Todos los años, Gran Hermano, ha logrado sorprendernos con algunos de sus fichajes, y como no, otros muchos concursantes nos han defraudado, esos que prometían mucho en sus videos de presentación y que luego nos dejaron fríos. Espero y deseo que en la próxima temporada, volvamos a contar con perfiles que logren hacernos reír, que consigan emocionarnos, cabrearnos, pero sobre todo, que no pasen desapercibidos. Es hora pues, de recordar en esta primera lista, algunos de los grandes aciertos, siempre bajo mi punto de vista, de los casting de pasadas ediciones de Gran Hermano.
La victoria de Belén Esteban demuestra la fidelidad de los seguidores de la misma y la fuerza que sigue teniendo la princesa del pueblo. Si Belén ha ganado, ha sido porque gusta como es. No hay que buscarle ninguna explicación más. Ella gusta con el lote completo, y en ese pack van incluidos esos defectos que tantas ampollas han levantado entre la audiencia. Sería un error intentar reeducar a Belén Esteban, pues gran parte de su encanto radica en sus imperfecciones. Son estas ultimas las que se lo han puesto en ocasiones complicado, pero las que también le han empujado a ganar por mayoría absoluta.
Tras la eliminación, los tres finalistas tuvieron la oportunidad de ver a sus amigos y familiares. Muy diferentes fueron las reacciones de los tres, y es que incomparables fueron los momentos en los que Aguasantas y Belén se reencontraban con los suyos al los de Coman, el cual no mostró una emoción palpable. Él tenía suficiente con seguir esforzándose en reiterar ese discurso que dirige a los hijos de España y de Esuakdi.
El que dice defender a los desfavorecidos no ha hecho más que favorecerse a si mismo a costa de la ingenuidad del resto de habitantes: debe haber sido que el haber nacido en una aldea guineana y haber pasado tantas penurias como el ha narrado en el confesionario, le han agudizado el sentido de la supervivencia, y es que les ha dado con pan y queso al resto de sus compañeros. Falso Coman, eres muy falso. Si llegas a la final no será gracias a que has apoyado al más débil, si no que tus rivales han sido muy, pero que muy tontos ingenuos.
Anoche solo faltaba Sandra Barneda para mediar entre acusados y acusadores. Lo que vimos quedará en nuestra retina para los restos. Que Gran Hermano sabe reinventarse ya lo sabíamos, pero lo de ayer fue demasiado para nuestros cuerpos, y es que después de lo visto, deberían plantearse en Zeppelin crear un formato siguiendo la linea de ayer; juicios varios entre ex concursantes con cuentas pendientes donde la audiencia pueda condenar o absolver a sus protagonistas. Sería muy top, pero hablemos de lo que pasó minutos antes.
Esperaba la expulsión de Chari. Su acercamiento a Coman es probablemente el motivo que ha empujado a los votantes a lanzarse al teléfono y decantarse por esta concursante. Estoy convencido de que en el caso de que hubiera Coman y no Chari la nominada, la decisión hubiera sido diferente, pero el destino ha querido que solo se expusiera una cara de la moneda.
Chari está siendo traicionada por todos, esto es un hecho. Ayer de madrugada, la concursante se desahogaba con la mujer con la que empezó esta aventura. Chari se quejaba de que Aguasantas y Coman no estaban siendo muy claros con ella. La verdad es que esto es así, aunque Chari no sabe lo peor.