Mis finalistas: Yola, Steisy y Yurena

No tengo ni la menor idea de lo que pasará esta noche en la nueva gala de Supervivientes. Los tres nominados son Buenos concursantes y cada uno de ellos ha desarrollado un papel clave en esta edición, aunque debo admitir que Suso es el que menos me gusta por varios motivos. El ex concursante de Gran Hermano nos sorprendió hace poco más de una semana al enfrentarse a Mila y a Carla. Ha sido el único participante que ha tenido un par de narices en ese sentido, y hubiera estado genial si no hubiera reculado y mandado todo al garete. Lo mismo ha hecho Steisy, que ha pasado de defenderse y de definir a Mila a comerse los mocos con ella.

Y no es que tengan que estar tirándose de los pelos las veinticuatro horas ni mucho menos, pero no estaría mal que mantuvieran un mínimo de coherencia y no mareasen tanto al espectador. A decir verdad, nadie en su sano juicio puede creerse esas imágenes donde aparecen Steisy y Mila compartiendo relatos de su vida pasada. Escuchar a la andaluza narrar las calamidades y carencias que ha sufrido y ver como Mila asiente a tal historia se convierte en una experiencia surrealista hasta el extremo, y es que hace menos de siete días ambas se lanzaban los platos a la cabeza. Torpe Steisy, muy torpe, ¿tan difícil le resulta deducir que lo que el público alababa de ella era justamente que era la única que plantaba cara a la colaboradora de Sálvame?.

Sin ninguna duda es ella la que más perjudicada sale de esto, aunque hay que admitir que su posición en el concurso sigue resultando fundamental. Steisy es una de las claras finalistas de esta historia, tanto por su implicación en la supervivencia como por el descubrimiento que ha supuesto para el gran público.

Steisy ha protagonizado momentos más que criticables. Escenas que ha sabido solventar con ese tipo de actitud que todo superviviente debería adoptar nada más tirarse del helicóptero. Lo mismo podemos decir de Yola Berrocal, nominada de esta semana. Son muchas las posibilidades que tiene la ganadora de realitys de salir esta noche. Sobre todo porque la semana pasada hizo un juego que no gustó en absoluto a esos que se gastan la pasta en votar. El haberse unido a Mila y a Carla alejándose de los compañeros con los que empezó esta aventura fue una decisión que puede pasarle factura esta noche. No voy a negar que no me agradaría que eso pasara, y es que a las alturas a las que estamos no tengo ningún problema en decir abiertamente quiénes son los tres supervivientes que me gustaría ver en la gran final. En mi opinión, son tres mujeres la que se merecen llegar hasta el último día: Yola, Steisy y Yurena son mis candidatas para cerrar esa edición de Supervivientes. Me alegraría de igual forma la victoria de cada una de ellas, pues considero que son tres justas finalistas. Tres concursos muy diferentes pero también muy sólidos y dignos. Tres caracteres opuestos pero completamente creíbles y válidos.

Estas concursantes han sido protagonistas indiscutibles y ninguna de ellas le ha dicho a Mila que se alegraría mucho si ganara esta última, frase imperdonable que sí pronunció Carla la semana pasada. Y es por esa declaración de intenciones, precisamente, que no deseo que Carla esté entre los últimos concursantes de esta edición. Porque un buen superviviente no le desea a un compañero el triunfo, y mucho menos lo hace públicamente cuando es la audiencia la que se gasta el dinero en salvarte a ti. Tuvo muy poca gracia y no respondió a coherencia alguna, más que nada porque es precisamente Carla de las más competitivas a la hora de hacer las pruebas de líder; aunque voy a empezar a pensar que lo único que desea esta concursante es conseguir el collar para poder salvar a Mila Ximénez de la nominación. Es lamentable ver a un concursante con esa actitud dentro de cualquier concurso pero en especial en un reality como Supervivientes, donde el afán de superación y el querer resistir hasta el final son de sus dos premisas principales. Luego se indigna la madre de esta participante cuando en los debates de este programa algunos colaboradores dicen que su hija es una lameculos. Es su hija la que se gana este adjetivo a pulso con cada una de sus decisiones y cada una de sus palabras. Una lástima, a pesar de todo.