Anoche se estrenó en Telecinco 'Se enciende la noche', el nuevo programa de Jordi González que tras sus breves vacaciones regresa de forma oficial a Mediaset España con un nuevo proyecto. De esta manera el presentador catalán se pone al frente de un late night de periodicidad fija los martes y miércoles.
La idea de apostar nuevamente por la franja de noche, como también ha hecho recientemente laSexta con Buenafuente y su equipo, es algo positivo, ya que concretamente en la cadena de Paolo Vasile desde 'Crónicas marcianas', 'TNT', 'El ventilador' o los debates de realities no ofertaba grandes productos a los espectadores más trasnochadores.
La cuestión viene ahora con el show de Cuarzo Producciones y la intención de querer abarcar tanto y no centrarse en un género concreto. Es difícil saber qué estás viendo, cual es la temática o lo que podrás ver esa noche de la mano de Jordi, ya que se tratan temas muy dispares con enfoques opuestos.
De Carlos Baute a una mesa de sexo pasando por 'Hermano mayor' y niños robados
El acess prime time poco favor le hace al programa ya que muestra su faceta más aburrida y similar a 'El hormiguero', intentando abordar una entrevista a un personaje público de forma divertida y ágil, algo que se queda en intento. Cerrando esta primera fase del programa y tras despedir a Carlos Baute, repasaron las últimas novedades del caso Asunta, algo que tampoco venía muy a cuento después de ver al cantante haciendo el pino.
Pasadas las 00:00 horas, nos encontramos con diversidad de secciones que tienen claramente influencias de otros programas. Elena Ortega ('¿Qué hago yo aquí?') hacía de hermana mayor al tratar el tema de un hijo malcriado y el sufrimiento de su madre, momento de la noche que no se llegaba a entender muy bien, ya que para eso existe el programa de Pedro García Aguado.
Un nuevo caso de niños robados con un enfoque diferente aterrizaba un martes más en la cadena del cinco, el buen funcionamiento de los especiales anteriores se vio reflejado en esta pequeña sección que tampoco tenía un gran interés.
Y llegamos al plato fuerte de la noche, el momento del programa donde se juntan las lenguas viperinas de Carmen Alcayde, Boris Izaguirre, Belén Rodríguez y Luis Rollán, colaboradores habituales del canal que llegaban con ganas de comentar, comentar cualquier cosa, no importaba el qué, se trataba de hablar y opinar.
Desde este momento y hasta el final, pudimos ver una sección de zapping, una semientrevista a Leo, extronista de 'Mujeres y hombres y viceversa', una performance en el exterior del programa y una sección de sexo con una escritora de novela erótica, es decir, nuevamente y según pasaban los minutos, veíamos diversos programas en uno.
Poco a poco y a lo largo del programa iban llegando los colaboradores. El primero fue Nene Futbolista, que estuvo presente durante la entrevista a Carlos Baute. El excolaborador de 'Así nos va' aportó naturalidad y frescura a la primera parte del espacio televisivo para continuar en su desenlace. Marta Márquez hacía lo propio cebando la intervención de Megan Maxwell a modo de reportera terminando también en la última parte del programa.
Uri Sàbat y La Terremoto de Alcorcón llegaban casi juntos a la mesa multi temas que comentábamos antes para ir lanzando diversos contenidos, siendo el nexo de unión entre los comentaristas y el presentador. La Terremoto está sembrada y brilla con luz propia, mientras que Uri Sábat debería tener una sección propia más diferenciada con la que poder aportar su buen rollito y sello particular, sin duda tiene mucho más que aportar al show.
Jordi González sabe perfectamente como llevar las riendas de un programa de televisión en directo, y en esta ocasión ofrece su cara más intermedia, es decir, no aporta su punto más serio como llegaba a hacer en 'El gran debate', pero tampoco muestra su lado más gamberro como en 'TNT' o más desenfadado como 'El debate de Gran Hermano'.
Con el paso del tiempo y si el programa se va perfilando, Jordi encontrará el punto exacto que necesita 'Se enciende la noche', ya que esta franja horaria le viene al presentador como anillo al dedo, no hay más que mirar su larga trayectoria al frente de espacios programados a esta hora como 'Más allá de la vida', 'Rec' o 'Abierto al anochecer', los cuales mostraban sus diversas facetas que encajaban perfectamente en los formatos.
En definitiva, lo nuevo de Telecinco necesita saber qué es lo que realmente quiere hacer, qué pretende ofrecer al público y no intentar hacer de todo y para todos. Los colaboradores (Nene, Marta, Uri y La Terremoto) son ese punto que necesita el programa para destacar, son rostros nuevos y frescos que pueden hacer divertidas e interesantes estas dos noches a la semana, por lo que deberían tener un mayor protagonismo.
'Se enciende la noche' debe buscar su propio estilo y entretener a la codiciada audiencia de forma original, sencilla y ágil, con un punto gamberro y picante que haga que el espectador quiera seguir viendo el espacio televisivo. Al ser Telecinco, el público busca justamente en esta cadena algo cañero y con gancho.
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