Frigenti se sintió mas que decepcionado ante la actitud mediocre que tomó el hijo de Kiko Matamoros. Estamos hablando del concursante que dos semanas atrás acusaba por activa y por pasiva a Amador Mohedano de ser un chismoso y un correveidile. Lo que está claro es que Diego no es esa persona retraída que yo defendía hace dos semanas en este blog; definitivamente, ha sido una palmera y no un buen concursante, resultando un pésimo compañero, ya que no ha dudado en vender a los participantes a cambio del protagonismo que nunca obtuvo dentro del concurso.
Matamoros puso en el disparadero a todos sus compañeros tras delatar a Rebeca, afirmando que la hija de Francisca, la cual debería ser concursante en la próxima edición de Tu Cara Me Suena tras sorprendernos a todos con su improvisada actuación musical, había narrado con pelos y señales la historia que envuelve a la reina del gloss y que viene a gozar de gran importancia: Oriana morreándose con ese concursante de Gran Hermano 14 cuyo nombre no recuerdo. Lo más llamativo es que Diego utilice términos de tanto peso como sinceridad, cuando el de cobardía le sienta mucho mejor. Si realmente hubiese tenido valor, habría hecho participe a la audiencia de esta información durante su estancia en Supervivientes, quedando como un señor, sin miedo a las consecuencias que esa decisión le habrían acarreado; pero es más bonito irte a casa y dejar a tus compañeros en horas bajas, para posteriormente venir y poner a una concursante en el disparadero, asegurándote que tu nombre empiece a sonar dos meses después del comienzo de esta aventura. No siento ninguna animadversión contra Diego, y como he escrito al inicio de este post, siempre defendí su actitud y su manera de jugar sus cartas, creyendo en un Diego sincero y noble, de esos que hemos echado en falta durante las ultimas ediciones de varios programas de este género. Pero debo retactarme y ser coherente con lo que ayer vi: una traición en toda regla, originada por un chivatazo fuera de tiempo, puesto que Diego no va a enfrentarse a la reacción de sus compañeros durante las próximas horas, librándose del hambre y de las calamidades a las que están expuestos sus compañeros. Eso sí, seguro que esto le valdrá para ser el máximo protagonista del debate del próximo miércoles y para pasearse por algún que otro plató. Objetivo conseguido: padre e hijo en el mismo negocio. ¿No resulta poético?.
Finalmente, fue
Carolina la expulsada, algo bastante predecible, como bien apuntaba mi querido
@dvdcano ayer en su imprescindible blog
'Desde el palafito'. Desconozco la cantidad de mensajes y llamadas que está recibiendo el programa, pero me temo que la participación de la audiencia con respecto a las decisiones eliminatorias es bastante inferior a la que se da en
Gran Hermano, donde desde casi el principio del concurso, se forman plataformas de usuarios que defienden a determinados concursantes invirtiendo dinero que salvaguarde la continuidad de sus favoritos en el concurso. Es lo bueno que tiene
GH, que no solo juegan los de dentro. Son también los fans, que se reúnen en diversos blogs y redes cada año, los que compiten entre ellos. Y
es que las expulsiones de este año en Supervivientes,
resultan inesperadas por gran parte de los que comentan el reality en las redes sociales. Esto respondería a una posible baja participación de los espectadores,
otorgando el máximo poder a ese reducido público que vota semana a semana y que no representa a la mayoría de la audiencia. Para prueba de ello, la única plataforma que se ha montado en internet en esta edición de
Supervivientes:
Los Orianistas,
que han votado a mansalva para que Tony continuase semana a semana a pesar de que el concursante no diese ningún tipo de juego. Es lo que venía a decir; mientras que en
Gran Hermano, se formaban varias plataformas de apoyo:
Argiristas,
Susargistas,
Igoristas,
Wallistas...,
la posibilidad de una decisión más representativa era mucho más elevada que en Supervivientes, que únicamente nos encontramos ante los
Orianistas, y es por eso que ayer,
Carolina Sobe fue la expulsada aunque fuese la menos votada en las encuestas de varios portales de televisión,
siendo justamente Tony el que encabezaba todas las encuestas para salir eliminado del programa. Pero ya se sabe, aquí manda el televoto,
un sistema bajo mi punto de vista,
anticuado y que termina frustrando a los seguidores de este género.
Que un SMS con la crisis que hay,
cueste 1,45, resulta una barbaridad que no todo el mundo se puede permitir.
Mejor sería si en vez de hacernos preguntas por la aplicación de MiTele,
nos permitiesen votar gratuitamente a los nominados. Un voto único por Smartphone y listo. Desde luego, que alternativas hay muchas al sistema de votación actual, obsoleto y fuera del alcance económico de muchos espectadores.
No estaría mal que desarrollasen una aplicación cuya descarga costase 1,45 (lo que vale emitir un voto mediante SMS), pero que sirviese para votar durante todo el concurso...
Carolina venció a
Vivi Figueredo y logró hacerse un hueco en el Palafito junto al peso pesado
Rafa Lomana. Ambos son los que a fecha de hoy, más me atraen.
Vivi ya podría haberse largado la semana pasada, y es que sigo manteniendo mi opinión de que, la expulsión de Leo si fue una verdadera injusticia.
Si los que expulsaron a la jugadora de poker tenían esperanzas en que el gran Lomana fuese a tener algún tipo de rollito erótico festivo con Viviana, han salido escaldados.
Y ante tantas bajas, se me antoja una repesca. Sería delicioso poder disfrutar de Antonio Tejado de nuevo en la isla, o de Suhaila, Pelopony, Aran Aznar y como no, de la gran Leo Margets, mejor superviviente de esta edición bajo mi punto de vista, junto a Rafa Lomana. Lo que no sería normal es que optaran a esta segunda oportunidad concursantes como Oriana y Anabel Pantoja, que suplicaron la expulsión sin parar. Lo de la repesca, llegados a este punto es lo más positivo que le puede ocurrir al programa para cubrir las bajas actuales. Al menos, ya han estado en el concurso y resultaría más que interesante observar ciertos reencuentros, como el de Chiqui con Pelopony, o el de Suhaila con alguna de estas anteriores...
Los nominados finales de esta semana son Rebeca, (como sanción por el chivatazo), Amador Mohedano, Yong y Nacho Montes. No me gustaría que fuese Rebeca la eliminada. Es evidente que ha incumplido con una norma del concurso, pero ha sido traicionada en toda regla y puesta en el punto de mira injustamente. Yong se está desinflando, y Amador me resulta un pesado absoluto. Sus historias personales y su amor por Rosa Benito me interesan lo mismo que los trabajos discográficos de su hija Chayo Mohedano.