Gala 9: Rosa 'dinerito': engáñate tú, pero NO a nosotros

Lo de la señora Rosa Benito es de traca, y es que estoy harto de que la colaboradora de Sálvame y ganadora de la penúltima edición de Supervivientes, intente tomarnos el pelo a todos. Debería ser algo coherente por respeto a esa audiencia que en su día le otorgó la victoria del reality, y dejarse de excusas banales que únicamente conducen a un despiste que le viene estupendamente para seguir haciendo caja. Muchos alaban la supuesta 'generosidad' de Benito por haber decidido volver a la Isla como portavoz de la organización, para cumplir una misión: anunciar a los concursantes, entre los que se encuentra su ex marido, que la final será dentro de dos semanas. Que queréis que os diga, pero ayer Rosa volvió a defraudarme. No soy quien para dictaminar lo que uno debe o no debe de hacer, ni tampoco para decidir cuando alguien está preparado para enfrentarse a ciertas situaciones, pero me sorprende y choca que, después de haber estado ingresada y pasarlo tan mal, Rosa sienta ilusión alguna y pase por el trago de encontrarse con su ex. Aquí hay algo que falla: o no estuvo tan mal como nos vendió a través de la televisión, o su objetivo no era el de dar un mensaje a los concursantes, si no el de encontrarse con Amador para humillarlo públicamente y alargar así una historia televisiva que a la protagonista le resulta bastante rentable; porque no me creo en absoluto la posición que adopta Rosa ante las preguntas de un desolado Amador, que busca en sus respuestas un resquicio de posibilidad de reconciliación.

El problema que tiene Rosa, es que se engaña a si misma y en consecuencia, y a veces conscientemente, nos intenta vender la trola a los demás. Cualquiera que viese ayer la gala de Supervivientes, pudo vislumbrar las miraditas que la Benito le echaba a Amador cada vez que este realizaba alguna prueba. Su cara era la de una mujer enamorada que tiene la seguridad de que tarde o temprano, acabara retomando su relación, vendiendo de nuevo el proceso correspondiente en los diversos programas donde colabora. Rosa y Amador se conocen como anillo al dedo, y ambos se percatan excelentemente de los pensamientos del otro. Yo, Miguel Frigenti, pondría la mano en el fuego sin ninguna duda, afirmando que Amador intuía que tarde o temprano, su ex visitaría la Isla. Lo que el de Chipiona no esperaba, es que ésta, le rechazara en directo para alargar dicho culebrón y en consecuencia, garantizar futuras exclusivas y fomentar la notoriedad de la misma.

Finalmente fue Rebeca la primera expulsada de la noche, algo bastante previsible tras su metedura de pata al revelar información del exterior a sus compañeros. Nacho se salvaba una semana más, prueba de que su ridícula estrategia basada en el victimismo está resultando efectiva, al menos de cara a las personas que ejercen el poder del televoto. La separación de Nacho Montes del resto de sus compañeros ha sido algo que el mismo ha buscado y provocado, usando sus contrariedades con Katia Aveiro para poder sacar adelante su plan. Él ya ha comentado varios realitys en televisión y por tanto es consciente de que el concursante apartado suele despertar pena en la audiencia. No obstante, no creo que el señor Montes tenga posibilidad alguna de ganar. Quizás la audiencia ha decidido salvarle para garantizar la continuidad del espectaculo hasta el final del concurso y no por cariño, como él imagina.

No entendí la expulsión de Katia, a la que he criticado duramente en este blog. Si alguien merecía llegar a la final, era ella, a pesar de la soberbia que a veces evidenciaban sus decisiones y actitudes. Katia siempre ha sido fiel a sus ideales y pensamientos, y en ningún momento se ha echado para atrás a pesar de las decisiones que la audiencia ha venido tomando las ultimas semanas. La hermana de Cristiano Ronaldo podría haber reculado e intentar arreglar las cosas con Nacho Montes, pero no lo ha hecho. Eso es lo que debería valorarse en un concursante. La coherencia y valentía sin miedo al fracaso. Katia derramó muchísimas lagrimas al enterarse de su primera y segunda expulsión, y es que la audiencia, no permitió a la participante compartir palafito con Rafa Lomana, algo que hubiera sido cuanto menos, interesante, ya que ambos chocaron en el pasado y quizás ahora que Katia había descubierto al verdadero Nacho Montes, se hubiera producido una alianza entre ambos concursantes de cara a esta recta final. Pero la realidad es que que Lomana seguirá con la diva negra en el palafito otra semana más.

Lo que es indudable, es que Abraham gana puntos para convertirse, bajo mi punto de vista, en el ganador indiscutible de esta edición. El guaperas de Gandía shore es, a parte de claro y directo, trabajador y también un gran superviviente por ganar todas las pruebas de recompensa e inmunidad. Que gracia me hizo la reflexión que Montes compartió con Abraham, al decirle que él tenía menos poder por muchas pruebas que ganara, ya que la gente siempre le salvaba a él. Declaración repleta de la chulería y la prepotencia que baila alrededor de este personaje. Si demostrara algo de esa inteligencia de la que el presume, no afirmaría tal cosa, puesto que él nunca se ha medido junto a Abraham en unas nominaciones; pero que el estilista suba, que la caída sera más fuerte.

Esta semana son dos los nominados: el desterrado por voluntad propia y el marido de Benenito, tanto monta monta tanto. Nunca pensé que diría esto, pero espero que la gente salve a Amador. Más que nada para que Nacho vuelva a reencontrarse con su amiga Marta Valverde y así no tener que ver esa cara de mala leche durante la gran final.