Análisis 'La Voz' : Los pros y los contras de un moderno show musical

Analizamos el nuevo concurso estrenado ayer en Telecinco de la mano de Jesús Vázquez y que ha batido récords de audiencia. Aunque sí cabía esperar cierto éxito, el dato de 'La Voz' habrá dejado atónito a más de uno, ya que se ha arrasado en su primera emisión. ¿El por qué? Vamos a verlo.

PARA RECORDAR: Cuando Antena 3 puso en marcha 'El número 1' sabía yo que no iba a hacer mucha pupa a la competencia, ya que nos ofrecía lo mismo (de un modo más sugerente) al show musical por excelencia, 'Operación Triunfo'. Sin embargo, el concepto de 'La Voz', o por lo menos, lo que conocemos hasta ahora de él, se aleja totalmente del mítico 'OT'. Si en el ya fallecido concurso, el jurado buscaba interpretaciones impresionantes con gorgoritos y voces ultrapotentes, capaces de cantar de una copla, a rock, pasando por el pop más latino, en este nuevo espectáculo quieren voces personales, y como dijo Melendi anoche a una concursante "no quiero que seas versátil, quiero que seas tú". Y eso es en lo que tanto falló en 'OT', no buscar la originalidad sino la perfección. Otro punto bueno del show es la nueva temática, jueces que se dan la vuelta y le tienen que dar al pulsador, cosa que le da tensión... Pero...

PARA OLVIDAR: Lo peor de 'La Voz' son los jueces, o jurados, o como sea ahora que se llamen. Cuando el concursante tiene la posibilidad de optar a un miembro de las sillas, y tiene que pararse a elegir (póngase el caso de la chica del ukelele) no hay variedad de estilos musicales donde se puedan identificar. Es decir, han cogido a 4 jurados del mismo palo: el pop latino. Si bien, el que más se aleja es Melendi, Rosario, David Bisbal y Malú no aportan nada nuevo. Son voces bonitas, pero no cuadra que busquen "originalidad" y nos pongan a estos. Un servidor echa en falta a otros tantos cantantes de este país, cada uno de un género musical y con voces muy personales, quizás con menos tirón público, pero que aportarían algo más que una simple mano en un pulsador. ¿No sería mejor que en vez de Rosarillo estuviese una Vega o Virginia Labuat? ¿O que en vez de Malú fuese Luz Casal? ¿O en vez de David Bisbal un Dani Martín?

EN CONCLUSIÓN: Entretenido formato que puede estar bien en sus primeras galas (las audiciones), si evitamos el contacto visual con Bisbal o los argumentos de Rosario...

CALIFICACIÓN: ***