Ir a FORMULATV

¿Eres un "serie adict@"?

Martes 28 de Septiembre de 2010 16:22
 

¿Eres serie adict@?

El teniente Garrido me ha decepcionado. No me esperaba que alguien con cara de buena gente, y que me resultaba muy sexy, para qué nos vamos a engañar, resultase ser un traidor, o mejor dicho, un miembro del bando enemigo. Se ha pasado haciéndole ojitos a Elsa casi desde que entró en el internado Laguna Negra; y yo pensaba "mira, hasta hacen buena pareja y todo". ¡Si le consiguió pañales a Samuel cuando la directora, un poco agobiada, le puso en su sitio! Era bueno, o al menos lo parecía. Ayer Elsa y el teniente se enrollaron, pero ya no tenía gracia. El hombre la está liando parda.

Después de ver el capítulo de ayer de "El internado" me pregunto qué demonios tiene esta serie concretamente para haberme enganchado de esta manera tan tonta. Porque precisamente no es una gran serie. Muchas veces me pregunto también qué tienen algunas series para que nos piquemos con ellas de la manera en que lo hacemos. Con "El internado" he tenido muchos altibajos. Menos mal que en tres semanitas sabremos si Marcos y Paula se reúnen por fin con su madre. Y se le dará, por fin, carpetazo a esta historia, que empezó más o menos bien, resultona, con un planteamiento que podría llegar a dar mucho juego si se llevaba por el camino adecuado, pero se ha liado de una manera increíble y a veces da la sensación de tener muchas incongruencias. Por eso no me entiendo a mí misma.

A lo largo de mi vida he tenido delante muchas historias que han conseguido captar mi atención y atraparme muchas veces de la manera más tonta del mundo. Lo más adictivo ha sido lo de "Perdidos" y lo de "Alias", mis dos grandes series de referencia hasta el momento. Bueno y "Friends" también. Desde que en el minuto uno de "Perdidos" viera el ojo de Jack abrirse de aquella manera ya me tenía totalmente absorta. Y por supuesto, desde que Sidney Bristow estaba con aquella peluca roja, siendo torturada por aquel señor oriental que intentaba sacar sus muelas a lo bestia, me enamoré perdidamente de la historia de mi espía favorita. Aunque TVE y Telecinco hicieron que fuera muy difícil hacerles un seguimiento constante, al final no me quedó más remedio que hacer lo que todos, recurrir a las descargas. Yo soy de las que el último día se pegó el madrugón para poder ver el desenlace de lo que pasaba en La Isla y luego entrar a los foros a comentarlo. Y son las dos únicas series que me he comprado completas. Y "Friends" la única que me he descargado completa, y que guardo como oro en paño en mi disco duro multimedia.

Pero no sólo me ha pasado con "Perdidos", "Alias" o "Friends", afortunadamente. Me vienen a la mente unas cuantas con las que en su momento no pude resistirme a sus encantos, lo que me hace preguntarme muchas veces qué carajo vemos en todos esos personajes para engancharnos tanto a ellos, hasta el punto de bajarnos capítulos sin conocimiento (pobre ministra Sinde) y tirarnos las horas delante del ordenador devorando cada minuto de acción, amor, humor. Del otro lado del charco nos ha pasado con un montón de historias. Además del famoso ojo de Jack, y la peluca de Sidney, nos han dejado clavados en el asiento los acordes de las canciones del club "Glee", las neuras de Meredith Grey, los líos de los clientes del Central Perk, y las vidas de las mujeres más desesperadas de Wisteria Line, por no hablar de la complicada huida de la cárcel de Michael Scofield o las peripecias de Homer Simpson. Incluso años atrás recuerdo las perrerías de Ángela Chaning, por no mencionar a los esculturales "Vigilantes de la playa", al maravilloso KITT, "El coche fantástico" que todos queríamos tener, o incluso a aquellos jóvenes y ricos de Berverly Hills que nos tenían en vilo una vez a la semana.

