Segundo fin de semana de los supervivientes: disminuye la tensión y Elisa despunta

Los días pasan en Honduras y la calma se va instaurando en isla privilegio y en cayo menor. Los concursantes han decidido acercar posturas, en un intento de que la convivencia les resulte más llevadera. No ha sido fácil para los novatos, que siguen divididos claramente en dos grupos. Ocurrió en la tarde del domingo, durante un baño protagonizado por Rubén, Lola, Lucía, Labrador y Arantxa. Estos cinco concursantes decidieron firmar tregua de cara al futuro ante las duras consecuencias que les he han traído las ultimas broncas. Mentiría si no reconociese que Rubén me parece mejor superviviente que Arantxa. Esta última, unida a Lucía, disfruta de las disputas y de la situación que se crea tras el enfrentamiento. Podríamos decir que las dos son unas pandilleras de tomo y lomo, acostumbradas a pertenecer a bandas acostumbradas al enfrentamiento con otras. Es como si no supieran gozar de esa armonía que se produce cuando un grupo permanece unido a pesar de las diferencias de sus integrantes. No estoy diciendo que Noel y Lola no sientan cierto gustillo cuando discuten con sus contrarios, ni mucho menos. Pero es cierto que encuentro a las nenas de Labrador mucho más familiarizadas con este tipo de situaciones. No podemos recriminarles nada dentro de este juego, consistente en sobrevivir. Las estrategias o el modo que tengan los concursantes de hacerlo es lícito, y si ellas han decidido formar un trío para intentar así acabar con sus adversarios, pues ni tan mal. El problema es que ambas parecen ya demasiado acostumbradas a este tipo de guerrillas, como si el juego se extrapolara a sus vidas, a su cotidianidad diaria. No seré yo quien se preocupe de este tema, faltaría más. Lo único que sé es que aún es pronto para librarnos de Arantxa, merece una oportunidad. Lo que hace Rubén lo hará Noel en su ausencia, no nos perderemos nada, pero reina de las tarimas, solo hay una.

Mientras que en ambas islas se produce ese acercamiento, Elisa nos sorprende desde isla destierro. No le ha podido pasar otra cosa mejor a la italiana que ser expulsada del grupo de los novatos el pasado jueves. Estar sola en una isla, es lo que le hacía falta a concursante menos conocida de esta edición. Fue lo mismo que le ocurrió a Carmen Russo durante la primera edición producida por Magnolia en Telecinco. A Carmen la convirtieron en ganadora todas esas personas que la expulsaron en su primera nominación. Elisa va por su mismo camino, al haber conseguido ella solita el imprescindible fuego. Si a eso le sumamos que la chica no pesca nada mal, que sabe hablar con la cámara, y que tiene imagen, blanco y en botella. Mientras que en las dos islas se matan entre ellos, Elisa vive en paz y armonía, transmitiéndoles a los espectadores ese rollo zen que tanto funciona: una meditación por aquí, un ratito de pesca por allá, y se hace la italiana el concurso tan ricamente. Tendremos que esperar al jueves para conocer las nuevas condiciones de su permanencia en el concurso, pues imagino que los dos expulsados irán a parar al mismo lugar que habita ella ahora mismo, y no creo que haya sitio para tantas personas, sinceramente.

En isla privilegio, la convivencia está resultando mucho menos insoportable que la semana pasada. La reconciliación entre Suhaila y Nacho relajará sin duda al resto de los componentes del grupo. También les ha venido bien el pergamino recibido por la organización, que incluye un mapa con una localización clave que los concursantes deben encontrar para así localizar alimento. Tienen dos horas al día para ir hasta allí y hacerse con la comida, y siempre deben ir un chico y una chica. De momento hemos visto a Isa Pantoja junto a Fortu y a Suhaila con Rafa Camino. Estos dos últimos terminaron discutiendo por una tontería sin importancia.

Isabel Rábago parece haberse integrado perfectamente en el grupo de los hombres. Habrá que darle otra oportunidad, no podemos sentenciarla porque haya metido la pata durante la primera semana. Al fin y al cabo, Rábago ha hecho lo que hubiera hecho cualquiera que hubiera sido pillado por sus aliados; huir y buscar refugio en otro grupo. De momento, lo ha conseguido, así que veremos como se desenvuelve a partir de ahora.

Carmen Lomana sigue unida a Suhaila. Ambas buscan caracolas con Isa Pantoja y luchan por sobrevivir sin tener que recurrir a los hombres. Lomana sigue optando por no entrar directamente en polémicas, gesto que será criticado, pues como dije ayer, haga lo que haga Carmen, será objeto de crítica.