Despertarse a las 00:30, y con colillas de tabaco abarrotando la mesilla. Eso sí es un cantante que cuida su voz. Ayer pudimos ver el documental 'Asi es Kiko Rivera', partes de su vida profesional intercaladas con un debate presentado por el gran Jordi González. Opiniones, para todos los gustos; desde las más duras contra el hijo de Isabel Pantoja hasta las más benevolentes que manifiestan que Kiko ha sido víctima de una trampa orquestada por la producción del documental. Me parece de risa que a estas alturas de la película haya personas que defiendan la teoría de una supuesta trama oscura en contra del DJ. Más adecuado sería que los palmeros que rodean a Kiko le mostrasen algo de lealtad y le llevasen por un buen camino. No voy a ser yo quien dictamine quien puede o no puede dedicarse a la música, ya que cada uno es libre de luchar por su sueño aunque sus capacidades sean limitadas.
Ahí tenemos a Enrique Iglesias, que no tiene un portento de voz, y una gran lista de artistas que se ganan la vida muy honradamente explotando otras aptitudes para crear un conjunto notable. Sí a Kiko no se le aplaudiesen ciertos comportamientos y se le hablase con claridad y honestidad, otro gallo le hubiera cantado y muy probablemente no habría tenido que hacer frente al ridículo más tedioso al que se vio sometido anoche. Y es que no puedes consentir que te graben despertándote a las 12 de la noche cuando tienes un concierto dos horas más tarde, y para más inri, con un vasito de fondo repleto de colillas de tabaco y mostrando la mejor de tus sonrisas. No es el director ni los redactores de este documental los que han colocado ese tabaco ni los que le recomiendan a Kiko la hora a la que debe despertarse, o si debe o no ensayar antes de actuar; es el 'cantante' el único responsable de su comportamiento, y en todo caso, su equipo, representante y asesores, y en consecuencia, es Kiko el único responsable de las imágenes que ayer vimos gracias a su consentimiento y aprobación, sin olvidarnos de que ha cobrado por ello.
Probablemente esperaba que los colaboradores de televisión alabasen tales actitudes, como si por aceptar participar en un documental se le diese un pase mágico para comprar la libertad de expresión de los demás. Una gran inmadurez del DJ, que en vez de pinchar tanto jamón debería pinchar algo de música, ya que supuestamente se lleva las sesiones grabadas a los eventos donde es contratado; y es una pena, porque no veo maldad en él, pero si una gran inmadurez que le está costando mucho sufrimiento, ya que uno es el único dueño de su imagen y es necesario saber acordar y rodearte de buenos profesionales que velen por ti, algo que Kiko no ha sabido hacer. No se puede creer uno que acaba de comenzar en esto de la música un Pitbull, pero Kiko cuenta con una gran desventaja que le hace imprudente: tiene una madre famosa y eso le hace vivir una vida fantasiosa que se puede permitir.
Una vida que le hace tener muchos pájaros en la cabeza, pero no me cabe duda que no hay caché que compense emocionalmente lo que hoy debe estar sintiendo Kiko; y es que más le vale espabilar y aceptar las críticas, puesto que uno no puede vivir enfrentado constantemente. Debes saber que no le puedes gustar a todo el mundo, y el venir de dónde vienes no te puede dar alas para menospreciar y humillar a nadie, aunque no conozcas su cara y tú seas noticia diariamente. Si quieres ser cantante, estupendo, pero prepárate para ello, porque no me vale la excusa de que eres muy buena persona. Mi madre también lo es pero canta peor que un grajo; evitemos pues, la mezcla de conceptos que tan mal nos hace sentir a veces. Y mientras tanto, demuestra un poco de coherencia y acepta que todas esas personas que te van a ver a los bolos, lo hacen no por tu talento musical, si no por lo buen tío que eres y por las simpatías que despiertas; que es algo maravilloso y nada repudiable.
No eres ni el primero ni serás el último en comercializar tu personaje y tu impacto mediático. Haz el favor de dejar de estar enfadado con el mundo, porque este no se acaba hoy, y tomate este documental como un aprendizaje, pues la vida es muy larga y todo se olvida. PD: Para la próxima vez cuida bien tus palabras, porque quizás haya personas que se sientan heridas. Hay mujeres que son muy femeninas y que por desgracia no tienen piernas, entre ellas mi madre por una lesión medular, y te aseguro que probablemente es más mujer que las chonis con las que te juntas y luego te venden por 500 euros en un plató.
Pero no podemos olvidarnos del gran descubrimiento del debate de ayer: Alejandro Abad. Muchos lo conocen por su trayectoria profesional y otros como yo por verle en la primera edición de Operación Triunfo. Es un pecado no recordar que el que ayer revolucionase el plató del programa, es el mismo que en su día compuso la famosa canción 'Mi música es tu voz', interpretada por los alumnos de la academia más famosa de la historia televisiva. Fue todo un placer disfrutar de su nueva faceta como showman; pues resulta increíble que Alejandro estuviese a punto de marcharse del plató como él mismo apuntaba. Poco después de incorporarse se lució con una espontaneidad desbordante y arrolladora. Sí, definitivamente deseo que haya una segunda parte de este documental, si con ello vemos de nuevo a este fenómeno.