En España han existido también muchas historias buenas, dentro de la mediocridad a la que últimamente parece que nos tienen acostumbrados. ¿Qué habría sido de nosotros sin haber llorado la muerte de Chanquete? ¿Y la de Marcial en "Médico de familia"? Las bromas de Guille y del grandioso Adolfo en "Farmacia de guardia" dieron paso al hipocondríaco Gonzalo en "Siete vidas" primero y a la loca comunidad de vecinos de desengaño 21 y de Esperanza Sur, después. No hay que dejarse por el camino las desventuras de la familia Alcántara que nos evoca un pasado no tan reciente, o las aventuras del "aguilucho". Pero la gran serie española de los últimos años, la que mí personalmente me tuvo en vilo, fue "Motivos personales". Sin duda la frase con la que se cerraba el primer episodio me dejó marcada "¿Asesinato o suicidio?"; (perdón si no era así concretamente, no lo recuerdo muy bien). Eso sí que fue una gran serie de misterio.

Hay otras españolas que empezaron muy bien, arrasando, pero con el tiempo acabaron desgastándose, como sucede con "Hospital central", que parece no tener fin, o con el inexplicable final de "Los Serrano". Por no hablar de todas esas historias enfocadas a un público más bien tirando a juvenil que nunca entendí como podían gustar tanto. "Al salir de clase" (buena cantera de actores, por cierto) o "Compañeros" nunca consiguieron entrarme por los ojos.

¿Qué tienen todas estas historias para atraparnos? Si lo supiéramos, todos los creadores se copiarían entre ellos para construir la historia perfecta. La que nunca falle y la que arrase en los audímetros. Dosis de misterio, de humor, de romanticismo, de aventura, de acción. Si las mezclas adecuadamente, te puede salir una gran serie. Unas veces aciertan de pleno; pero sabemos que eso es muy difícil, por eso cada día intentan sorprendernos con algo nuevo. Tenemos pendiente de estreno varias novedades, como los piratas de Telecinco, el barco de Antena 3 junto con su historia de romanos, o incluso aquella "Punta escarlata" que lleva más de nueve meses en la nevera de Cuatro. Y otras veces se la pegan estrepitosamente. Porque nunca la calidad va de mano de la respuesta del público. Grandes historias han pasado sin pena ni gloria por delante de nuestros ojos sin convencernos de todo; e historias insulsas y sin nada de gracia se han quedado más tiempo del imaginable. Esa es la magia.

Nos gustan por la personalidad de sus protagonistas, a veces encantadores y otras veces odiosos. Nos gustan por la complejidad o simplicidad de sus historias. Nos gustan porque nos hacen evadirnos durante un rato de nuestra, a veces, dura y complicada vida. O simplemente nos encantan porque necesitamos desconectar de nuestras rutinas.

Mis enganches actuales son "Glee", "Anatomía de Grey", "Sin cita previa" y "Cuando me enamoro", una telenovela mexicana, remake de la inolvidable "La mentira". De momento creo que ya estoy completa. Pero es eso, sólo de momento. Aparecerá un apuesto galán que me entrará por los ojos, o una villana que me tenga en un sin vivir, o una sexy aventurera con aires de sufridora, o incluso un bandido bromista que me haga reír exageradamente con sus tonterías. En ese momento volveré a estar perdida del todo, y volveré a caer en la garras de una nueva historia.

Lo admito. Soy serie adicta. ¿Y tu?

EDITO: Me faltan muchas series que se me han ocurrido después de colgar esta entrada. Como comprenderéis es imposible mencionar todas!!!!

Comentarios

Necesitas ser usuario registrado de FormulaTV.com para comentar en este blog. Conéctate o haz clic aquí para registrarte

Sobre este blog...

Empiezo hoy este blog en el que reflexionaré de lo que pasa cada día en la televisión. No es que tenga mucho tiempo para sentarme tranquilamente en el sofá, pero procurare asomarme de vez en cuando a esta ventana.
Creado por
Archivo