Águila Roja: El héroe del siglo XVII

Águila Roja a cautivado a la mayoría de los espectadores, siendo la serie revelación en 2009 (4.637.000 espectadores y un 25,5% de cuota de pantalla) unas audiencias que en la tv actual es imposible de ver y es que en su segunda temporada Águila Roja ha mejorado sus audiencias teniendo una audiencia media de 5.606.000 espectadores con un 28,3% de cuota.

¿Pero ha que se debe el éxito de Águila Roja?¿Qué tiene Águila Roja, que le hace ser una serie diferente a las demás?.

Pues Águila Roja ha sido una apuesta de TVE con la colaboración de Globomedia, en la que es la primera serie de aventuras en la que cada Jueves la intriga esta asegurada.

Águila Roja el héroe justiciero del siglo XVII donde ayuda a los débiles y en la que en la temporada pasada buscaba al asesino de su mujer que no era otro que su propio Hermano, Hernan(El comisario) y en esta temporada hemos visto que intenta descubrir sus origenes. Gónzalo Montalvo vive una doble vida maestro de día y héroe secreto al caer la noche, siempre con la colaboración de su criado Satur. Su hijo Alonso, siente una profunda admiración por el misterioso personaje que en muchas ocasiones ha estado a punto de descubrir que quien esta detrás de la mascara de Águila Roja es su padre Nadie, excepto su fiel criado Sátur y un misterioso fraile(Agustin), que lo matarian en esta segunda temporada.

Águila Roja es una serie con un gran esfuerzo de producción tanto la ambientación de la acción en el siglo XVII como en la construcción de los decorados de interior, de más de 2.000 metros de extensión, como los exteriores. Un conjunto de dependencias que datan del mismo siglo XVII y que están sirviendo desde el comienzo de la serie para recrear calles y plazas de la época, así como la cárcel y la sala de torturas del Comisario.

esta ubicación se unen localizaciones como el Palacio de Galiana, obra mudéjar levantada sobre un edificio musulmán del siglo XI, en Toledo, el castillo de Batres en Madrid, el monasterio de Uclés en Cuenca, las cuevas horadadas en el subsuelo de la localidad madrileña de Chinchón, el pantano de San Juan o el Antiguo Hospital Tavera en Toledo.

En total, más de un 50% de las escenas se ruedan en exteriores, ya sean emplazamientos naturales o en el interior de algunos edificios históricos como los citados. Un esfuerzo e inversión que está reflejado también en la cuidada reproducción del vestuario, el mobiliario y las armas de combate habituales de la época, junto al empleo de un elevado número de figurantes y animales vivos en cada jornada de grabación.

Por su parte, los equipos de vestuario, peluquería y atrezzo han llevado a cabo una cuidada labor de documentación. Hasta 100 trajes de la época expresamente confeccionados para la serie y otros tantos alquilados para reflejar la riqueza y elegancia de la nobleza de la época frente a la pobreza y sencillez de un pueblo oprimido y hambriento. Armas, muebles, cerámicas, poleas, cestas, carruajes, un buen número de animales vivos. Se ha buscado cuidar al máximo los detalles para que el espectador se sumerja en el ambiente cotidiano de una villa del siglo XVII español.