Tenía que ser El Chavo del 8

"Sin querer queriendo", así fue prácticamente como empecé a aficionarme y a reírme hace ya unos años, cuando descubrí a un gran personaje infantil con el que sigo desternillándome de la risa cada vez que veo uno de sus videos. El "Chavo del 8". Sin duda uno de los mejores programas infantiles que he visto en mi vida, y creo que un buen ejemplo que deberían seguir algunas cadenas a la hora de elegir sus contenidos para el horario infantil. Su simplicidad y originalidad marcaron un antes y un después en la televisión mexicana. La serie comenzó allá por el año 1971 como un sketch en otra serie llamada "Chespirito" y tuvo tanto éxito que se convirtió en programa independiente en el año 1973, finalizando siete años después, tras arrasar literalmente en todos los países de Sudamérica, e incluso en Europa y Asia. En España la podíamos ver en aquella señal pirateada de Galavisión allá por los años ochenta, pero no se emitió a nivel nacional hasta que no arrasó en Canal Sur a mediados de los noventa. Actualmente se emite en La 2 como serie de dibujos animados, siendo bastante fiel al original.

La verdad es que este programa fue todo un descubrimiento. La serie se desarrolla principalmente en el patio de una vecindad de la Ciudad de México y cuenta la divertida convivencia del "Chavo" con sus curiosos vecinos. Está llena de situaciones surrealistas y bastante comicas que me han llevado a no poder parar de reír en un buen rato.

¿Pero quién es "El Chavo"? Es un niño huérfano que tiene ocho años y que esta genialmente interpretado por un actor y cómico mexicano llamado Roberto Gómez Bolaños. No sabemos cuál es su verdadero nombre porque cada vez que le preguntan por ello alguien le interrumpe; simplemente es "Chavo". Es un niño torpe y demasiado inocente, lo que hace que los otros niños se aprovechen de él bastante a menudo. Es entusiasta y creativo y en algunas ocasiones tiene salidas muy ingeniosas y cómicas. Siempre lleva puesta una gorra verde a cuadros con visera y orejeras, una camiseta vieja bastante remendada de rayas oscuras con fondo de color blanco, un pantalón café que se agarra con tirantes rojos que pasa por encima del mismo hombro, y unos zapatos negros con cordones amarillos. Tampoco sabemos con quién vive, porque cuando lo va a decir le vuelven a interrumpir, sólo le vemos que se la pasa metido dentro de un barril en medio del patio de la vecindad en la que vive. Cuando tiene mucho miedo le da "la garrotera", quedándose inmóvil de pie un poco encorvado, con un brazo flexionado y el otro extendido, las piernas flexionadas y la mirada ida, casi en un estado de inconsciencia, pero se recupera cuado le echan un poco de agua en la cara. Lo mejor son sus frases o muletillas como "¡Bueno, pero no se enoje", "Es que no me tienen paciencia…", o "Fue sin querer queriendo".

Entre los vecinos que conviven con el "Chavo" está Quico, un niño que tiene 9 años y que vive con su madre, Doña Florinda, en el número 14. Es un niño engreído, malcriado, manipulador, que ha sido educado por su madre con la idea de que es el mejor niño y que los demás vecinos no están a su altura. Va vestido siempre con un traje de marinerito de color negro con pantalones por la rodilla, corbata roja, calcetines amarillos y calzado blanco. Además lleva un gorrito azul, amarillo y rojo. Quico suele caer bien a los demás, aunque tras su imagen dulce vemos a un niño vengativo, envidioso y codicioso, y un completo cabeza hueca, pero con una torpeza que lo hace ser bastante cómico. Sus muletillas, "¡Ay ya cállate, cállate, cállate que me desesperas!", o "No me simpatizas". Su madre, Doña Florinda es soberbia, engreída, altanera y habla de forma despectiva hacia los demás.

Don Ramón y su hija, "La Chilindrina", viven en el número 72. El primero es un hombre que a pesar de su honradez, demuestra un desinterés absoluto por el trabajo, por lo que no se sabe de qué vive, aunque se menciona que la "crisis" lo dejó sin empleo, nadie conoce cómo saca dinero para sus cosas. Es el que siempre se lleva las bofetadas de Doña Florinda, porque ésta siempre piensa que es el que perjudica a Quico. Su hija, "La Chilindrina", es sin duda mi favorita. Es una niña carismática y alegre, mandona, y podríamos decir que es la más inteligente de los niños. Siempre lleva un vestido con una chaqueta cruzada por la espalda. Usa gafas y siempre va peinada con dos coletas totalmente fuera de su sitio.

Entre el resto de personajes hay que mencionar al Señor Barriga, el dueño de la vecindad que siempre le está reclamando el alquiler al pobre de Don Ramón, y que siempre es recibido por un golpe del "Chavo". Tiene un hijo, "Ñoño", tan gordo cómo él. En el número 71 vive Doña Clotilde, a la que los niños han apodado como "La Bruja del 71" y que además está enamorada de Don Ramón, por lo que de vez en cuando le está regalando una tarta casera, que siempre es codiciada por el "Chavo". No puedo olvidarme del enamorado de Doña Florinda, el Profesor Jirafales, y que enseña a los niños en la escuela armado de mucha paciencia.

Me sorprende que esta maravilla haya sido en ocasiones muy criticada como un mal ejemplo para los niños, y todo por las bofetadas, cachetes y golpes que sufren los personajes de manera continua. Es cierto que el programa está lleno de las bofetadas de Doña Florinda a un muchas veces inocente Don Ramón; de coscorrones de Don Ramón, muchas veces por desquite, a un inocente "Chavo". Niños egoístas, presumidos que no comparten con otros o que son respondones con sus mayores. Y adultos sin trabajo, mañosos que buscan como salir adelante trabajando poco. Me perece exagerado ser tan crítico. En esta historia no hay buenos ni malos, héroes o antihéroes. Hay personas normales, muy bien caracterizadas exagerando sus rasgos, pero que actúan como lo harían en la vida real. A veces cometen errores y los vemos como seres mezquinos, pero también nos ofrecen una cara amable de solidaridad y de compasión ¿No somos todos así de injustos primero y al momento portarnos de manera altruista? Dejémoslo en que sólo se trata de una caricatura de la vida real. Bastante exagerada, pero caricatura al fin y al cabo.

Si queréis pasar un buen rato, os recomiendo que rebusquéis sus historias, merece la pena pasar un buen rato disfrutando de las ocurrencias de estos grandes personajes. Para abrir boca os dejo un video en el que se puede resumir muy bien como es el carácter de cada uno de los personajes. No os arrepentiréis.