Esperando ''Looking''

Falta poco para que se estrene Looking, nueva serie de temática homosexual, así que nos encontramos en el momento perfecto para hacer un repaso a su predecesora Queer as folk, emitida en Cuatro.

Es innegable que la serie originó una ola de críticas, y era de esperar al exponerse por primera vez temas polémicos como la adopción homosexual, el consumo de drogas, la inseminación artificial, etc; y es que ya se sabe, a día de hoy sigue abundado ese tipo de persona heterosexual al que se le llena la boca afirmando aceptar la homosexualidad (como si fuese algo que hubiese que aprobar) por disponer de varios amigos homosexuales. Hasta aquí bien. Es más, socialmente queda 'súper' tener un amigo gay, pero la realidad es que cuando esta serie mostró la homosexualidad en su totalidad, con sexo gay incluido, la comodidad se esfumó y surgieron las contrariedades: Yo los respeto, pero no hay necesidad de llamar la atención, o Yo respeto a los gays, pero no a las locas fueron algunos de los comentarios más recurrentes para el homofobo disfrazado de tolerante. Cuidado, que dentro de la homosexualidad también la homofobia está presente, y es que no hay peor maricón que el que reniega de algunos homosexuales por el simple hecho de que estos actúen con cierto amaneramiento, como si uno no pudiese comportarse como desee. Y luego está el homosexual que presume de discreción rechazando todo tipo de movimiento gay, a pesar de poder gozar de ciertos derechos gracias a tales reivindicaciones lideradas en muchos casos por estas 'locas' que tanto rechazan. Y ni hablar del típico gay que dice ser bisexual, considerándose superior por adoptar el rol de 'activo' en la cama, como si esto le hiciese más hombre, por no decir menos maricón; normalmente, a este tipo de sujetos, cuando los metes el dedo en el culo, te suelen robar hasta el reloj, pero bueno, de todo hay en esta vida...

Pues de todos estos temas trata Queer as folk, y lo hace desinhibidamente, creando controversia como no podía ser de otra manera. Probablemente lo que mas incomodó de la serie a una audiencia heterosexual fueron las escenas de realismo erótico o el reflejo de la problemática del VIH en la sociedad, mostrada bajo mi punto de vista de una forma realista, natural y enriquecedora.

Otro tema que tampoco se obvió fue el de las relaciones entre mayores y menores de edad, y el vínculo entre una madre mariliendre con su hijo homosexual y el de padres homofobos.

La serie fue elogiada por enfrentarse directamente con la política conservadora y discriminatoria de algunas partes de Estados Unidos, y es que Queer as Folk independientemente de sus tramas, no deja de ser toda una declaración de intenciones con aspiraciones reivindicativas contra el gobierno americano que se cumplen en la mayoría de sus enredos argumentales.

Queer as folk será recordada por su música, su estética dance y sus reflexiones sobre el miedo a la soledad, el compromiso, la paternidad, el sida y el rechazo, y como no por la clasificación homosexual de la que escribía al principio de este post; una categorización impuesta por la sociedad en muchos casos, que recoge desde el metrosexual, la loca, el enarmariado hasta el estándar. Lo que no cabe duda es que QAF ha hecho historia gracias a su franqueza y a su atrevimiento tratando temas sin ningún tipo de pudor ni de vergüenza; yendo más allá al mostrar al homosexual como héroe y no como un coprotagonista que se dedica a dar consejos de belleza a una tía buena. Queer as folk descubrió cuestiones que hasta hace poco tiempo estuvieron silenciadas, aprovechando las mismas para lanzar críticas sociales en muchos y diferentes aspectos.

Tendremos que esperar para comprobar si Looking está a la altura de su predecesora, ya que esta dejó el listón muy alto.