permite a los espectadores echar a volar su imaginación.

Segundas oportunidades también buscan las chicas de Paraiso, ese grupo de mujeres con muchos años de sufrimiento a sus espaldas que prefieren vivir alejadas de los hombres y han decidido comenzar una nueva filosofía de vida en un lugar remoto guiadas por la enigmática GJ (a quien da vida una irreconocible Holly Hunter). Aunque como finalmente se acaba viendo, comenzar de cero es sinónimo de hacer algo bien, la líder espiritual se siente descontenta con el resto de mujeres y decide hacer la maleta y partir a otro sitio, sin saber ella dónde, sin saber nosotros dónde.

Pero al margen del argumento, 'Top of the Lake' es en sí una segunda oportunidad. La serie, que en un principio iba a suponer un triple reencuentro de "El piano" entre Jane Campion (quien se ha encargado de dirigir y escribir varios guiones), Holly Hunter y Anna Paquin, pero que debido al embarazo de ésta última fue imposible, estuvo en peligro durante la preproducción. El fichaje de la americana Elisabeth Moss como sustituta de la actriz australiana Anna Paquin provocó la salida del proyecto de la cadena australiana ABC. Afortunadamente UKTV, propiedad de BBC, se interesó por ella y terminó convertida en coproductora, dándole así una segunda oportunidad para que la miniserie pudiera ver la luz.

Por contra, en 'Rectify' se busca que sea el espectador quien le dé una segunda oportunidad a su protagonista, Daniel Holden (Aden Young), independientemente de lo que haya hecho. Al igual que sucede con el pasado de Robin en 'Top of the Lake', la historia anterior de Daniel también que es oscura y a medida que avanza se va iluminando, , poco sabemos del Daniel de antes de entrar en el corredor de la muerte, más allá de que hace casi veinte años fue juzgado y declarado culpable de violación y asesinato. Pero la serie no se centra en si el protagonista cometió o no esos crímenes, por más que su hermanastro Ted (Clayne Crawford) no pueda pensar en otra cosa, sino en un yo renovado que trata de comenzar de nuevo una vida en el mismo lugar que dejó la anterior pero que, debido al paso del tiempo, no termina de encontrar su sitio.

Y es que mientras Daniel ha pasado tanto tiempo oprimido entre cuatro paredes blancas, todo ha seguido avanzando, en un mundo en el que la tecnología avanza a una velocidad de vértigo y las relaciones personales ya no son tan amovibles como lo eran antes, sino que se hacen y deshacen sin problemas, , el protagonista no quiere desaprovechar el tiempo perdido y no duda en pasar sus primeras horas de libertad para ponerse al día, lo hemos visto junto a su hermano de madre -al que hasta entonces no conocía- viendo una película en DVD, saboreando una barrita energética o siendo víctima, sin ser consciente de ello, de la nueva moda en la que todos nos creemos paparazzi por tener un móvil con cámara de fotos incorporada.

Lo gracioso del caso es que si fuera de allí el tiempo no hubiera seguido avanzando, el protagonista de esta miniserie seguiría entre rejas. Los avances científicos de ese mundo en el que ahora se encuentra desorientado son los que han permitido realizar una nueva prueba de ADN que implica su salida de prisión. Si el mundo no hubiera cambiado, Daniel Holden no abría tenido una segunda oportunidad y nosotros no estaríamos impacientes queriendo saber cómo sigue su historia.